Turista (Italia x Lectora)

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NOTA: Todos serán humanos ^^
♥︎ Disfruten la lectura ♥︎
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El sueño de T/N T/A era recorrer todo el mundo, así es, ella sola. Creía que no necesitaba a nadie más a su lado para disfrutarlo aún más. Por suerte tenía ahorrado mucho dinero para cada viaje, pues se esforzaba bastante en su trabajo para conseguir suficiente dinero y ahorrarlo. Como era cercana a su jefe, le daba permiso de algunas vacaciones de vez en cuando, a parte de que se lo merecía como dije anteriormente, por su arduo trabajo.

Su jefe le había dado permiso de viajar a Italia, su país favorito, con una sola condición, trabajar algunas pocas horas para que no se atrasara tanto cuando regresara a su respectivo país. Probablemente la gente diga que trabajando en otro país sería como trabajar en el mismo país, sin embargo, se equivocaban, T/N todo el tiempo veía el lado positivo de las cosas, diciendo que se lo recompensarían y así fue, pues su jefe le dejó quedarse un mes y medio en Italia.

Trabajaba en la mañana y en la tarde salía a recorrer las hermosas calles de Italia. Incluso en la noche. Amaba recorrer todo en la noche también, era más tranquilo, aunque solía desvelarse siempre disfrutaba las caminatas nocturnas.

Una vez, decidió cambiar de rutina. Se alistó en la mañana para salir, pues desde que había llegado, no había salido durante la mañana de la casa en donde se hospedaba, as que pensó que sería buena idea. Había mucha gente por todos los lugares, definitivamente era uno de los países más populares.

Entró a una cafetería para comenzar bien el día. Pidió su desayuno y se sentó en una mesa alejada pero que tenía un bonito ventanal. Una gran vista. Afortunadamente no había tanta gente en ese restaurante así que podía adelantar algo de su trabajo mientras desayunaba ahí.

De pronto escuchó una jadeante pero suave y dulce voz. Cuando alzó la mirada, se percató de que un chico más o menos de su edad estaba enfrente de ella, lo único que los separaba eran la mesa y las sillas. Se notaba que había corrido demasiado, así que decidió dejar su laptop a lado para preguntarle si estaba bien o si necesitaba algo, obviamente en italiano.

- e-eh, disculpa, ¿estás bien? Parece como si hubieras corrido desde un lugar muy lejano...- mencionó la mujer con algo de preocupación.
- s-si...p-para ser sincero...estaba huyendo...de mi...hermano...- comentó entre jadeos.
- siéntate por favor, pediré algo por ti...
- ¡n-no! Estoy bien.- alzó su vista y sus ojos se encontraron con los de la bella mujer.- oh, jamás te había visto por aquí. No eres de aquí, ¿verdad?.- cuestionó olvidándose por completo que estaba exhausto. Incluso su rostro había cambiado por uno lleno de curiosidad.
- así es. Soy de T/P pero me gusta viajar por todo el mundo. Por suerte en mi trabajo siempre me dan oportunidades para viajar. Tengo dinero ahorrado y es suficiente para ello, también mi jefe es muy bueno conmigo, así que me da permiso cada vez que me esfuerzo mucho en mi trabajo, que es la mayoría del tiempo. Quería viajar a Italia desde hace mucho.- habló con emoción.
- ¡oh! ¿Te gusta mucho Italia?.- preguntó sonriente.
- ¡si! Me encanta Italia.
- ¡es un país muy hermoso!.- exclamó.- oh, siento ser tan maleducado, mi nombre es Feliciano Vargas, ¿cuál es el tuyo?
- soy T/N T/A. Mucho gusto.- sonrió.
- ¡woah~! Eres muy bella~. Lo más seguro es que tengas muchos pretendientes ¿verdad?
- n-no en realidad.- suspiró.- es algo triste pero creo que en otros países llamo más la atención...
- ¡¿eh?! ¡Deben estar ciegos para no darse cuenta de tu belleza!.- frunció el ceño.- oh, es verdad, ¿cómo aprendiste italiano? ¡Es muy bueno!
- gracias. Como me gusta mucho Italia creí que sería buena idea aprenderlo. Estudié durante varios años hasta que fuera perfecto.- dijo con una gran sonrisa.
- ¡ya veo! ¡A parte de linda, inteligente!

Se quedaron charlando algunas horas más. Aunque era muy extraño, en tan pocas horas se volvieron cercanos. Hablaban de sí mismos para conocerse mejor. Era como si fuera por obra del destino.

Desde aquel día, T/N ya no salía a pasear por la noche. Salía en la mañana para encontrarse con Feliciano y en la noche trabajaba. Era una rutina un poco pesada, pero lo hacía solo para verlo. ¿Se podría decir que estaba desarrollando sentimientos hacia él?

Está vez, Feliciano había invitado a T/N a su casa, pues un día le había contado a la mujer que era un gran cocinero, así que T/N le pidió que cocinara para ella, pues le encantaría probar alguno de sus platillos.

- ¡T/N! ¡Estás aquí! Pasa por favor.- el italiano estaba emocionado y mantenía una gran sonrisa.
- muchas gracias Feli, oh, traje vino tinto.- sonrió.
- ¡gracias! ¿Podrías dejar el vino en la mesa del comedor mientras termino de cocinar?
- claro.- su voz era dulce.

Se dirigió al comedor y dejó el vino en el centro de la mesa. Hasta ahora no se había percatado de lo grande y hermosa que era la casa de Feliciano. Estaba muy limpia, y era rústica. Tenía muchos cuadros y una chimenea. Realmente era hermosa su casa.

Cuando Feliciano terminó de cocinar se dirigió al comedor y acomodó la comida en la mesa con ayuda de T/N. Luego se sentaron y empezaron a conversar mientras comían.

T/N estaba un poco deprimida porque pronto regresaría a su país, Feliciano lo notó y su sonrisa se borró. Tomó la mano de T/N y la miró fijamente con preocupación y seriedad.

- ¿Qué sucede? No te ves feliz...¿pasó algo? o...¿te estoy incomodando?
- ¿qué? ¡N-no! Es solo que...- suspiró.- pronto regresaré a T/N. Me siento triste porque ya no podré verte...y...- cuando se dio cuenta de lo que había dicho, se sonrojó.
- T/N.- Feliciano la miró con seriedad y con un ligero sonrojo.- ¿estás enamorada de mí?

T/N no respondió, solo bajó la cabeza, intentando esconder su enorme sonrojo, después asintió. Feliciano se puso de pie y se acercó a T/N, alzó su rostro y la besó. Al principio era un beso lleno de amor, pero luego se volvió apasionado. Tuvieron que separarse por falta de oxígeno.

- ¡T/N...también estoy enamorado de ti!.- exclamó mirándola, tenía un semblante serio pero sonrojado.- ¡así que por favor, no te vayas!

Las palabras de Feliciano movieron su corazón. ¿Cómo podría ignorar a Feliciano? Obviamente no se quería ir pero...¿qué hay de su trabajo? ¿Tendría que renunciar y empezar a trabajar en Italia?

- p-pero...¿qué hay de mi trabajo?.- T/N se levantó de su asiento para acercarse y ver a través de la ventana.
- trabaja para mí...nunca te dije en donde trabajo pero...tengo una empresa. Podrías ser mi asistente y estoy seguro de que me ayudarías, cualquier puesto que te de me serás de gran ayuda.- se acercó a ella para abrazarla por detrás, apoyando su rostro en el hombro de la mujer.- no quiero que te vayas...te necesito...sé que pasamos muy poco tiempo de conocernos pero...estoy seguro que eres mi destino.- se separó de ella para voltearla y verla, posó una mano en la mejilla de la bella mujer.- T/N...te amo.
- yo también te amo...Feliciano. Me quedaré contigo...¿si?.- T/N tenía lágrimas en sus ojos, y una gran sonrisa se formaba en sus labios.

Los ojos de Feliciano se iluminaron y sin más, la besó nuevamente.

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Yyyyyyyyy hola a todas mis hermosas personitas!
Espero que estén SÚPER bien y les haya gustado este one-shot :')
No tenía ideas ggg, espero que haya salido bien :c
Nos vemos hasta la próxima! 🍒🌻🍒

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