Chemical Venemy

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Él mundo en el que estaba metido no era sensillo, las personas siempre intentarían sacar el mayor provecho posible. Como una vez escucho "las personas son creativas para hacerse daño"
Siempre buscarían maneras para lograr sus objetivos, pero no dejara que eso pase, es su trabajo después de todo.

-sería más fácil si tuviera un stand con el cual luchar cuerpo a cuerpo - murmura para sí, no es que odiara el suyo, simplemente no es efectivo para un encuentro

"¿no es hermosa?"
"nunca la había visto así, realmente lo era"

Cuando su stand despertó era tan solo un niño, siguiendo un patrón que ignoraba, hizo acto de presencia cuando él estaba cerca de la muerte, unas cartas cayeron del techo de su habitación y por un momento que él creyó estar soñando lo vio. La vio.

El rugido de un dragón le hizo estremecer en su cama y el terror pasó cuando vio un "hada" acercarse a él y sonreírle.

El dolor de estómago fue un tanto más soportable, seguía allí pero pudo dormir hasta que escucho alboroto cerca suyo, su abuela Yuya y bisabuelo Yuto estaban allí, a un lado de su cama cuchichando entre ellos.

"es diferente, cartas de fusión, realmente no lo esperaba, son bonitas"

"Starving Venemy Dragón, igual a Yuri"

"oh de verdad se parece al tío Yuri, pero este es más tranquilo"

Esas fueron las pocas palabras que recuerda de aquel día. Tiempo después descubrió que alguien había intentado matarle, envenenadole y que cuando vio aquel dragón fue porque estuvo a nada de morir.

Sus abuelos se encargaron de las personas que estuvieron a punto de matarle.

-. -. -. -. -. -. -. -. -. -

-Kailan - llamó su abuela, aunque fuera un hombre era demasiado hermoso, sumando al hecho de que no aparentaba su edad - ¿puedes guardar un secreto? - preguntó sonriendo

-¡Claro! - exclamó alegre, dejando por un momento de lamer su helado

-¡ese es mi lindo nieto! - soltó tan campante, mirándole con orgullo, pasando a jugar con sus mejillas haciéndole cosquillas por el modo en que sus pequeños pellizcos no lastimaban, era tan raro pero nadie más podía hacer eso

Solo pudo reír tratando de no dejar caer su helado. Más de rato, cuando terminó su helado fue llevado hasta un departamento, allí vio a un grupo de hombres y dos mujeres que lucían aterradores, para él solamente y no entendió porque su dulce abue Yuya le llevaba allí

-este va a ser nuestro secreto Kailan - dijo tomándolo en brazos - el pequeño elote es muy necio, ya lo sabes también, pero yo quiero que ustedes estén a salvo - explicó

Asintió, sabía que "elote" era su padre, Jomei, que tenía la mala maña de referirse a su abue Yuya como "tomate viejo" cuando no estaba cerca. Junto a lo terco que era y apenas era un niño ¡que sería de él cuando sea más grande y el necio de su padre esté molestandolo!

-estas lindas personas van a estar protegiendo a tus padres y a ti pero no les debes decir nada a tus padres ni a nadie ¿de acuerdo?

Ignoro que su abue Yuya llamara lindas a un hombre igual de grandote que su bisabuelo Jotaro con una cara llena de cicatrices, junto a otros que lindos no eran pero asintió.

-ellos también van a cuidarte mucho mucho -le abrazo más fuerte, restregando sus mejillas - como yo vivo lejos, puedes pedirles todo lo que quieras

-¿todo lo que quiera? - preguntó, ya tenía mucho más interés

-¡si! ¡Todo lo que mi lindo nieto quiera! - exclamó - pero sin que te vea nadie, ¿vale?

Bloody CrownDonde viven las historias. Descúbrelo ahora