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—Hijo, ven, quiero que presencies algo que hice por mucho tiempo —Escuché la voz de mi padre proveniente el piso de abajo, con flojera de por medio me levante de mi escritorio de trabajos en el cual concluía un trabajo de la universidad.

—Ahí voy —Dije, bajando las escaleras y dirigiéndome hacía dónde provenía la voz. Pasé por el pasadizo que me llevaba a la sala de estar y ahí estaba mi padre, con su típica bata color blanca pero con una sonrisa de por medio —¿Qué es lo que me tienes que mostrar?

—A un nuevo huésped —Dijo sonriéndome con más fuerza— Va a ser tu nuevo amigo.

—Tu. Estás. Loco —Escupí. En realidad no es que no quiera tener amigos, sino, que me recorre el miedo de ser amigo de alguien, dar la primera impresión, etcétera de cosas. ¿Se me entiende? Espero que sí.

—No, no lo estoy, mira… ¡Harry! —Dijo gritando este último nombre, como llamándolo a este tal Harry. Ósea, ¿Ya estaba aquí? ¡Mierda! Daré muy mala impresión.

—Espera, ¿Harry es una persona? ¿Y te refieres a él como “algo que hiciste por mucho tiempo”? Explícame que no entiendo —Dije, en casi susurro, por si Harry escuchaba.

—Bueno, veo que le prestas mucha atención a todo lo que te cuento en la cena… —Dijo, en un tono casi molesto.

—¿Era ese experimento del cual hace 19 años te esfuerzas? ¿El cual hacías miles de resonancias magnéticas?

—Sí, digamos que ya pod-

Y apareció un chico alto, impidiendo que mi papá termine de narrar, con el cabello notoriamente rizado y algo largo, tenía unos pantalones apegados y una camisa desabrochada en el pecho, tenía unos zapatos pocos comunes pero iban perfectamente con su estilo… El sí que dio una buena impresión.

—¡Hola! Tú debes de ser Louis, ¿No? El hijo de Ben —Expresó estrechando su mano, la cual me demoré un poco en responder porque aún me percataba en cómo era él. Tenía un paquete de galletas en la mano.

—E-eh, sí, soy yo. Un gusto, Harry —Dije devolviéndole el saludo.

—Bueno, yo iré a seguir paseando por la casa, entre un rato vuelvo Ben, un placer Louis —Dijo mientras se dirigía al otro extremo de la casa.

—Igualmente… —Expresé casi en un susurro, ahora tendría que aclarar todo esto con mi padre. Volteé a ver a este último.

—Antes de que me bombardees de preguntas, todo eso te responderé en la cena, hijo, por ahora trata de socializar con él.

—¡No me puedes dejar con la duda toda la tarde, papá! ¡Ni siquiera sé como socializar! —Exclamé, como un niño pequeño que le dejan sin comida favorita para la tarde.

—Si puedo, solamente recuerda que él es una persona totalmente normal, solamente que no te asustes si en algún aspecto él llega a ser neutro, te recuerdo que él no puede sentir nada.

—¿Qué ganas creando una persona sin sentimientos? —Dije, antes de que se dirija a la salida.

—Tal vez mostrarles a todos como es una persona en realidad sin sentimientos —Y se retiró, dejándome con la duda.

*

—Hola, Harry —Me acerqué, el andaba en el jardín mirando el atardecer y yo solamente me puse a su lado, yo me senté en estilo indio y el seguía echado con las manos en la nuca, mientras se fijaba en las nubes.

—Hola, Louis, ¿No? ¿Qué tal todo? —Dijo, sin despegar su vista al cielo.

—Tú sabes, abrumado con los olores a químicos. Es cosa de todos los días… —Expresé, tratando de mirar en el cielo con el mismo interés con la cual el miraba, pero solamente veías nubes, sin forma particular.

—Dímelo a mí, soy producto de eso.

—Oh, no, Harry, no quise decir eso. ¡Discúlpame!  —Dije, sintiéndome culpable.

—No lo sientas, yo tampoco lo hago —Dijo, en doble sentido, de tal manera que pude entender su mensaje.

—¿Cómo que “no se sabe”? —Dije, mirándolo, él lo hablaba como si fuese cosa de todos los días no tener sentimiento alguno.

—Eso hablaremos hoy en la cena, saltamontes, no te apresures. Queda unas horas más… —Dijo, y algo en su voz ronca me hizo estremecer.

N/A: Es un capítulo de introducción, es la presentación entre Louis y Harry mejor dicho. Lo mejor va a seguir desde ahora xx Lo sigo más tarde o mañana, porque siempre paro aburrida ahrrre.

Experimento #22: Not feelings | Larry Stylinson |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora