Hetalia One-shots

🎃Especial Halloween (1/?)🎃

Fui invitada a una fiesta de disfraces interesante y aterradora por Halloween. Bueno, eso era lo que decía la invitación de America, estaba en anónimo pero, era obvio que era él. Como sea, me vestí de enfermera, aunque...el vestido estaba algo pegado, por lo menos me llegaba por arriba de las rodillas. No era tan corto como creí, hace mucho que no me lo ponía.

Al terminar de arreglarme adecuadamente para la ocasión, salí de mi casa y me dirigí a la casa de America. Al estar cerca me di cuenta que estaba muy bien adornado, también había luces de colores y música a todo volumen. Rodé los ojos divertida, no podía creer que America se tomaba tan en serio ese día.

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- ¡hola!.- exclamó el estadounidense, vestido de joker.
- ¡Wow! ¡Tu disfraz es excelente!.- dijiste con emoción.
- ¡gracias! Lo escogí porque está de moda.- te guiñó el ojo.- ¡entra!

Agradeciste y entraste. La casa por dentro estaba aún más adornada, en verdad se había esforzado bastante.

Alguien tocó tu hombro haciendo que te asustaras y brincaras. Cuando volteaste sonreíste de alivio al ver a Alemania, Italia y Japón. Se veían realmente apuestos, Alemania estaba vestido de hombre lobo, Japón de fantasma e Italia de demonio.

- ¡chicos! ¡Se ven muy lindos!.- comentaste.
- tú te ves también muy bien, T/N-san.- Japón sonrió levemente.
- Si, la verdad que ese traje...te favorece mucho...- las mejillas de Alemania se sonrojaron.

- T/N te ves muy sensual~

Alemania golpeó a Italia y lo regañó mientras tanto, Japón hacía reverencias a la mujer como para disculparse con ella. Italia a veces era muy...directo.

Después de ese "incidente" (según Alemania y Japón), Francia, Inglaterra y Rusia se acercaron a la mujer para saludarla y bueno...Francia...empezó a coquetear con ella. Luego se acercaron China, Estados Unidos y Canadá. El de en medio mencionó con un micrófono que jugarían a "7 minutos en el cielo", así que debían dejar algún objeto que los caracterizara (conforme a la vestimenta que tenían puesta) en una bolsa para jugar de forma apropiada.

- ¡muy bien! La primera será~ ¡ouch! ¿Una jeringa? ¡¿De quién es esta jeringa?!

America sacó el primer objeto que había sido el que tú habías dejado. Te acercaste a él para esperar a que sacara otro objeto. Lo miraste fijamente y esperaste hasta que lo sacó, era un collar rojo con púas de ¿perro?

- ¡¿de quien es esto?!
- es mío.

Alemania se acercó, y te sonrió algo avergonzado. Mientras tanto, America dejó la bolsa a un lado y los metió en un armario.

- Recuerden~ ¡Pueden hacer lo que quieran por solo 7 minutos!
- si, si, ya entendimos...
- te ves ansioso Alemania.- rió burlón y divertido haciendo enojar a Alemania.- bueno, ¡suerte!

Y sin más, cerraron la puerta del armario. Estaba obscuro y angosto, tan apretado que sus cuerpos frotaban entre sí, sin poder evitarlo. Alemania suspiró, esto llamó la atención de la chica, quien intentó divisarlo, pero era imposible. En verdad no podía ver nada.

- L-Lo siento...- dijo el alemán con una suave voz.- en verdad no te toco a propósito...
- reíste.- no te preocupes, no me molesta en lo absoluto.
- ¿no te molesta? Bueno...eso es...algo peligroso de decir...- tartamudeó.
- ¿por qué?
- Bueno...es...muy provocativo.
- ¿ah si?

Te burlaste con tono pícaro pero dejaste de reír cuando sentiste como Alemania te cargaba y te ponía encima de sus piernas. No te lo esperabas pero no te molestaba tampoco. Pusiste tus manos sobre sus hombros y el puso sus manos en tu cintura, haciéndote sonrojar.