Cuatro.

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John se subió al auto oscuro y Kim condujo hasta la residencia Seo. Minutos después el chico entró por la puerta del estudio de su padre.

— ¿Y bueno? ¿El Sr. Siwat pidió piedad? — habló el mayor al ver entrar a su hijo.

— Algo así, los Siwat ya no tienen nada de que preocuparte. Ya no están relacionados con nosotros.

— ¿A que te refieres? Explícate mejor John.

— Cancelé las acciones que teníamos con ellos. Ahora estamos completamente desvinculad...

— Eso no fue lo que te pedí — interrumpió, hizo una mueca que duró apenas unos segundos — Pero, me has dado una buena oportunidad. Mañana, en la cena, quiero que hables con el chico Lee, el tal Mike. Sé su amigo, su novio, lo que sea. Necesito que te filtre información sobre los otros "contactos" que tiene con su familia.

— ¿Para qué?

— Lo sabrás después. Puedes retirarte, hijo — ¡Ja! Hijo. Sólo le decía así muy pocas veces y eso era cuando estaba feliz por algo que había hecho o dicho.

Salió por donde vino y subió a su antigua habitación. Se acostó en la cama quedándose dormido casi al instante. El desfase de horas era algo grande y lo que había sucedió con la familia de Mark, fue muy estresante para el. Por lo que se encontraba bastante cansado.

Después de casi 10 horas despertó a causa de una de los mucamas, indicándole que la cena ya estaba lista. No había podido desayunar y ni siquiera comer por que se la había pasado dormitando todo el día.

Bajó a regañadientes las escaleras hacia el comedor principal. Su padre ya estaba ahí sentado cenando, ni siquiera se había molestado en esperarlo.
Se sentó al costado de el y comenzó a comer de igual manera. Solo se centró en consumir sus alimentos y no hablar, si el Sr. Seo iniciaba la conversación él era muy cortante al responder ya que la verdad no estaba de ánimo para soportar sus dramas.

Terminó de comer y regresó directamente hacia su habitación. Tomó un baño con agua caliente, se puso la pijama y volvió a dormir.


~▪️◼️▪️~


Mark sorbió su nariz al ver que su hermana regresaba y con ella, su padre también. Limpió las pocas lágrimas que habían salido. Irene llegó a su lado pasando un brazo por sus hombros.

— Hemos dejado los trastos con los Seo en el olvido. Recuerden que mañana tenemos la cena, por favor, no se despeguen de mi lado. Ahora iré a mi habitación, ese chico me sacó canas verdes.

Ambos asintieron dejándole pasar. Irene miro al menor suspirando, Mark sabía que algo pasaba.

— John me dijo que mañana quiere hablar contigo — el rió amargamente negando con la cabeza. Si, como no.

— ¿Para qué quiere hablar conmigo? Ah, ya se. Para restregarme en la cara que Hyuck esta muerto — habló con sarcasmo subiendo las escaleras lentamente.

— Me dijo que... Bueno, hablarán mañana si o si.

Había pasado un buen rato desde que los hermanos habían terminado de hablar, ahora el más pequeño estaba sentado en la orilla de la cama manteniendo la vista hacia la nada.
No sabía que hacer, uno de sus primeros amores había muerto, necesitaba más que nunca a su madre y su hermana lo obligaría a hablar con John.

Suspiró para dejar todos los pensamientos a un lado, para poder dormir, o aunque sea relajarse un poco.

A la mañana siguiente, la primera cosa que hizo John fue pensar en que le dirá a Mark en la noche. Como ayer se había atrevido a mencionarle sobre su noviecito, sabía que hoy iba a ser muy difícil que lo escuchara, o peor aún, que le dirigiera la palabra.

Soltó un suspiro largo, todo esto se debía a él y su tonta costumbre de arruinar las cosas.

Tocaron la puerta, Kim asomó su cabeza por esta.

— Joven Seo, su padre lo espera para tomar el desayuno.

— Bajo en un momento — mintió volviéndose a arropar con las cobijas hasta la cabeza.

— Es importante, mencionó que es sobre los Lee.

— ¿Y ahora que? ¿Tan importantes son los Lee que ahora no puedo dormir? — se quejó mientras aún bajaba las escaleras encontrándose con la sorpresa de que ya lo esperaba en el comedor.

— Cállate John, no estoy de ánimos para tus tonterías — el menor rodó los ojos tomando su lugar en la mesa, eran las 6 de la mañana ¿Acaso esperaba que lo tratara de una mejor manera? Su padre soltó un suspiro largo.

— Necesito que vuelvas a establecer contacto con los Lee. — habló firme, como el verdadero hombre de negocios que era — Pero, no quiero que vayas a rogarles para volver a establecer los acuerdos que cancelaste. Así que estuve pensando toda la noche en cómo hacer que nuestras familias se unieran de nuevo. Gracias a tu ineptitud, incluso tuve que hablar con el Sr. Lee...

John se atragantó con el jugo que se estaba tomando y comenzó a toser ¿El Sr. Lee y el Sr. Seo hablando? ¿Qué seguía? ¿Qué los cerdos volaran?

— ¿Y de que hablaron?

— Más que nada de negocios, y... una boda para unir a las familias. — Eso último lo desconcertó ¿Quién se casaba? ¿Mark? ¿Irene?

Al parecer su padre notó su cara de confusión por que agregó:

— Si sale todo como planeamos Irene y tú se casarán a mediados del próximo año.

— Sabes que a mi no me gustan las...

— Mujeres, lo sé John. Pero es más importante la compañía que lo que te guste o no a ti.
Además, que sea tu esposa no implica que te tengas que acostar con ella.

— Pero...

— ¡Suficiente! Solo quería informarte acerca de  la boda, que se llevará a cabo si o si. No quiero escuchar tus quejas sobre ello, si quisiera oír quejas hablaría con tu madre.

Just Words || JohnMark;🍁Donde viven las historias. Descúbrelo ahora