Soft, My Love | Taegi•Yoontae

Prólogo.

Corregido: Jueves 06 de Agosto del 2020.

Park Jimin: un niño de 10 años que estaba convencido de que su mayor de 14 años, Yoongi, sería su Alfa. Jimin entendía la mecánica; llegada a cierta edad te presentabas como Alfa|Omega|Beta y tu cuerpo comenzaría a necesitar el cariño de otro. Entendía el cortejo, una dinámica llevada por los Alfa principalmente, y sabía que luego del cortejo se unían con una marquita que, según su Mamá, "Hace sentir mariposas y delfines en el estómago".
Jimin ya sentía los delfines saltar en su barriga sin necesidad de la marca.
Él insistía en que su lobo era un Omega, que el lobo de Yoongi era un Alfa y que ambos estaban destinados...

Min Yoongi: un joven adolescente de 19 años que ya estaba harto de la insistencia de Mochi y sus padres "¿Cuándo iniciarás el cortejo?". No quería oír a nadie más hablar sobre quién creían era su pareja indicada, y aunque Jimin insistía en pasar los celos con él, no lo haría; no era un animal -no del todo-.
Todo cambió cuando Taehyung llegó de la ciudad de Daegu, con sus preciosos 16 años. Tae no se había presentado aún -un retraso-, así que Yoongi esperó y esperó mientras se conocían... "Yoongi, es Tae." Lo llamaron de su casa con desesperación y asustados. Ese día corrió lo más que pudo de esa cita en la que lo habían metido, corrió como alma que lleva el diablo y entró en el hogar de los Kim.

Kim Taehyung: con sus 17 años se presentó tarde, pero lo hizo. Recordaba haber olido el aroma de Yoongi a cuadras, lo que lo hizo retorcerse del dolor y emoción. Temblaba bajo las sábanas de su nido mientras oía los pasos desesperados en las escaleras; en cuanto entró temió por su vida, pero era Yoongi... Era él y supo cómo cuidarlo, cómo atenderlo y cómo amarlo. A pesar del celo, el cortejo nunca había sido oficial; así que los padres de yoongi y su madre organizaron una fiesta para celebrar la ocasión. Pero nadie asistió...
El cortejo fue formal y Yoongi lo proclamó. Taehyung había encontrado a su Alfa y Yoongi a su Omega; pero Jimin...

•••

ㅡ ¿Qué hay de malo en mí, Yoongi? ㅡPreguntó enojado y lanzando espuma por la boca.ㅡ ¿Por qué no puedo ser tu Omega?

ㅡ Jimin... ㅡSuspiró el mayor tratando de calmarse.ㅡ Por favor, vuelve a casa-

ㅡ No, no hasta que me digas por qué. ㅡYoongi estaba desalineado, repleto de chupones y mordidas, e incluso con una muy notoria ¿Era posible que Taehyung haya marcado a Yoon?ㅡ ¿Y qué es eso? ㅡPreguntó alarmado.ㅡ ¿¡Un Omega marcando a un Alfa!? ¿Es que no sabes poner orden en t-

ㅡ Vete a casa. ㅡY cerró la puerta en su cara.

ㅡ ¡Y-yoonie, n-no me dejes! ¡Seré un buen Omega, s-sólo no...! ¡N-no! No me dejes, hace frío aquí afuera...

•••

Jimin no tardó en rehacer su vida.

Creyó que si el Alfa lo veía con otro Alfa más poderoso que él le darían celos, pero... Se equivocó.

ㅡ ¡Felicidades Minnie! ㅡExclamó el Alfa con el brazo del Omega enredado al suyo.ㅡ Es bueno ver qué al fin encontraste un Alfa que te cuide.

Sí, ese día arrojó varias copas de cristal al suelo.
Era cierto que Jeon Jungkook le daba todo lo que quería, lo rodeaba de caprichos y por momentos se olvidaba de su mierda; pero no. Jimin quería ESE capricho. Jimin quería a Yoongi...

•••

ㅡ ¡Yoon, han organizado un almuerzo entre la comunidad de donantes para niños y jóvenes! Es en la casa de Dami. ㅡObservó con ojos brillantes a su mayor, Yoongi lo miraba entre apenado y triste por su pequeño.

ㅡ Cariño, no sé si sea buena idea-

ㅡ ¡Claro que sí, bu! Soy-, somos donantes frecuentes de la fundación "Niños a Salvo", estoy invitado. Si no ¿Por qué pondrían el boletín en nuestra puerta?

El sabor amargo inundó la garganta de Yoongi mientras era abrazado por esa luz de amor y felicidad. Sabía que no tenía que dejarlo ir, pero le hacía tanta ilusión...
Yoongi terminó de acomodar su corbata y salió camino a la empresa, ser dueño heredero de "BigHit" no era fácil, menos con un Omega que se metía en problemas a cada segundo.

•••

Tae estaba ahí, en la puerta de la casa, con un Pie de chocolate y crema, tocando el timbre entusiasmado. Iba arreglado con su camisa Gucci y sus pantalones de vestir junto a unos zapatos informales. Creyó que no habrían escuchado por la música alta, así que se asomó a la ventana.

ㅡ ¡Hola, Dami! ¡Soy yo, Kim Taehyung! ㅡHabló entusiasmado mirando como todos actuaban raro en las mesas y... El piso.ㅡ ¡Traje un Pie, el favorito de Yoon!

Pero nadie contestaba, todos estaban debajo de la mesa de almuerzo fingiendo no verlo ni oírlo. Jimin estaba detrás de una pared, oyendo todo con rabia y tristeza. Cuando dijo que todos se escondieran, hablaba en serio, no esperaba que el inútil de Taehyung los notara...

Tomó firme su Pie y aguantando las lágrimas, tambaleante, se subió al auto para marcharse a su casa.

ㅡ Debiste verlos, Yoon... ㅡMoqueaba y lloriqueaba con hipo y angustia.ㅡ E-ellos me odian, y n-ni siquiera sé por qué. ㅡSu cónyuge lo abrazaba, intentando calmarlo con su aroma a casa y a él.ㅡ M-me odian... ㅡTae tardó un rato en dormirse, pero lo hizo gracias a los mimos de Yoon y su aroma relajante. Yoongi acarició sus mechones de pelo y lo dejó descansar mientras iba a preparar la cena; estaba cansado, pero Taehyung más.
No era la primera vez que le hacían algo así.

Una vez, hacía un año, cuando Tae había logrado quedar embarazado, perdieron un bebé. Tal vez fue por no estar casados -mala suerte- o si quiera comprometidos, pero aún recordaba cómo Taehyung se culpaba de eso. Se lo había ocultado a Yoongi por miedo a que lo rechazara y abandonara a su suerte; Tae se culpó y se culpó mil veces más.
Ese día en el Hospital, cuando tuvo hemorragia por no haber ido de Urgencia al momento del aborto, se durmió aferrado a Yoongi pidiéndole perdón y diciendo que era un inútil... No podía volver a verlo así.

Esa vez fue el único que estuvo ahí para él, así que ahora se encargaría de no dejar a su Omega solo. No dejaría que su pequeño se culpabilizara nuevamente por cosas de las que no tenía control.

•••

ㅡ ¡Cariño, la cena de fin de año se está acercando! Ya mandé a crear nuestros trajes. ㅡTae estaba feliz y desbordaba alegría, había esperado esa cena todo el año y esperaba poder hablar con Jimin (su anfitrión) sobre el por qué de su exclusión hacia él. Yoongi sonrió, sabía lo importante que era para Taehyung.