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GiHye.

Se sentía como un sueño, uno realmente increíble. No podía quitar la sonrisa de su cara. No podía dejar de observar a todas partes; el auto, los asientos, el retrovisor para encontrar a su hermana detrás jugando con sus peluches. Y, sin duda, ver a su lado era lo más sorprendente: su papá.

Misuk estaba en las nubes, ¡estaban teniendo un viaje con su papá! Aquello era algo que creyó que jamás pasaría. Estaba acostumbrada a escuchar a sus compañeros a hablando acerca de sus salidas con sus padres. Siempre salían con su papi, y no le molestaba, pero compartir tiempo de esta manera con Jungkook, era simplemente increíble.

Ella iba adelante con él, con el cinturón bien ajustado mientras Eunyeong iba detrás de Jungkook jugando con sus peluches.

"Ya casi llegaremos" soltó Jungkook mientras la música sonaba en la radio. Misuk no pudo reprimir otra sonrisa que el azabache le correspondió.

"Esa señora" comenzó. "¿Es tu mami?"

Oh, los abuelos. Cierto, ellas querrían saber si tienen abuelos de parte paterna.

¿Cómo les explicaba a sus padres que había casi adoptado a dos niñas que creían que era su padre biológico?

Suspiró, ya vería eso después.

"No, es una amiga" le explica. "Es muy dulce, les caerá bien. Lo que pasa es que vive sola, y a veces se siente muy triste."

Misuk abrió su boquita en sorpresa y luego miró hacia la ventana.

"Gracias por llevarnos" dice ella y Jungkook asiente.

Observó como entraban en una vecindad de manera lenta. Se concentró en las casas hogareñas y algo grandes. Con patios delanteros bien arreglados y bonitos. Miró a algunos niños jugar en la calle; en bicicletas, con pelotas, con peluches, con cualquier cosa. Cuando el auto se estacionó, Misuk observó la casa y Jungkook bajó primero tomando a Eunyeong del asiento trasero antes de ir por la mayor.

Ambas tomaron sus manos y se dirigieron hacia la puerta. Eunyeong miró a través de una ventana el interior de la casa, encontrándola levemente desordenada. La puerta se abrió y Misuk la jaló de la mano hacia a ella, regañándola por estar espiando.

"Hola, Jungkook" saludó la señora y ambas le miraron, ella se acercó para abrazar a Jungkook que le sonrió de manera amable y luego las miró. "Oh."

"Hye" dijo el azabache. "Te presento a mis hijas; Misuk y Eunyeong" presentó dejando a la señora muy sorprendida quien miró a las dos niñas. Eunyeong le sonrió batiendo sus pestañas, siendo siempre encantadora y Misuk dio una reverencia para saludarla,

"¿Eres padre tan joven?" soltó mirando a Jeon, ella recordaba la edad que Hikimori le había otorgado del muchacho y esas niñas no parecían pasar de los 10 años, ¿A qué edad las había tenido?

"Sí, las he traído para presentártelas" Jungkook observó como en los ojos de la señora el brillo aumentaba. Jungkook sabía que ella se sentía demasiado sola y, cuando te sientes así, el hecho de que una persona quiera incluirte en su vida significa mucho. Hye miró a las niñas sonriéndole mientras aguantaba las lágrimas.

"Hola, nenas, ¿quieren comer algo? Puedo prepararles lo que sea" ofreció y se hizo a un lado. "Entren, entren."

Los tres entraron junto a ella, Eunyeong se acercó a la señora para tomarle una mano.

"¿Tiene chocolate caliente?" preguntó con dulzura y la señora Hye tembló ante el tacto suave de su mano. ¿Cuándo fue la última vez que alguien se había acercado a ella de esa forma?

Hikimori ❤️ KookTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora