capítulo 9: el ataque soviético (rin y ibara obami)

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Con la caída de Miri y Miyo, el Clan Momobami se estaba desmoronando gradualmente, y la opinión pública comenzaba a cambiar a favor del misterioso legionario. Pero los siguientes en la lista de Kaguto eran Rin y Ibara Obami, quienes planeaban huir.

Kaguto recibió una llamada urgente de Edward, quien le informó sobre los planes de fuga de Rin e Ibara y la necesidad de llegar al aeropuerto antes que ellos. Con determinación, Kaguto y Edward se dirigieron al aeropuerto en un automóvil BMW GTR M3 modificado para persecuciones.

Kaguto: "Ven, Edward. Vamos a necesitar tu ayuda. Debemos llegar antes que ellos al aeropuerto."

Edward: "Kaguto, y esta nave..."

Kaguto: "Pertenecía a mi padre. Ahora, vamos."

El auto aceleró a toda velocidad, y lograron llegar al aeropuerto antes que Rin e Ibara.

Kaguto: "Este es el plan. Nos disfrazaremos de policías, buscaremos una zona aislada sin cámaras y abriremos fuego con estas subfusiles. Usaremos munición sub-sónica Winchester 50-110, ideal para cazar búfalos. Incluye freno de boca reductor de fogonazo y silenciador, además de un sistema anti-retroceso."

Edward: "Kaguto, estás desatado. Tu madre estaba loca."

Kaguto: "Edward, ni siquiera tienes idea. Amigo, ten cuidado. Solo se fabricaron dos de estas en el mundo."

Edward: "Vamos, hagámoslo."

Fue entonces cuando llevaron a cabo su emboscada. Rin e Ibara, nerviosos y atrapados en el puente hacia la cabina del avión, se vieron rodeados de repente por Kaguto y Edward.

Los proyectiles impactaron los cuerpos de Rin e Ibara, desgarrándolos sin ninguna expresión de disfrute por parte de Kaguto. Nadie supo lo que había ocurrido, ya que el ruido del motor ocultaba el sonido de los disparos. Cuando la policía del aeropuerto llegó, se encontró con una escena macabra y grotesca. Las heridas eran tan graves que resultó imposible identificar quién era quién.

Terano, al presenciar la horrenda escena, se quedó petrificada, consciente de que habían enfurecido a Kaguto de una manera terrible. Kaguto se aproximaba, clamando su venganza implacable y despiadada, prometiendo cazar a todos con un dolor inmenso y violencia indescriptible.

Terano: "Hemos enojado a la bestia."

De repente, sin previo aviso, apareció una sombra del pasado junto a Mary Otonotte: Sachiko Juraku y Miruka Sado. Sachiko era una mujer sádica y psicópata, amante del dolor y retorcida por naturaleza, mientras que Miruka era sumisa y vulnerable a los deseos enfermizos de Sachiko.

Sachiko: "Yo me encargaré de él, ¿verdad, Miruka?"

Miruka: "Sí, ama."

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kakeguri: los ultimos dias del clan momobamiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora