Choni

CAPÍTULO 5 - MARTES POR LA MAÑANA

Era el primer y último descanso que había entre las horas de clase. Las hojas empezaban a verse en el suelo, creando una gran alfombra de tonos naranjas y morados. Sobre ella Verónica y yo apoyábamos los pies en paralelo recostadas sobre un coche de los que había en el parking. Mi amiga tuvo la gran idea de fumarse un porro porque estaba muy estresada mientras yo inspiraba mi dosis de nicotina semanal.
- ¿Estás segura de que no quieres? -desplazo su canuto hacia mi- aquí es legal -me guiñó un ojo. Sabía que donde vivía antes estaba prohibida.
- Que va gracias, con mi cigarro voy bien.
Cuando la morena terminó de fumárselo, yo ya me lo había acabado hace un rato, volvimos a clase. Andábamos por los pasillos cuando escuché la voz del director a través de la megafonía del instituto.
- Señorita Topaz necesito hablar con usted inmediatamente.
- ¿Has hecho algo?
- Que yo sepa no.
Nuestros caminos se separaban, el suyo hacia matemáticas y el mío hacia... otro lugar.
En mi camino al despacho del director solo me preguntaba por qué no me había podido llamar en otra clase, por una asignatura que soportaba.
Entre al despacho y vi al director con una expresión tensa.
- Siéntese por favor -lo hice sin formular palabra- esta mañana he encontrado una nota anónima encima de mi mesa en la que ponía que en su taquilla podíamos encontrar pruebas sobre el asesinato de Jason Blossom -me quedé sin palabras, ¿de qué estaba hablando?- buscamos en la normativa del instituto si estaba prohibido y encontramos una cláusula en blanco en ese apartado, por lo que nos hemos tomado la libertad de abrirla -buscó algo en su cajón- ¿le suena de algo esto?
- Pero... qué -en una bolsa de plástico había una pistola.
- Tiene sus huellas y el calibre de la bala encontrada en la cabeza de Jason coincide con las que permite el arma.
- Yo... la última vez que abrí mi taquilla fue después de filosofía, me la han podido meter desde entonces -solo buscaba alternativas a que yo fuera la asesina, ¡si no sabía de la existencia del pelirrojo antes de que Cheryl me hablase de él en la fiesta!
- La cerradura no estaba forzada.
- ¡Pues tendrán una copia de las llaves yo que sé, pero le juro que yo no he hecho nada joder!
- La policía le está esperando en la puerta. Le acompañarán a la comisaría donde les dará a ellos las explicaciones.

Mis manos estaban esposadas mientras esperaba sentada en la sala de espera. Dos policías distribuidos estratégicamente no apartaban sus mirada de mi, como si fuese a liarme tiros allí mismo. Un hombre cuyo uniforme informaba de que era el jefe apareció entonces y me pidió que pasase a la sala de los interrogatorios. Estuvo horas preguntándome cuestiones que englobaban al caso y yo solo le repetía lo mismo una y otra vez, que no sabía nada. Me dijo que el arma no era prueba suficiente para encarcelarme (cuando dijo esa última palabra se me heló la sangre) pero que si me tendrían vigilada. Salí de la sala y vi a mi compañera pelirroja del instituto sentada, pero en cuanto me vio se levanto y comenzó a andar hacia mi rápidamente.
- Dime que no es verdad -sentía que me iba a caer una hostia en cualquier momento- dime que aquel día en la fiesta no me preguntaste por él para hacer que no sabías nada.
- Cheryl pero como voy a haberle hecho algo. Joder yo sé que no soy una santa pero ¡estamos locos!
- Tenías la puta arma en tu taquilla, explícame eso.
- ¡Tú te crees que si lo hubiese podido explicar llevaría aquí dentro tanto tiempo!
- Joder es que me abro contigo respecto a Jason porque tenía más alcohol que hemoglobina en vena, me dices que me ayudas a averiguar qué pasó... y ahora esto -su expresión se volvió más tranquila- creí que lo había olvidado sabes, más o menos al menos, pero ahora todo ha vuelto y el pueblo volverá a hablar de mi familia a mis espaldas y estoy cansada -dirigió su mirada al suelo.
- Cheryl, mírame -levanté con delicadeza su barbilla- te juro que no tenía ni idea de quién era Jason hasta que tú me hablaste de él -mis palabras no habían sonado nunca tan sinceras- y te prometo que no voy a parar hasta encontrar a quién le hizo esto.