El secreto de Eiji

Capitulo 3

... Eiji vio a la joven rubia nuevamente a los ojos, esas esmeraldas eran del mismo tono de su difunto amado, podría jurar que estaba viendo a Ash directamente, se dejó llevar y la chica también porque esa misma mirada que ella venia cargando por su pasado era la misma que la de Eiji. Ambos parecían hipnotizados al hacer que sus ojos se encontraran.

Mami- Se escuchó la voz de la pequeña niña sacándolos a los 2 de su trance- Quiero otro helado.

Mandy arruinaras tu apetito para la cena si te doy otro. Además recuerda que los Nanami te tienen un pastel de chocolate como postre- Le dijo cariñosamente tocando su nariz haciendo que la pequeña niña sonriera- Perdón si hace rato te parecí grosera es que no soy tan confiada y gracias por habernos ayudado. Ese viejo parecía...- Agacho la cabeza como con pesar y Eiji pareció entender la sensación...

No es nada. Cualquier persona hubiera hecho lo mismo...

Se ve que eres una persona agradable Eiji- Le sonrió y miro su reloj- Debo regresar a la panadería. Hoy mis jefes saldrán. Prometo que te devolveré lo de la muñeca.

Eiji no supo porque pero decidió ir a dejarlas a la puerta de donde trabajaban.

¿Tienes celular?- Preguntó ella con una sonrisa que se le fue formando y ella saco el suyo también, ambos lo intercambiaron y pusieron sus respectivos números de celular, ella llamo a Eiji y así ambos confirmaron que tenían los mismos números.

Adiós- Se despidió la pequeña Mandy y Eiji les regreso el adiós agitando la mano y con una sonrisa-No puedo creer que volviera a ver unos ojos como esos luego de tanto tiempo. Hace hoy un año que una parte de mi vida se acabó y se fue contigo ¿Por qué no puedo olvidarte? Es que no quiero ¿Verdad? Si hubieras venido tal vez hoy estaríamos juntos... No quiero ir a EE.UU porque no podría soportar estar en donde ya no estas- Nuevas lagrimas vinieron a sus ojos y se fue a un parque en un rincón donde nadie pudiera verlo.

Llegado el anochecer Eiji llegó a su casa, no había sacado su cámara desde hacía un año, aun la tenía guardada en ese maletín, estuvo a punto de abrirlo pero rápidamente alejo la mano porque sentía que el mundo se detenía por ese instante.

¿Aún no olvidas a ese chico guapo, verdad?- Preguntó su pequeña hermana

¿Cómo sabes que es guapo?- Preguntó volteando a verla.

Saque tu cámara y vi sus fotos. Pudo llegar a ser modelo.

TE DIJE QUE NO ENTRES A MI CUARTO Y QUE NO TOQUES MIS COSAS- Estaba realmente enojado y su voz se lo dio a entender.

Perdón- Agachó la cara- Pero no la sacas desde hace tanto y te encantaba sacar fotos...

Pues ya conseguí una nueva cámara, más moderna y...

Era importante para ti. Lo sé cuándo dijiste que le diste el amuleto del amor- Recuerdo que me lo dijiste cuando al volver te pregunte por él.

Era algo inútil, además él era más guapo y se lo di pensando en que podría conseguir novia más rápido que yo- Dijo mintiendo guardando el maletín en un lugar de su amplio closet.

Es verdad- Río- Si sigues tan amargado nunca conseguirás novia o novio- Río y Eiji solo la vio rojo de la ira con una mirada que la intimidó- Solo quiero que seas el Eiji de antes- Lo dijo saliendo del cuarto- ¿Tanto he cambiado desde tu partida?- Se vio al espejo buscando encontrarse a él mismo pero dándose cuenta que estaba peor que cuando tuvo que dejar su deporte favorito, pensaba que su vida estaba arruinada y termino arruinándolo una persona.

Todas las noches lloraba, cuando su mente no se distraía parecía que el mar se salía de sus ojos y no pensaba irse en mucho tiempo. Pero pensó en la pequeña niña y en la bella joven que conoció haciendo que sus lágrimas pararan y un sonrojo pequeño que no se veía por la oscuridad se formara junto con una pequeña sonrisa. En serio era atractiva... Pero ese pensamiento se fue rápidamente al volver Ash a su mente como si le estuviera faltando el respeto. Sin sentir se quedó profundamente dormido, mientras en sueños aun divisaba a su mejor amigo.