Los juegos del amor.

Capítulo 7: La cita.

(Pov Ian)

Cuando por fin me tranquilizo, la libero del abrazo, no puedo creer que deje que me viera en esta situación tan incómoda para ambos, la miro y quiero decir algo, pero no sé qué, justo en ese momento suena el teléfono, me dirijo al escritorio y contesto.

-¡¿Cómo está el hombre más guapo del universo?!- maldita sea, otra vez Leah, es que esa mujer no se cansa.

-Leah, estoy bien, ¿Qué se te ofrece?, sabes bien que no me gusta que me interrumpan cuando estoy trabajando – se lo he dicho mil veces, nunca debí aceptar  haber salido con ella.

- Ay, amorcito, tiene mucho que no nos vemos, y  te extraño, sabes muy  bien que no me gusta estar sin ti, ¿Podemos quedar para comer?, por favor, solo será un rato.

-Está bien, está bien, ¿En dónde nos vemos?- solo acepto porque no quiero seguir escuchando su voz, es tan irritante.

-En el restaurant de siempre cariño, bye, besitos – ahora tengo que lidiar con esta mujer. Conocí a Leah en una fiesta de uno de los inversionistas de la empresa, debo admitir que es muy buena en el sexo, pero odio su forma de ser, siempre es muy cariñosa, pero no del tipo de cariño que muchos quisieran tener, es de ese tipo de personas que después de un tiempo resulta ser de lo más enfadosa, y  odio eso, pero no puedo terminar mi relación con ella, no hasta que me firmen el convenio que tengo con su empresa, adivinen porque, ¡exacto!, ella es la vicepresidenta, demonios, me doy la vuelta y entonces me acuerdo de que Dany sigue en la oficina, ahora que hago.

Jajaja, mm déjame pensar, solo, no se la verdad, adiós, te dejo.

¡Maldito subconsciente!, déjame en paz si no me vas a ayudar.

-Emm,  Dany, yo, lo que acaba de pasar, te suplico que no le digas a nadie ¿Si?, yo no suelo tener este tipo de episodios de verdad no sé qué ha pasado.

-No se preocupe, yo no debí haber entrado de esa forma, la persona que hablo ¿Era su  novia?- Solo puedo ver en sus ojos la decepción,  ¿Pero por qué tendría que estar decepcionada?

Es obvio, le gustas.

Claro que no, no seas idiota, ojala le pudiera gustar.

-Sí, es mi novia, quiere que nos veamos para comer.

-Sí, bueno, yo solo había venido por que encontré irregularidades en los informes que hizo la antigua administradora pero….

-No, tranquila solo, veamos esto otro da si, aun no me siento muy bien y la verdad es que es lo que menos me importa.

-Bueno entonces vendré mañana, espero que le vaya bien en la cita- Ella suena molesta y hasta un poco… ¿Celosa?

Que estupideces piensas Ian, será mejor que vayas pensando en cómo harás para deshacerte de esa rubia.

*****

Llevo más de media hora esperando a que Leah e digne a aparecer, no sé qué piensa esta mujer, para ser sincero, no quiero estar aquí, no siento nada por ella y en estos momentos desearía que Daenerys estuviera aquí, conmigo, desde la vez que la abrace estoy seguro de que ella es la mujer de hace ocho años, y ya lo tengo decidido, en cuento termine co Leah iré con Dany y le diré que ya no puedo ocultar mis sentimientos y le diré que me gusta, que me gusta mucho.

Eso es amigo, lánzatele a la morena, pero primero tienes que enfrentar al torbellino rubio que en esta entrando.

Volteo hacia la entrada y veo a una rubia, alta, con ondas enmarcando sus ojos, que en un principio pensaras que es la mujer más angelical que hayas visto pero cuando la conoces bien te das cuenta de que es cierto que las apariencias engañan y ella es el ejemplo. Ella se va acercando poco a poco hasta que la tengo frente a mí.

-Leah, pensé que no llegarías- y ojala no lo hubieras hecho, la verdad es que no estoy de humor para que venga, no me cae nada bien, solo espero que esta reunión no demore mucho.

-Sí, bueno la verdad es que se me ha hecho un poco tarde, mira, sabes que no te llamaría si fuera urgente- aja claro esa ni tú te la crees- pero es un tema delicado así que preferiría que nos sentáramos.

-Si, por supuesto-nos sentamos en una mesa junto a los ventanales del restaurante.

-Bueno ha pasado algún tiempo desde la última vez que nos vimos.

*Inicio Flashback*

-Bueno me tengo que ir Leah- Acabábamos de echar un polvo que la verdad estuvo bastante bien, pero ahora necesitaba ir a casa a darme un baño no sé qué es lo que pasa pero por muy bueno que sea el polvo al final me queda una sensación de suciedad, sé que suena muy…..como decirlo…..giliipollas, pero esa es la verdad, no me siento nada cómodo con esta situación pero necesito esta relación para firmar el trato.

-Ok amorcito, no olvides llamarme, te amo- ambos sabemos que no me ama, pero ella no lo admitirá y a mí, sinceramente, no me importa.

*Fin flashback*

-Sí, han pasado ¿Cinco días?, más o menos, bueno, ¿Qué es lo que querías decirme?

- Mira Ian, yo…..no sé cómo decirlo….yo…..bueno primero lo primero, mi periodo se ha retrasado casi dos semana y sé que pensaras que es normal y si es perfectamente normal, el problema es que tengo mareos, ayer decidí que sería una mejor opción ir con el médico y bueno, esto es para ti-ella me entrega un sobre que pertenece a algún laboratorio, lo abro esperando lo peor, una vez decidí que siempre iba a esperar lo peor de todas las situaciones porque de esa manera, si las cosas sucedieran de diferente forma, podría pensar que mejoro, así que saco la hoja y lo que veo no puede ser cierto.

-Leah, por el amor de dios dime que esto no es cierto, dime que esto es una broma- ella suelta una risa triste mientras pone una mueca.

-Lamento decirte que al contrario de lo que piensas, esta prueba es muy real.

Y entonces veo la hoja de nuevo.

Me digo a mi mismo que esta vez sí es lo peor que me pudo haber pasado.

Leah.

No la quiero.

Está embarazada.

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Lo siento chicos, a los que leen la novela y que están al pendiente de la publicación, he demorado mucho porque desde la otra semana he estado entregando trabajos en equipo he individuales, el capi es un poquito más largo que los demás y bueno solo espero que no me odien y que les haya gustado.

Besitos :* <3

EN MULTIMEDIA LEAH CLARK