Capítulo 40

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4 de Septiembre de 2019
E.U.A.    6:40:20 p.m.

—Señor, hemos recibido un informe sobre un cargamento de droga que entregaran hoy mismo en Corea del Sur, y se piensa que la sombra lo entregará personalmente. —mencionó el agente a mi lado.

—¿Se piensa?, esto no se trata de pensar sino de hechos.— seguí mirando el monitor y después de unos minutos hable.— Envíen un escuadrón hacia donde se dice que se entregara, y no quiero que vuelva a pasar lo mismo que en California.— dije duramente y escuche sus pasos marcharse.

Hace algunas años hemos tratado de atrapar al mayor exportador de narcotrafico y trata de blancas de América y algunas partes del mundo, desgraciadamente no hemos tenido suerte. ¿Qué hemos hecho mal?, me he preguntado eso por tanto tiempo y sigo sin la respuesta.

Es una mente maestra, siempre está a un paso adelante que nosotros. Mató a mi padre biológico hace años, un agente de la DEA y buen hombre, y necesito hacerlo pagar, vengar su muerte, refundirlo en la cárcel.

Te odio más de lo que te puedes imaginar.

NARRA TN_____:

—¿Qué haremos? — dijo Arango mientras se jalaba el cabello algo desesperado.

—Iremos así que preparen el helicóptero, tenemos que llegar lo más pronto posible. — Mire a Yael y esta asintió saliendo la habitación.

Comencé a llamar a Iris otra vez.

¿Sí?

— Escucha, iremos para allá e intentaremos llegar lo más pronto posible. — Camine hacia el sótano donde teníamos algunas armas.— Por lo mientras, encargence de eso, se que lo lograrán, confío en ustedes

Esta bien, citaré a Jiyong en otro lugar.

— Te veo allá.

Colgué la llamada y me dirigí al cuarto de armas. Tomé una maleta y comencé a meter algunas armas para llevarlas al helicóptero que usaríamos para ir.

Después de cerrar la maleta salí de ahí y salí al estacionamiento donde espere que llegará Arango, Yael y Sebastián. No pasó mucho tiempo y salimos en el auto de Arango hacia el Aeropuerto de la compañía de Victoria's secret, era mejor no levantar tantas sospechas por lo que usaríamos el heliopuerto del edificio y uno de los helicópteros de éste.

Llegamos, subímos en el elevador hacia el último piso del edificio, al llegar pude sentir el aire fresco y frío en mi cara a pesar de ser un día soleado, impacientes subímos al helicóptero—Sebas y Yael en la parte trasera y mi hermano y yo en los asientos de piloto y copiloto— Arango habló por los audiculares pidiendo permiso a la torre de control para despegar.
Pasaron los minutos y puso en marcha el helicóptero despegando de ahí y estando por fin en el aire, haciendo pequeñas escalas en España y China.

Hicimos menos de 12 horas lo que fue un récord, llegamos por fin a Seúl, Corea del Sur.
Aterrizo Arango dando por último sus coordenadas.

Salimos hacia el estacionamiento del edificio donde una camioneta negra que manejaría Sebas, para llevarnos a una casa alejada de la ciudad donde Iris y Lio estaban ocultos.

La camioneta arrancó y el camino pronto se volvía algo frío, pasamos por donde tenían que haber ido ellos, ese lugar estaba lleno de policías y uno en particular que iba llegando en un auto negro, me asome un poco más a la ventana para ver su rostro pero la voz de Yael me interrumpió.

— Tn_____… — Me llamo desde la parte trasera, haciendo que la mirara por el retrovisor.

— ¿Qué pasa? — Dije en tono sereno.

— Jiyong me ha dado una nueva dirección para donde entregarle el paquete. — se quedó callada y miró algo aterrorizada

— ¿Y cuál es el problema? — voltee la mirada para mirarla mejor

— Que no vas a poder creer dónde es.

Doble vida ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora