Las cenizas de los Ardley

Capítulo 4

Me dolía un poco la cabeza, así que me levanté de la cama para buscar agua. Hice un movimiento con mi cuello y divisé de reojo el cuerpo escultural de Karen, que dormía plácidamente boca abajo. Sonreí y mi mente me llevó al momento exacto cuando se convirtió en una briosa amazona, que me poseyó a su antojo.

Caminaba descalzo y la madera crujía bajo mis pies << espero no despertar a Klays>> pensé. Sentí algo de ansiedad cuando el desorden de la estancia y el comedor, se evidenció a mi paso. Traté de obviar la botella de vino escurriendo sobre el mantel y la de whisky vacía en la alfombra, así que fui directo a la cocina por agua.

Aún estaba oscuro, pero el departamento no estaba totalmente en penumbra, descubrí cierto brillo que iluminaba el camino hacia mi estudio. Ahí había colocado el portafolio, justo al lado del sofá, donde pasaba mis horas estudiando los guiones.

Cómo hipnotizado, me dejé guiar por aquella luz que me fue atrayendo. Y aunque trataba ignorar esas señales, no pude evitar tomar el sobre.

De entre todos los papeles que allí había, solo uno refulgía; mis ojos no pudieron evitar empezar a leer

Creo en un solo señor Satán todo poderoso,
Creador de la justicia y la venganza,
creo en un solo señor Lucifer,
ángel temido por el mismo Dios,
desde antes de todos los siglos,
Satán, Belial, Lucifer y Leviatán,
Temidos y respetados por el mismo Dios por quien fueron condenados,
Que con su poder y creencias lucharon contra el cielo,
Y por obra de su convencimiento se hicieron de legiones y armaron el ejército,
Padecieron y fueron condenados,
Pero resucitaron con mas poder para matar a Dios padre,
Y ahora vendrán con la gloría
Para matar pastores y ovejas y este reino será su fin.
Creo en el Anticristo,
Señor dotado con el conocimiento oculto,
Que procede de las millones de legiones,
Que con los cuatro príncipes y sus legiones
Recibe el mismo temor y victorias

Y que hablo con los falsos profetas.
Creo en la iglesia de Satán que es sabía poderosa y respetada,
Confieso que hay un solo bautismo para recibir a Satán.
Espero la resurrección de nuestros ejércitos
Y la batalla final contra el cielo.
Ave Satán!!

In Nomine Dei Nostri Satanas Luciferi Excelsi

No pude terminar de leer, mi exaltación hizo que cayera de rodillas, cómo si mi espíritu rechazara tanta oscuridad; no era un hombre muy creyente, pero había estudiado en un colegio católico, así que me sabía la oración que empezó a emerger espontáneamente de mi boca. Recé el Padre Nuestro con los ojos muy cerrados, concentrándome en toda la bondad de la imagen de Candy acariciando mi rostro. No sé cuánto tiempo estuve de rodillas, pero cuando mi ángel personal hubo calmado mi corazón, tomé el papel para destruirlo, no pude; supuse que su maldad debía ser eliminada con algo o alguien más poderoso.

Salí tan rápido como pude, me senté en la estancia y cómo Adán expulsado del paraíso, me percaté de mi desnudez. Me tapé con una manta y encendí un cigarrillo. Miré hacia el balcón, no había luna...hoy entendí un poco más, la lucha de Candy

_ Es un enemigo poderoso pecosa y lo venciste _ le dije tras soltar imágenes de humo hacia el ventanal y sonreí agradecido. Ella está cuidándome. _ Mi ángel pecoso_ un tibio calor inundó mi pecho.

Apagué el cigarrillo casi entero y recordé que no estaba solo.

Casi de puntillas me fui acercando a la habitación, se percibía un olor sui generis, una mezcla de jazmín, fluidos corporales y azufre.