Annoying

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Mina tenía la mala costumbre de dormir muy poco en las noches, hábito que adoptó luego de que sus padres no la aceptaran más en aquella cama y de a poco le enseñaran a dormir sola. Desde ese día las largas noches eran un poco más llevaderas si tenía un buen libro a mano, o también jugando viedeojuegos en su computadora o celular, avanzar con su proyecto también era interesante, hasta que de madrugada la golpeaba el sueño y se iba a dormir.

Este mal hábito hacía que Mina siempre fuera la última en despertar durante la mañana, Jihyo solía dejarla dormir hasta que el desayuno estuviera listo en su totalidad. Daniel tampoco la molestaba, entraba y despacio comenzaba a ordenar lo que sea que estuviese desorganizado, luego se retirana en el mayor silencio posible. Sana menos, de hecho, a veces se aprovecha de la situación y se recuesta junto a ella para también dormir un poco más y no ser regañada.

La única que podía no obedecer a la situación y a la instintiva regla, era su hermana mayor Momo.

Ese fin de semana Momo despertó sonriendo un poco, se volteó y Sana estaba ya despierta también con su celular en mano. Vio la hora y prestó algo de oído, sus padres ya estaban levantados, no faltaba demasiado para el desayuno. Pensó en quedarse algo más en la cama y disfrutar de su fin de semana, pero Jihyo llegó y las regañó a ambas para que ya se levantaran, alegando que llevaban demasiado tiempo en la cama.

Sana no puso mucha objeción, se levantó y arrastró sus pasos a la cocina. Momo no lo dejaría pasar tan fácil, se sentó en la mesa aún extrañando su cama, sosteniendo su cara con su mano derecha. Jihyo y Daniel parecían ocupados terminando de cocinar.

-Hay que despertar a Mina...- Jihyo murmuró.

-¡No te preocupes! Yo lo hago

Momo salió de la mesa velozmente y caminó a la habitación de su hermana, nadie alcanzó a frenarla y siemplemente la dejaron.

La verdad es que la primera parada para Momo fue el baño, llenó de agua un vaso y se encaminó donde Mina, sí, era evidente lo que planeaba. Caminó hasta estar delante de su hermana, se agachó a su lado y vio su tierna carita dormida, la pequeña con 12 añitos seguía con un rostro bastante infantil.

Momo suspiró con ternura y comenzó a derramar de a poco el agua en el rostro de su hermana.

Mina entre sueños estaba realmene molesta, sentía ese frío líquido en su cara que la estaba obligando a despertar, con el seño completamente fruncido abrió sus ojos con dificultad debido al agua, luego distinguió a su hermana además de escuchar las suaves risitas que soltaba.

-Buenos días, bebé Minari, a desayunar

-¿Por qué eres así?- Mina comenzó a secarse con su propio pijama.

-¡Hey! Te hice un favor, ya no necesitas lavarte la cara- Momo se fue entre risas a la cocina.

Como era de esperarse, Mina a penas llegó a la mesa se quejó de la actitud de su hermana con sus padres, Daniel con una media sonrisa le dijo a Momo que no lo volviera a hacer, pero todos sabían que ese regaño no tendría mucho efecto en la juguetona Momo.

Sana se duchó y vistió, se tomó su tiempo para peinarse y maquillarse de forma linda en el baño, le gustaba el tema, no era necesaria una ocación especial para verse bien. Le tomó arduos minutos, pero su pelo ya estaba perfectamente peinado y su maquillaje se veía equilibrado y bonito, destacando las partes que más le gustaban de su cara, agradecía no ser propensa a tener imperfecciones como granos, le facilitaba la vida.

Se tomó una foto frente al espejo y se la envió a su novia, Dahyun no era tan fan de esas cosas, pero siempre tiene cosas lindas para decirle aún cuando no es de su interés. Cada vez siente más que es la indicada.

J-Sisters / MiSaMoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora