Capítulo 1

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By Eiji

Volví a Japón herido, muchas cosas pasaron pero realmente no me importaba con tal de que Ash estuviera bien y con vida. Me iba porque sabía que lejos de ayudar podría ser un estorbo, al menos pude salvar a Ash de ser asesinado y si mi vida se perdía con tal de salvar la de él me daba por satisfecho.

Regrese a Japón porque mi familia estaba realmente preocupada, las preguntas y desesperación no se harían esperar, ya estaba preocupando a Ash, a Ibe y a todos mis amigos. Sabía que lo hacían por protegerme y aunque había sido terco estando herido y en silla de ruedas no podría ayudar a nadie, ya se habían perdido muchas vidas en el camino y no quería que Ash sufriera por mi muerte porque aunque no lo decíamos nos moriríamos si algo le pasara a alguno de los 2 se nos acabaría la misma. Amaba a Ash no había podido decírselo pero en serio lo amaba, esperaba poder decírselo al irnos ambos a Japón  o si él llegaba allá luego de todo lo que paso o incluso yo esperaba volver a nueva york en cuanto me recuperara. Me fui con la esperanza en mi corazón, sentí que la vida me sonreiría pronto, juro que escuche la voz de Ash de una manera fantasmal pero pensaba que era mi cabeza que aún estaba preocupada por él pero según Sing y todos los demás no había de que preocuparse, todo lo malo había muerto y los que le hicieron daño a Ash ya no volverían de donde estaban.

Cuando regrese mis padres y mi hermana estaban en el aeropuerto llorando, me abrazaban tan fuerte que sentía que no podía respirar y llore al verlos. Simplemente dije que unos muchachos quisieron matar a mi mejor amigo sin dar detalles de todo lo vivido, provocando que nuestra unión familiar, en especial el vínculo que tenía con mi hermana se fortaleciera aún más.
Al ver a mi familia me puse a pensar en lo que sintió Ash al perder a su madrastra y a su hermano, se me formo un vacío en el estómago y un dolor en el pecho al imaginarme imágenes sangrientas en donde ya no podría verlos nunca más. Aún recuerdo cuando me burle de mi hermanita por ese amuleto del amor que me dio pero que irónico el destino que siempre fue el amuleto correcto y ahora me arrepentía de haber dicho que era una tonta por habérmelo dado.

Decidí simplemente relajarme unas horas que realmente se convirtieron en un día,  cuando llegue a casa, con una esperanza y confianza en que Ash leyó mi carta, posiblemente ya venía en camino y sino yo iría por él al recuperarme.

Al día siguiente Ibe fue de visita en la tarde.

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Por favor Ibe, quédate a cenar- lo invitó la madre de Eiji- Muchas gracias por cuidar de nuestro hijo y traerlo a salvo.

No es a mí a quien deben agradecer pero con gusto acepto la invitación- se rasco la cabeza- ¿Puedo subir a ver a Eiji?

Creo que está durmiendo. Pero puedes entrar con toda confianza a su habitación, no creo que le moleste- Dijo con una sonrisa la madre- ¿Pero se mejorara pronto?- Pregunto con preocupación.

Mejorará pronto por lo que dijo el doctor. Solo necesita reposar y no hacer esfuerzos.

Ibe subió las escaleras de la casa, pero recibió una llamada que atendió a la vez que ingresaba a la habitación del joven al que apreciaba bastante- Hola Sing. Ya llegamos a Japón.

Ibe, Ash está muerto- La desesperación y llanto en la voz de Sing eran muy fuertes desde el otro lado de la línea- Fue apuñalado por mi hermano Lao. Murió por desangramiento. LO SIENTO.

Eiji se había despertado hace poco, sonrió al ver a Ibe, pero esa sonrisa se fue al ver la expresión en la cara del mayor- ¿CÓMO QUE ASH ESTA MUERTO?- Expreso el mayor con desesperación y haciendo sentir como Eiji sentía que el mundo se paraba para él. No supo como pero se acercó al mayor y le quito el celular de la mano con lágrimas que no supo a qué hora empezaron a salir de sus ojos.

El secreto de EijiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora