Choni

CAPÍTULO 6 - VIERNES POR LA NOCHE

Había invitado a Cheryl a la pelea, no se sentía muy cómoda en ese tipo de ambientes, pero Jason nunca se había llevado bien con  los serpientes y este era el momento perfecto para investigarlos de cerca.
Habíamos quedado en que ella me recogiese en mi caravana e irnos juntas al lugar del evento, ella sola no se atrevía a caminar por territorio Serpiente.
Estaba sentada en el sofá esperando a que apareciese, llegaba tarde. Me cansé de no hacer nada y fui a la nevera en busca de algo que beber, pero en ese preciso momento tres golpes sonaron a través de la puerta. Cogí una riñonera y mi gorro negro, no hacía el suficiente frío para llevarlo, pero me quedaba genial, y me dispuse a abrir a la pelirroja.
- Dios mío, me he puesto unos tacones de aguja y es imposible caminar por aquí. No tenéis pavimento, es todo tierra.
- Hola a ti también -dije con gracia- anda vamos que ya llegamos tarde.
Caminamos unos minutos en un casi pleno silencio, no era incómodo, cosa que me extrañó, nunca había estado tan a gusto con alguien en silencio. Lo único que se oían de vez en cuando eran los resoplos de Cheryl y mis consecutivas risas. Cuanto más andábamos más voces escuchábamos a lo lejos, parecía que había una manifestación o una concentración por el estilo. Seguimos el ruido y tras rodear una caravana encontramos a una infinidad de personas, prácticamente todas con la camiseta de las serpientes. Había gente bebiendo, fumando, peleando y haciendo... otras cosas sobre los coches. Vi a Jughead a lo lejos y le llamé, aunque como era normal, no me oyó. Me acerqué a él y tapé sus ojos.
- Dame todo tu dinero -intenté poner la voz más grave, pero no lo suficiente para que se asustase de verdad.
- No tengo ni para una cerveza.
- Entonces llévame a la zona de peleas que estos Serpientes se van a cagar -retiré mis manos y al darse la vuelta vio a Cheryl.
- ¿Qué hace ella aquí? -intentó no sonar borde, pero no le salió muy bien.
- Tú, falsa imitación de ser humano, que parece que llevas ese gorro para que no se vayan las cinco neuronas que te quedan, no necesito tu permiso para venir aquí.
- De hecho, si que lo necesitas, o quieres que las Serpientes te echen a patadas.
- Chicos calma -mis manos se interpusieron entre sus cuerpos, se estaban enfrentando demasiado- Jughead siento no haberte dicho nada, pero surgió todo en el último momento y no me dio tiempo -la verdad es que no se lo conté porque sabía que no me iba a dejar llevarla- ademas... -me acerqué a su oído y le dije susurrando- es la única forma que se me ha ocurrido de estar a solas con ella -me aparté de él y le guiñé un ojo.
- ¿Toni que le has dicho? -tiró de mi brazo creyendo que le había confesado que estábamos para investigar.
- Shhh
- Mira Cheryl te voy a dejar, pero no des la nota, como si no estuvieras. Y tú -me miró a mi- me debes una -no se si me lo dijo en broma o totalmente en serio.
La pelirroja y yo nos separamos de Jughead y fuimos a un lugar que estaba un poco más silencioso a echarnos unos cigarros.
- Quiero que sepas que yo no fumo.
- Ya veo ya.
- Oye, ¿qué le dijiste a Jughead?
- Le dejé caer que me gustabas y que quería pasar tiempo contigo.
- Buena excusa, quién no se va a creer que te gusto.
- Te veo muy convencida de ser mi tipo.
- Soy el tipo de todo el mundo -deslizó un mechón de su melena hacia la parte posterior de su cuerpo. Yo solo podía reírme.

El hombre delante mío intentó darme un derechazo, pero fui lo suficientemente rápida de agacharme, una pierna flexionada completamente sobre en el suelo y mis manos mantenían el equilibrio apoyadas también, mientras que con mi otra pierna prácticamente rozando la tierra se movió con fuerza en dirección de los tobillos de mi contrincante. Este cayó al suelo e inmediatamente me puse de pie y abrí sus piernas con mis piernas, mirándole amenazante para que terminase el juego.
- ¡Me rindo, me rindo! Prefiero volver a casa con los dos huevos.
El público comenzó a aplaudirme y me dieron una cantidad bastante grande de dinero por ganar la batalla y por haber apostado a mi favor el poco dinero que tenía, lo hice por la gracia ya que realmente pensaba que iba a perder.
Cheryl y yo habíamos quedado que mientras yo peleara ella investigase, ser la única chica que competía hacía que la atención de todos los Serpientes estuviese puesta en mi.
Tardé un rato pero acabé encontrándola.
- ¿Descubriste algo?
- Nada, o los Serpientes son mejores personas de lo que creía o esconden pistas muy bien.
- Si es que juzgas a las personas demasiado deprisa.
- Claro, por eso pensaba que tu encajabas con las Vixens.
- ¿No soy lo suficiente guapa para vosotras?
- Que va, es que eres más Serpiente, ya sabes, más de calle -le di un golpe delicado con mi puño en el hombro y se empezó a reír.
- Pues para parecer que pertenezco a esa banda aún no has dicho nada malo de mi.
- Eso es lo que tu te piensas -dijo con voz de broma.
- Acabarás pasándolo mal cuando vuelva a Inglaterra -no premedité mis palabras, pero lo que ambas no sabíamos era que alomejor nunca podría abandonar Riverdale.