-Ajo... aceite de oliva... que más falta?-. Pienso a la vez que mezclo el contenido del recipiente que está enfrente mío.
Nunca me olvido de las cosas de la cocina menos de ingredientes de una receta, pero hoy parece ser la excepción; estoy con la cabeza en otro lugar, más precisamente pensando en como podré proponerle a Tae Matrimonio.
Él no se encuentra en casa, hoy es el cumpleaños de su primo y fue a su casa a compartir en familia; Ha-Neul ahora esta en la casa de Jisoo, le pedi que la cuidará por hoy y ella aceptó con mucho gusto.
Hace mucho tiempo quiero pedirle a Tae Que se vuelva mi esposo, pero nunca encontré el momento indicado para decírselo; pero ya me cansé, ya quiero que sea "Él esposo de Kim SeokJin", no pienso esperar un día más.
Termine la cena y empecé a decorar el comedor con las cosas que me dio JiSoo:
-¿Y esto?-. Desenredo bruscamente las telas que encontré en una de las bolsas. - Eso debe de ir por ahí... si, eso es, irán ahí y estas por acá-.
-"Al parecer, decorar espacios no es tan difícil"-. Pensé con altivez Sin darme cuenta de lo que tarde en arreglar el maldito comedor.
Al darme vuelta y ver la hora que marcaba el reloj, prácticamente corrí al baño, tome una ducha más rápida que el rayo McQueen, salí y me vestí, corrí a la cocina y empecé a emplatar la comida.
Di un último vistazo a toda la casa para ver si estaba ordenada, y si, definitivamente todo ya estaba listo; sólo faltaba... si, exacto, faltaba la bella persona a la que quiero pedirle matrimonio.
Tome el móvil y marco el número de Tae, espero unos segundos y se escucha una voz del otro lado de la línea:
- Hola ¿que sucede cariño?-. Habla.
-Ho-Hola Cariño, sólo quería preguntar si ya estabas viniendo y eso...-. ¿Desde cuando me pongo nervioso al hablar con Tae?.
- Si, estoy a una cuadra de casa ¿Por qué? ¿Le paso algo a Hani?-. Hablo algo preocupado.
-N-no, no, Ella está con su tía. JiSoo quería cuidarla y pasar tiempo con ella y esas cosas-. Sonrei nervioso.
-Ahh, está bien cariño. Ya estoy llegando-.
-B-bueno, te espero-.
Se cortó la llamada.
Mis nervios subieron al mil, se que Tae no me rechazaría, pero igual mis nervios se hicieron presenté y me están carcomiendo por dentro.
Busco la pequeña caja de color rosa que estaba en mi cajón, la abro y doy un último vistazo al diamante que está dentro:
- Si no le gustas, me suicido-.
Cerré la caja y la guarde en mi bolsillo, baje la intensidad de las luces y prendí velas, todo para recrear un ambiente "romántico".
Escuche como la puerta se abrío y rápidamente me paré justo en medio de la sala y recibí a la hermosa persona que estaba llegando con un beso.
-¿Y todo esto?-. Hablo confundido.
-Un pequeño detalle para ti, criatura hermosa-.
-Woaah. Me gusta, Me gusta-. Dijo y rio.
◇°◇°◇°◇°◇°◇°◇°◇°◇°◇°◇°◇°◇°
-La cena estuvo deliciosa amor-.
-Gracias cariño, la hice pensando en ti, creo que es eso-. Le guiñe un ojo.
-Vaya, vaya SeokJin-. Sonrio. -Cena romántica, y más palabras y frases tiernas ¿Qué sucede?-.
- Siempre te trato con cariño-. Entrecierro los ojos.
- Pero... presiento que hoy pasa algo-.
Trago saliva. Ya es el momento, vamos SeokJin.
-Tae. Quiero agradecerte por todo este tiempo que me regalaste junto a ti. Quiero que sepas que junto a Ha-Neul eres lo más bonito que me paso en la vida, y quiero seguir viviendo esto tan lindo para toda la vida-. Saco la cajita rosa de mi bolsillo y la abro. En ese momento los ojos de Tae se cristalizaron y su cara cambio a un gesto de sorpresa y felicidad. -Kim TaeHyung-. Inhalo y exhalo para tratar de calmar mis nervios. -¿Aceptarías ser mi esposo?-.
Tae se lanzó encima mío, uniendo nuestros labios En un beso que continuamos en el suelo del comedor. Sus lágrimas de felicidad salieron y cayeron en mis mejillas, que más tarde, se mezclaron con las mías. Si, Kim SeokJin estaba llorando, Pero no de tristeza, si no de la felicidad que le causaba el que Tae estuviera así de emocionado.
- Si, si aceptó ser tu esposo-. Sonrio Tae aún con lágrimas en los ojos. -Te Amo Tanto Jin, eres lo mejor que me sucedio-. Me abrazo fuertemente.
Pasamos al menos 20 minutos abrazados, la calidez que Tae me brindaba me dejaba hipnotizado.
Nos levantamos del suelo, nuestro llanto cesó, pero aún seguíamos muy emocionados. Tome a Tae de la mano y lo lleve a la sala, nos sentamos cerca de la ventana que dejaba ver el hermoso cielo nocturno y junto a una copa de vino empezamos a hablar:
-Recien te propuse matrimonio, pero... ¿donde te gustaría que fuera la boda ?-.
- No lo sé cariño-. Duda un momento. - Me gustaría que fuera algo privado, así entre nuestros familiares más cercanos-.
-Te parece reservar una Iglesia en...-. Pienso unos segundo. - ¿Italia?-.
-¿Italia?-.
- Si, no te parece un lugar muy romántico?-.
- Si, pero... Mi familia no se si podrá acudir por motivos monetarios-. Mordió su labio inferior.
-Cielo...-. Tome su rostro. - ¿Tu crees que dejaré que mis suegros y cuñado no asistan a nuestra boda?-. Sonrei. - Ellos estarán primero en la Iglesia-.
- En serio?-. Sonrio. -Gracias amor-.
- No es nada cariño-. Acaricie su mejilla. - Si tu estas feliz, yo estoy satisfecho-. Me acerqué y lo besé.
Todo lo que resto de la noche, la pasamos hablando sobre temas de la boda, o otras cosas triviales.
Encontré mi calma en ti, estar contigo es mi Hobby favorito. Mi lugar preferido son tu abrazos y el mejor plato que probé, son tus besos.
Estoy seca de imaginancia... loziento
