Llegaste al hospital después de algunos minutos. Estabas tan apurada y preocupada que te fuiste de la casa de Islandia sin explicación. Al llegar a la habitación que te habían indicado unas enfermeras, abriste la puerta y notaste que solo estaban Japón, Prussia e Italia. Prussia se notaba preocupado y tenía los ojos rojos e hinchados, al parecer había llorado. Mientras tanto Italia mantenía una expresión seria y fría. Japón tenía la expresión confusa.
- ¿¡Qué sucedió!?.- cuestionaste preocupada.
- Alguien hirió a mi hermano...
- ¿¡quién!?
Por un momento, volteaste a ver a Italia y al notar tu reacción empezó a explicar que él no había sido.
- No he sido yo. De hecho, solo venía a dejarles algo en claro a ellos.- señaló a los alemanes.- no seré aliado suyo si siguen acercándose a T/N.- comentó el italiano con seriedad.
- ¡Italia! ¡E-eso es-
- Haría lo que fuera por ti...T/N. Y por supuesto que haría a todos mis enemigos solo para protegerte...- sonrió coqueto mientras tomaba la mano de la chica y la besaba.
- Yo venía por lo mismo...pero ya que también estás aquí, Italia, te diré que tampoco seré tu aliado. Ni de Alemania y Prussia-san ni de ti.- Japón frunció ligeramente el ceño y se fue de la habitación, no sin antes hacerte una reverencia,
- p-pero acabarán perdiendo...es peligro-
- me parece bien. Es mejor que estar aliado con hipócritas que solo quieren el amor de T/N.- gruñó.- T/N...no los escojas a él...es peligroso.- y sin más, salió de la habitación.
Italia te sonrió una última vez y luego dejó un beso sobre tu mejilla y después salió de la habitación también. Ya habían pasado varios meses y ya ibas conociéndolos mejor. Pero empezabas a percatarte de que ya nadie se llevaban bien entre ellos. Los países masculinos tenían problemas y las amistades comenzaban a romperse.
~☆~★~☆~★~☆~★~☆~★~☆~★~☆~★~☆~★~☆~★~☆~★~☆~
Al llegar a tu casa te sentías deprimida...no querías hacer absolutamente nada. Poco a poco notabas los problemas que habías causado, todavía te faltaba buscar al culpable de lo que le había pasado a Alemania.
De pronto el celular que estaba guardado en tu pantalón comenzó a sonar. Suspiraste y después lo tomaste y contestaste.
- ¡hola!.- saludó energética.
- Mariana...¿qué sucede?
- oh por dios, linda, te noto muy decaída, ¿está todo bien?.- su tono cambió a uno de preocupación.
- estoy bien...solo cansada, tengo mucho trabajo que hacer.- mentí.- ¿qué pasó?
- oh! Es que estoy feliz...España ya mejoró y ya lo dieron de alta! Voy a recogerlo hoy.- comentó alegrándose de nuevo.
- Mariana...no lo recojas...más importante, ven a mi casa.
- p-pero...
- solo hazlo.
Y sin más colgué. Me preocupaba como reaccionaría mi mejor amiga si le decía la verdad sobre España pero tenía que hacerlo...si no sería demasiado tarde. Y ella es una buena persona...no lo merece...
Luego de algunos minutos, escuché el timbre de mi casa, así que me levanté de mi asiento para abrir. Ella se veía deprimida, me imagino que fue porque no había podido recoger a España. Me saludó con una ligera sonrisa y se sentó en el sofá de la sala. Me senté enfrente de ella.
- ¿Qué sucede? ¿Por qué me pediste que viniera tan de repente?.- preguntó preocupada y curiosa.- ¿está todo bien?
- Yo...bueno...lo que pasa...pues...es que...
Suspiré. Ladeó la cabeza mirándome. No sabía cómo decirle la verdad, pero si no lo decía rápido y directo, me sería imposible decirlo.
- Mariana...somos mejores amigas desde hace ya varios años...así que iré al grano. España no te soporta...te odia..y me dijo que eres una maldita acosadora que no deja de molestarlo.
ESTÁS LEYENDO
Hetalia One-shots
FanfictionEstas serán mis primeras historias en Wattpad! Espero que les guste (≧∇≦)
