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Luego, el chico de las mejillas adorables se fue, me agradeció cientos de veces más antes de irse, después me dio otro abrazo que por poco y hacía del contrato una bola de papel. Eran demasiados cambios drásticos en un par de simples días.

Y hablando de cambios, cuando menos pensé, era el día de la fiesta. A mi ni siquiera me gustaban las fiestas, tampoco puedo decir que las odiaba, pero siempre iba con la cara larga y ni siquiera me arreglaba debidamente. Pero esta vez, me esmeré mucho en verme bien, al menos un poquito lindo, aunque la cadera me dolía como nunca. Llevaba una camisa muy delgada de satín color negro; unos pantalones tipo cuero color negro y zapatos negros también. Arreglé como pude el desastre de mi cabello y sí, puse un poquito de maquillaje en mis ojos para que mi mirada fuese más profunda, aunque de eso no tenía nada. Me puse mucho perfume y emprendí marcha hasta el edificio que los chicos alquilaron por toda esa noche para dar "la mejor fiesta del año", como indicaron en las invitaciones.

Cuando llegué, noté que era un lugar muy grande y la música se escuchaba muy fuerte, había luces bailando en el cielo que prácticamente señalaban hasta en el espacio dónde era la fiesta. Era de esperarse que al entrar, el lugar estuviese repleto de gente tanto común, como muy famosa; parecía un lugar de ensueño, todos eran tan guapos, la mujeres eran tan preciosas, como recién salidas de una revista.

Wonho me envió un mensaje indicandome donde se encontraban, así que fui directo al lugar y divisé a los seis chicos hablando en una esquina, supuse que estaban esperandome; todos eran preciosos, debo recalcar, sumamente preciosos. Incluso me atrevo a decir que ellos eran los más perfectos, grandiosos y relucientes de todo el lugar.

Iban demasiado bien arreglados y seguramente con el precio de una de sus camisas podría comprarme el almuezo, comida y cena durante un año. Por supuesto no tardé en cohibirme, pues mi ropa se veía tan mala y pasada de moda que incluso llegué a sentirme avergonzado de mi mismo. Pero casi todos me saludaron y me hicieron tantos cumplidos que lograron que me sintiera un poco más seguro de mí mismo.

Antes de comenzar a separarse para hacer bullicio, tomaron el escenario y yo los esperé detrás de escena. Fue increíble como todos comenzaron a gritar cuando ellos subieron; en resumen, allí arriba saludaron, hablaron un poco y después llegó la hora de presentarme ante toda esa gente cuando Hyungwon "dijo la frase".

Salí de mi escondite con un nudo en la garganta, quería llorar de tantos nervios como un niño pequeño. La gente se volvió loca y yo me sentí un poquito cohibido con todos esos ojos sobre mí; salude y me presenté con la voz un poquito quebrada, pero aún así, al parecer, fui aceptado por el público. Me sentí querido, mi corazón latía dos millones de veces en un segundo, mis piernas temblaban y finalmente dimos una reverencia como despedida, inaugurando esa loquísima fiesta.
Taehyung, Jaehwan y Solar me esperaban debajo del escenario para abrazarme y felicitarme, junto a otros famosos que nunca me esperé conocer y mucho menos abrazar en toda mi existencia.

Presenté a mis tres mejores amigos con mi nuevo grupo, Jaehwan rápidamente le agradó a Changkyun, gracias al cielo. Solar y Taehyung saludaron a todos ellos con muchísimo entusiasmo, pero no se quedaron con ninguno de ellos, solo se fueron a tomar algo "para no molestarme", aunque no me habían causado ninguna molestia.

Estuve vagando por el lugar tal vez por una hora y media, saludando, bailando con desconocidos hasta que intentaban propasarse y debía huir. Por supuesto, también estuve rechazando a todas y todos esos que "me invitaban una copa", porque yo no bebía.

En el camino descubrí a Wonho bebiendo y bailando muy juntito junto a otro hombre cuyo nombre no sabía, de hecho, nunca antes lo había visto o quizá sí, porque tenía un sentimiento de familiaridad con su cara ¿Acaso era un idol también? Ni siquiera logré salir bien de mi ensoñación pues, para mi sorpresa, comenzaron a besarse frenéticamente ahí en medio de la pista de baile, eso me dejó con los ojos cuadrados.

—¿Acaso no estaba saliendo con Hyungwon?— me pregunté a mi mismo en un susurro que realmente ni yo mismo escuché por el volumen de la música que ambientaba la fiesta; negué con mi cabeza y continué caminando sin rumbo entre toda la gente, era ese el tipo de huida que solo a mi, Yoo Kihyun, se le podía currir.

Hyungwon también estaba casi borracho, bailaba con un hombre alto y apuesto, los pude ver un poco más adelante, cerca de una esquina; siendo sincero, era casi parecido a Shownu, aunque creo que este nuevo chico era más bajito. Bailaban y reían, se abrazaban y ah, bueno, admito que hacían una pareja borracha muy linda.

—Nuevo shipp desbloqueado— susurré ahí  en mi "escondite oscuro", (que en realidad era una bola de personas bailando que me pisoteaban y repisoteaban los zapatos) mirando cada uno de sus movimientos con atención. No me di cuenta que mi mirada era tan pesada hasta que Hyungwon pudo percibirla y caminó a tropezones hasta mí para abrazarme muy fuerte y darme besos alcohólicos por toda la cara

—¡Miren aquí, el pequeño miembro nuevo, mi Kihyun! Vas a hacerlo muy bien, mi pequeño, ¡WOHOO! ¿Te estás divirtiendo? Mírame a mi, estoy con ese ga... — Definitivamente, estaba muy borracho y eso que la fiesta apenas llegaba a su punto. ¿Por qué lo digo? Bueno, se le perdió el chico con el que bailaba y sin terminar de hablar o siquiera despedirse, se fue a buscarlo casi corriendo.

No hice más que reírme mientras negaba con mi cabeza, no podía  creer que todo aquello era real; y luego de un segundo continué con mi "camino", iba vagando simplemente en pensamientos y conversaciones conmigo mismo sobre la demás gente como siempre hacía, encerrado en mi burbuja y huyendo de quienes trataban de hacerme beber o ingerir cualquier tipo de sustancias de dudosa procedencia. Lo único que sí aceptaba era bailar un rato el ritmo que fuera pues  ¡Oh, cómo adoraba bailar!

Todas mis dudas, al parecer, en esa fiesta desaparecieron; o al contrario, aumentaron considerablemente, tanto así, que cuando entré al baño pude ver a Changkyun y Jooheon en medio de "algo" que conllevaba meterse las manos entre la ropa y las lenguas en la boca.

Casi olvido mencionar que tiré el vaso de agua que llevaba en las manos por el susto que me metí cuando los vi ahí en una esquina hechos un nudo de brazos y piernas

Oh, sagrada agua que tardé más de una hora en conseguir... Ahora se la bebía el diablo mientras se burlaba de mí y mi garganta seca.

Me quedé mirando como el vaso rojo de plástico ecológico caía en cámara lenta hasta azotar con el piso, ya ni siquiera presté atención al par de hombres que se habían estado manoseando en mi cara por casi veinte segundos más, volví mi vista a ellos cuando ya se habían separado, se acomodaron las prendas y Changkyun habló en un tono que yo desconocía del todo

—Kihyun, ¿Qué... Qué haces aquí?...— Cuestionó mientras se limpiaba la boca y Jooheon hacía lo mismo con una sonrisilla pícara entre los labios, ¡Cabrón, me vas a pagar mi vaso de agua!

—¡Perdón! Yo solo... Hey, espera... Yo venía a orinar, pero ustedes dos...— Respondí con confusión mientras me señalaba, los señalaba y señalaba hacia la puerta, al terminar mis ademanes caí en cuenta de lo ocurrido, fruncí el ceño y me llevé las manos a la cintura como si estuviese enojado, aunque de eso nada

—¡Ustedes dos se apoderaron del baño y ni siquiera pusieron seguro a la puerta! — mi tono de voz era tan serio y ronco que me atrevo a decir que seguro me veía sexy y calentaba más que el sol de verano a cualquiera, aunque ese no era el punto, sino que esos dos se habían estado comiendo en el baño sin ningún cuidado.

Changkyun y Jooheon se quedaron mirándome con los ojos gigantescos y después voltearon a verse ente ellos

—Solo... Eran besos, no estábamos haciendo nada malo, además, ¡Nos asustamos porque eres muy silencioso!— Respondió Jooheon. Pasó su brazo por la cintura de Changkyun y se dispusieron a caminar hacia la puerta despreocupadamente.

¡Puta que eran como unos adolescentes hormonales!

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