"Nuestro Pequeño Enredo" (TERMINADA)

~XVI~

Toque la puerta pero no respondía, hací que decidí entrar con los ojos cerrados por si estaba equivocado, cuando entre no había ruido por lo que abrí mis ojos y ví que estaba dormida, noté que abrazaba a algo y me acerque "gracias a Dios" digo, no es como si alguien hubiera entrado ¿No?, ví que dormía muy plácidamente entonces salí de nuevo, podíamos ir de compras mañana después de todo estábamos juntos y eso era lo que quería, me senté en el sofá y puse una película, la verdad es que era un poco incómodo dormir ahí pero quería que Aide se sintiera cómoda, después de todo acababa de llegar, sugerí vivir juntos por impulso pero sinceramente luego de recapitular, ¿Quien demonios le había dicho a Vanesa, que Aide estaba embarazada? Me pregunté también ¿Quien había enviado la foto de Aide, si Alexis no quería que supiera? ¿Cómo supo Vanesa donde vivía? Así que vivir juntos era la mejor opción además de que necesitaba estar seguro de que estaban bien y con la loca de mi ex por ahí la verdad que me dejaba con pendiente, ellos serían mi familia ahora por lo que quería que estuviera cerca. Escuché pasos en el pasillo y me levanté - solo necesito agua- dijo Aide acercándose a la cocina, andaba descalza y está vez sus uñas eran blancas, traía el cabello suelto, era realmente largo ya que le llegaba a la cintura, vestía su pijama que consistía en un pantalón y un suéter de borreguitos en color amarillo, cuando terminó de beber agua dejo el vaso a lado - perdón- dijo viéndome apenada jugando con sus manos -¿Por qué?- pregunté con una sonrisa frunciendo el ceño -lamento irrumpir de esta manera tu vida- dijo ahora rascando su cuello un poco
- de hecho, creo que llegaste en el mejor momento- dije levantandome del sofá para acercarme a ella lentamente - amo que estés aquí y agradezco inmensamente que seas tú la madre de mi hijo- dije quitando la mano de su cuello el cual estaba un poco rojo para acercarla a mí y abrazarla, sentí que se calmó un poco cuando recibió el abrazo abiertamente, luego me separé poco a poco para tomar su mano y llevarla a el sofá - vamos a ver una película ¿Quieres?- ella asintió y nos sentamos juntos, había escuchado que en el embarazo las mujeres necesitan mucha atención ya que su humor variaba debido a el cambio, así que me acerque un poco y pase mi mano por su espalda para rodearla con mi brazo por la cintura mientras tocaba su vientre - me esforzaré mucho para que nazca bien- dije recargando su cabeza en mi pecho y dejando un beso en ella, ella puso su mano sobre la mía - perdón por no cuidarme- dijo con voz temblorosa y supuse que estaba llorando por lo que la rodee con ambos brazos - oye, no te atribullas todo el esfuerzo ¿Si?- dije tratando de parar su llanto - ambos lo hicimos y no me arrepiento- dije apretándola un poco contra mí, mientras sentía su mano subir por mi cuello tratando de inclinarme hacia ella a lo que accedí rápidamente acercándome a sus labios, amaba esa suavidad, su respiración chocando con la mía mientras poco a poco nos fundiamos en un beso, nos separamos por falta de aire, entonces choque nuestras narices mientras ambos sonreíamos
- necesitaba esto- dijo ocultando su cara en mi cuello - yo igual- conteste mientras dejaba un beso en su hombro y la apretaba suavemente
- creo que no veremos películas hoy- dije levantandola en mis brazos para dirigirnos al cuarto entre risas, la recosté suavemente en la cama y me acomode a lado de ella abrazándola por atrás mientras formaba líneas imaginarias sobre su vientre y posaba mi cabeza entre su cuello -¿Que crees que sea?- pregunté mientras ponía mi brazo debajo de su cabeza - no lo sé- dijo volteando a verme -¿y tú?-
- yo digo que será niña- dije besando su mejilla - de alguna manera me siento ansioso contigo aquí- dije acercándome más a ella -"ah"- se quejo - me aprietas- dijo entrelazando su mano sobre la mía - perdón- dije riendo un poco, estuvimos así hasta la mañana siguiente, me levanté debido a la insistencia de los golpes en la puerta - maldita sea- susurré, al parecer Aide no se había despertado por lo que tal vez perdonaría al pobre ingrato que tocaba la puerta como si su vida dependiera de ello, me levanté suavemente dejando su cabeza en la almohada y salí hasta la puerta, era Vanesa -¿Que quieres?- hablé por el micrófono - necesito que hablemos-
- no tengo nada que hablar contigo, vete- dije alejándome de la puerta mientras insistía con los golpes, regrese y abrí la puerta y enseguida ella corrió a abrazarme -¿qué estás haciendo?- dije quedándome estático
- aborté- dijo apretándome más fuerte, mientras sentía como sus lágrimas mojaban mi hombro, estaba sorprendido -¿Que? Vanesa estás llegando muy lejos...- tome sus brazos y la aleje un poco - fue hace unos meses no quería afectar tu carrera, se que tus padres no nos habrían apoyado...-
- ¿De qué demonios hablas?- dije confundido -y ahora tu me dejas para tener un bebé con otra- dijo volviéndo a abrazarme - no me dejes- no sabía que decir así que solo la abracé, no podía creerlo al final si tenia algo que hablar con ella
- vayamos a otro lado- dije alejándome de ella para llevarla fuera,
Aide estaba dormida y no quería que escuchará esto, aún estaba frágil. Fuimos a una cafetería cerca de la casa y comenzamos a hablar, al parecer Vanesa desarrollo una enfermedad hace menos de un año y la había estado tratando en silencio -estaba embarazada, no quise decirtelo antes por miedo luego de un mes y debido a mi enfermedad tuve un aborto espontáneo, fue cuando me fui de "vacaciones"- finalizó, había notado que ella bajo de peso pero supuse que era debido a alguna dieta ya que ella siempre fue muy cuidadosa pero ahora que la veía ella parecía mucho más delgada, solía usar ropa un poco olgada, por lo que no lo noté - debiste contarmelo- me sentía un poco culpable ya que en los últimos meses había estado ocupado con la universidad y luego con Aide, estaba tan centrado en mi que no note cuando Vanesa se encontraba mal
- tenía miedo- dijo cubriendo su rostro con sus manos mientras lloraba, me acerque a ella y le di un abrazo era lo mínimo que podía hacer en ese momento -entonces ¿de qué se trata?- pregunté refiriendome a su enfermedad - hipertiroides- dijo secando sus lágrimas y soltandome para mirarla -he estado tratandome, por lo que no ha avanzado demasiado, se que ahora haz decidido ser padre pero... ¿Solo es por el bebé no es así?- dijo tratando de sonreír con lágrimas en sus ojos, me di cuenta de que aún la quería tal vez no con la misma intensidad de antes pero seguía en mi pecho, habiamos pasado muchas cosas juntos y era difícil olvidar todo el apoyo que me dió cuando peleaba con mis padres, y con la perdida del abuelo.
- te apoyaré en lo que pueda de ahora en adelante- realmente quería apoyarla después de todo, alguna vez la amé como a nadie y había sufrido la perdida del hijo que nunca pude tener debido a mi ignorancia, había pasado todo eso ella sola y quería compensarlo, sin embargo no pensé en las consecuencias de aquellas palabras mías.
Cuando terminamos de hablar volví al departamento en donde había dejado a Aide dormida, ví la hora en mi reloj
*Mierda* eran casi las 12:00, me había ido con Vanesa a las 8:00 aproximadamente, probablemente ya tenía hambre, abrí la puerta y entre corriendo encontrándome con ella en la cocina - perdón tuve que salir- dije un poco agitado ya que había corrido
- ah, no te preocupes debió ser urgente, estás sudando- dijo riendo un poco para regresar a cortar la verdura sobre la mesa, me acerque a ella y recarge mi cabeza en su hombro
-¿Que harás?- dije curioso al ver la estufa encendida - solo un poco de pasta, perdón por tomarla si avisarte- dijo mientras ponía la licuadora a trabajar -¿bromeas? Estas en tu casa, puedes hacer lo que quieras- la tome de la cintura y le di vuelta para abrazarla, mientras ella colocaba sus manos detrás de mi cabeza - me siento mal- dije haciéndo un puchero -¿Que pasa?¿Te duele algo?- dijo poniendo una mano en mi frente mientras colocaba la otra en la suya -no tienes fiebre- dijo frunciendo el ceño, su reacción me hizo sonreír y me acerque a darle un beso -¡ah!¡me duele aquí!- dije poniendo una mano en mi pecho ganandome un golpe en el hombro - tonto- dijo seria volteando a apagar la licuadora, agrego la salsa a la olla y me acerque de nuevo, mientras me daba la espalda coloque mis manos en su vientre dejando besos en su nuca -¿Que haces?- dijo riendo mientras movía su cabeza de lado - estoy dándole amor a mi bebé- entonces puso sus manos sobre las mías - el sábado es la cita ¿Irás conmigo?- preguntó con voz temblorosa entonces la acerque más a mí - por supuesto que iré, me e perdido tres no pienso perder otra- dije moviendo mis manos para acariciarla -¿podemos comer ya?- dijo dejándome una vez más atrás para apagar la estufa, comimos un poco rápido y luego sugerí ir al centro comercial. Aide se había ido a cambiar, poniéndose un lindo overol en color rosa pastel que hacía resaltar su abdomen curvado y una blusa blanca de manga larga, yo en cambio tome unos jeans y una playera blanca -¿nos vamos?- tome su mano -si- note que había hecho una cola alta con su cabello, se veía realmente linda, bajamos al auto y nos dirigimos al centro comercial.