Capítulo VI❤️

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-Ya hemos llegado, es ahí - dijo _____ señalando a la casa.

-¿Ahí? - preguntó extrañado el azabache, puesto que aquella casa se encontraba prácticamente en medio de la nada.

-Sí, es allí. Es la casa de un viejo curandero, todos le toman por loco, pero es majo-decía la peli roja con un a sonrisa algo nostálgica.

-Esta bien, vamos-dijo mientras comenzaba a caminar, pero al percatarse de que la joven no se movía, la tomó de la mano, haciendo que ambos se sonrojasen de inmediato

Los dos jóvenes de encaminaron hacia la casa agarrados de la mano. Cuando llegaron a la puerta de la casa, la joven tocó la puerta

-Hola, Aorozu, soy yo, _____ - la peli roja espero unos instantes esperando a escuchar algún ruido proveniente de dentro de la vivienda que le indicasen que Aorozu le hiba a abrir la puerta.

Los dos pecosos se detuvieron en frente de la puerta durante varios minutos. El interior de la casa se mantenía en un silencio sepulcral, y el aspecto deteriorado del exterior de la casa la hacía parecer completamente abandonada.

-¿Estas segura de que es aquí? Esto parece abandonado-dijo inseguro el pecoso.

-Si, estoy segura, solo hay que esperar - decía completamente segura de si misma.

Pero después de un largo tiempo de espera, por fin se escuchó movimiento dentro de la casa.

Y al fin, alguien abrió la puerta. La persona que se encontraba dentro de la casa era un hombre anciano, aparentaba unos setenta y cinco años aproximadamente, tenía una cabellera gris y rizada, que le llegaba a la altura de los hombros.

Sus ojos eran de un color azul intenso, y pareciera que te atravesasen el alma con solo mirarte, su cara estaba arrugada, pero no demasiado, y su estatura era mayor que la de la chica pero menor que la del joven, así  que aproximadamente mediría 1'70m

-_____, ¿quién es él? - pronunció con desconfianza el anciano,mientras señalaba al peli negro con su dedo pulgar.

El tono de voz del anciano hizo que la piel del pecoso se erizase. Ya que aunque fuese más bajo que él, y tuviese una apariencia no muy fornida, su voz era de ultratumba. Sin lugar a dudas, una de las voces más graves que había escuchado un su vida.

Mientas tanto, la peli roja no parecía desconcertada o afligida, es más, se podría decir que se la veía más feliz de lo normal.

Antes de decir nada, la joven peli roja salto a abrazar al anciano.

-¡¡Cuanto tiempo sin verte!!-decía con un entusiasmo desbordante.

-Sí, mucho tiempo, pero ¿quien es él? - dijo el anciano sin tomar importancia del abrazo.

En ese momento a Ace le habría encantado estar en el lugar de aquel anciano,y con solo imaginar el recibir un abrazo de la joven, el vigoroso pirata se sonrojó, pero ninguno de los allí presentes lo notaron.

Una vez que la chica se separó del anciano, se relajó un poco.

-No te preocupes Aorozu, es solo un estrangero-dijo sonriente y con un tono que intentaba sonar tranquilizador para el viejo

-¿Y que queréis? - decía cortante el peli gris.

-Solo lágrimas de zorro albino, ¿aún te quedan? - dijo sonriente la peli roja, que sin que el anciano se diese cuanta, tomó la mano del azabache, ya que le veía bastante nervioso, y pensó que tomarlo de la mano le tranquilizaría.

-Depende,¿Cuantos gramos queréis? - preguntó Aorozu un poco más confiado.

___ miró a Ace en busca de una respuesta a la pregunta del anciano. El pecoso tardo en raccionar, y cuando por fin lo hizo, sacó la lista de la compra de su bolsillo y empezó a buscar.

-Lágrimas, lágrimas, lágrimas.... - susurraba el azabache mientras buscaba el ingrediente en la lista.-Aquí está - exclamó por fin el joven.

-Maldita piña-murmuro por lo bajo-Creo que son ¿50gramos?-dijo inseguro, puesto que no entendía los números de Marco.

-¿Me lo estas preguntando o me lo estás afirmando, chaval? - dijo Aorozu levantando una de sus pobladas cejas.

-Emmm, lo afirmó-dijo vergonzoso, a lo cual, la reacción de la joven fue reír por lo vajo.

-Entoces creo que tengo suficiente, entrad mientras voy a por las lágrimas. - dijo adentrándose de nuevo en su hogar.

-_____, hace tanto que no entras en mi casa que dudo donde está el salón - el anciano de rio por su propio comentario, y siguió hablando-El salón está a la derecha, sentados allí mientras busco las lágrimas.-pidió desde la lejanía del largo pasillo el anciano.

-Gracia por las indicaciones, pero igual me acordaba-dijo sacando la lengua como una niña pequeña.

Una vez dicho esto, los dos jóvenes se adentraron en al casa y se dirijieron al salón, el cual era bastante grande y y elegante, si no fuese por el desorden que había en él.

Los pecosos de sentaron uno al lado del otro en silencio, hasta que la joven peli roja se dispuso ha hablar.

-¿y como es la tripulación  de shirohigue? - dijo con la intención de romper el hielo, pero en su voz podía notarse la curiosidad

-Pues es difícil de explicar, pero intentaré definirlo con el mínimo de palabras... - decía pensativo el pecoso.

-La tripulación de shirihigue es.... ¡UNA GRAN FAMILIA!-dijo cum una gran sonrisa en su rostro.

A la chica que se encontraba a su lado le empezaron a brillar los ojos como a una niña ilusionada y curiosa.

-¿¡Enserio!? Eso es genial-decia entusiasmada la pecosa.A mi también me gustaría tener una familia - dijo susurrando, con un tono triste y con una mirada vacía, que nada se parecía a la de hace un par de segundos.

La chica al darse cuenta de lo que había dicho rezaba internamente para que el pecoso no la hubiera escuchado.

Pero para bien o para mal, Ace escucho aquel comentario, eso lo dejo un poco preocupado.

-¿A qué te refieres con eso? - dijo con preocupación el joven de negros cabellos con una mueca consternada

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Hasta aquí el capítulo de hoy, ya se que llevo mucho tiempo sin actualizar, y por eso el capítulo de hoy ha sido más largo de lo normal.

Si os ha gustado votad y comentad para que sepa que os gusta y para animarme a actualizar más amenudo.

Hasta la próxima actualización uwu❤️

Enjoy The Fire ❤️ [PAUSADA](Ace X Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora