El secreto de Eiji

Capitulo 23

...-Te cortaste el cabello- Se percató el chino y una sonrisa se dibujó en su rostro- Te ves como cuando nos conocimos.

-¿Eso crees?- Sonrió ampliamente- Creo que he envejecido- Río ligeramente.

-No sabes cómo me alegra el verte tan feliz y ser el viejo Eiji que recuerdo. Hace meses que parece que volviste a ser tú mismo.

-Sing, en serio lamento haberte preocupado tanto tiempo y por haber cambiado tanto...- Eiji le dio varias entradas para una presentación que habría de ballet, sería la presentación de sus hijas y quería que él fuera- Quiero que vengas a esta presentación, quiero que conozcas a alguien que es muy importante para mí y me ha influenciado mucho.

Sing sólo dio un profundo respiro y esperaba que esto aumentase su felicidad- Por favor, sólo te pido que te calmes ante lo que veras.

-Oh, jajajajaja perdóname, creo que sólo le doy vueltas a las cosas- Sing puso el play de la cámara; lo primero que se vio fue a Akira bailando de esa manera extraña y ambos solo se quedaron serios viendo esa imagen para que luego Eiji se riera un poco- ¿Eso es lo importante que tenías que decirme? Se ve adorable ¿no crees?

-Por favor, pon atención a todo lo que veras- Al ver el semblante serio de su amigo, siguió poniendo atención hasta que finalmente se escuchaba la parte donde tocaban la puerta y Sing sólo trago saliva sabiendo que ya estallaría la bomba para Eiji, se dejó de escuchar la música y ya se escuchaban las voces. Cuando escucho la voz masculina no había puesto mucha atención a lo que decía aunque se le hacía algo conocida, las palabras de Akira rápidamente captaron su atención y lo hicieron abrir sus ojos en grandes, escucho lo que decía- ¿Qué es esto?- Su voz se exalto por la sorpresa, siguió escuchando y Sing le subió más volumen, pudo apreciar finalmente el rostro de Ash, observo bastante, las manos le temblaban, su mente estaba enfocada en lo que veía, escucho las palabras de su mejor amigo. Sólo con escuchar su voz con claridad sabía que era él. Estaba tan concentrado que no sintió el tiempo que estuvieron en esa banca. Las lágrimas no paraban de inundar el rostro de Eiji. Sus fantasías eran ciertas, esos sueños que en más de 7 años tuvo eran verdaderos. Muchas emociones estaban en su interior alegría, sorpresa, ansiedad, enojo, frustración y no sabía que más. Las lágrimas se hicieron infinitas, vio como el joven mano derecha de Yut Lung lo veía a la cara y ambos se abrazaron.

-Por favor Eiji, no llores. Esto no es para que estés triste- Aunque él también lloraba.

-ASH ESTA VIVO... ASH ESTA VIVO. DIOS- Puso su mano en su rostro, y sus sollozos se hicieron más fuertes- ¿CÓMO ES POSIBLE?- Una felicidad y ansiedad se apoderaban de él.

-Te entiendo pero ya escuchaste sus motivos, el porqué de algunas cosas. Ya viste mi reacción, no estaba menos sorprendido que tú; pero te lo pido cálmate.

-¿CALMARME!? ¿CÓMO QUIERES QUE ME CALME?- Se paró y dio un par de vueltas largas frente a Sing- HAN SIDO 7 AÑOS EN LOS QUE LO HE LLORADO, EXTRAÑADO Y SI LO ENTIENDO PERO... PUDO DECIRMELO... PUDIMOS HABER ESTADO JUNTOS Y- Las lágrimas no dejaban de salir- ¿Por qué?

-¿Quieres que te muestre algunas de sus fotos?- Ash le había mandado al chico alto unas fotografías de su vida en España, desde que se había ido hasta esos últimos años. Había fotos de él con su familia, saber que Griffin estaba vivo lo sorprendió mucho. Cuando vio a Ash feliz, con una vida normal, cuando se graduó de su primera carrera en la universidad y momentos tan simples pero que eran tan feliz pudo entenderlo pero aun había algo que lo estaba matando- Al parecer ha sido muy feliz... Pero tampoco pudo olvidarte...

-¿Tienes su número de teléfono?- El chico sólo asintió- Por favor llámalo, sólo quiero escuchar su voz. No le digas que estoy contigo ni que lo sé. Quiero comprobar que es real y que no se desvanecerá...-Sing se limitó a marcar el número- Oye, ¿Qué tal todo Ash?