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Todos estaban durmiendo en su casa, así que fue directo a bañarse, no estaba cansado, había dormido durante el día anterior a la fiesta y tampoco quería acostarse todo sudado, si bien tampoco era la gran cosa, estaba bastante seguro que el sudor de la chica de esa noche estaba aún en su cuerpo, y Manuel acababa de besarlo, se sentía extraño.

Miró la hora mientras se acostaba ya bañado, eran las 8 am, probablemente su padre querría levantarlo a desayunar en cualquier momento y si hay ruido, su hermanito correría hacia su cama y saltaría sobre él, así que se relajó todo lo posible para dormir.

Pensó en el beso con Manuel, cómo rescataba sólo eso de toda la noche, no le importaba que de hecho disfrutó y tuvo un buen orgasmo con una chica que le cayó bien y que era su tipo, el mayor con un tonto beso dejó todo aquello en segundo plano. Sí, tuvo buen sexo y se divirtió, pero Manuel le dio un beso, qué importaba todo lo demás.

Y otra vez la angustia se hizo presente, no quería tener que desayunar y ver a la cara a su padre, que seguro le preguntaría cómo la pasó, porque querría decir que bien, que Manuel le ha provocado aquello en el pecho otra vez. Pero contestaría con lo del sexo y extendería ese tema todo lo que se pueda, Manuel no existe.

Despertó pasado el mediodía, su padre se había apiadado dejándolo dormir hasta aparentemente las 14 pm. Pero a pesar de su bondad era probable que le reprochara la pérdida de momentos en familia, y sabe bien que la familia para todos ellos era lo más importante, así que se trató de despabilar un poco con el celular. Tenía un mensaje de Manuel, de las 11 am "Play? A las 8? Cenamos y jugamos".

Era curioso que a pesar de que su amigo hablaba muchísimo, en mensajes escribía tan poco, pero esas cosas tontas sobre él le gustaban, algo lo hacía reconocer detalles que sólo los adjudicaba al mayor. Decidió contestar que primero hablaba con sus padres porque recién despertaba, quedaba en avisarle. Se cambió la ropa de entre casa y bajó dejando el celular cargando, iba a disfrutar con su familia.

Vio a su madre en el sofá y se sentó con ella dándole un beso en la mejilla y luego la abrazó quedando su cabeza sobre su hombro. Ella rió y lo abrazó con amor, lo hizo cerrar sus ojos y disfrutar de la seguridad de sus brazos.

No hablaron, miraron televisión hasta que sonó su estómago recordándole que no almorzó, así que con una risa, la mujer lo mandó a recalentar la comida que le habían guardado. Decidió sentarse en la mesada a comer, estaba en silencio mirando el piso, pensaba en declinar ante la oferta de Manuel, tal vez sea lo mejor, aunque quería primero hablar con alguien que lo entienda, tal vez Dani. No eran amigos, apenas se cruzaban en jodas, necesitaría de Valentin porque por lo menos se conocen más; aunque para que no sea nada incómodo iba a necesitar a Manuel, porque es amigo de ambos. Suspiró cerrando los ojos y dejó el tenedor en el plato mientras tiraba su cabeza hacia atrás apoyándose en el mueble.

-"¿Noche larga?". La voz de su padre lo hizo abrir sus ojos y sonrió amplio cuando se acercó a saludarlo, alejó el plato con su mano izquierda aún sosteniéndolo y con el brazo derecho alargó el saludo de su padre convirtiéndolo en un abrazo. Su padre rió con cierta sorpresa pero no dijo nada, hasta que su hijo escondió su rostro en su cuello y se preocupó un poco, tomó el plato de la mano ajena y lo puso sobre la mesada, por lo que el menor pudo rodear con sus brazos mejor el cuello de su padre. Acarició su espalda y le dio un momento pensando que el chico diría algo, pero no fue así, así que se alejó para mirar su rostro. "¿Te pasó algo anoche?".

El menor negó con rapidez y se inclinó hacia su hombro para recostar su cabeza en silencio. No quería decirle nada, necesitaba sentirse seguro en los brazos de su padre, además se sentía un poco culpable por esconderle cosas, no era normal que lo hiciera, siempre le dio la confianza de decir lo que quiera, incluso esa vez que le contó su debut con la marihuana; su padre había suspirado pesadamente unos minutos pero luego hablaron sobre eso sin problemas. Pero esto no era algo que pueda responderse con un regaño o algo así, era algo que se debe aceptar o rechazar, no había mucho más. Pero también, era algo que sí o sí iba a tener que esconder, la reputación de su familia era mucho más importante que una tontería que lo hacía confundirse ahora.

¿? - TrueplikDonde viven las historias. Descúbrelo ahora