IX: Rienda suelta a la imaginación

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Escribo sobre todo lo que veo,
escribo todo lo que siento,
pero jamás diré todo lo que escribo.
Porque todo lo que siento
tiene palabras escritas con tinta,
pero jamás tendrán voz.
El que calla otorga,
y mis pensamientos de papel otorgan
en el fondo del cajón.
Lleno de polvo y lágrimas,
mi corazón.
¿Y qué hago?
Si soy el último pétalo osado
de la última flor
Aferrado con esfuerzo y honor
por no caer en ese basto campo
de necios e ingenuos
Que creen en el egoísmo puro y superfluo.
Entre la niebla de la mañana se halla
mi imaginación.
Mi mente son las calles aturdidas
por la incertidumbre de la niebla.
A todas horas una bestia sale de las sombras
y cobra vida.
Es la imaginación tenebrosa
transformada en alucinación esquizofrénica.
Causó estragos en una época pretérita,
bombardearon los calos y los tragos.
Y hoy hago cargo de conciencia
¿Y qué hago?
¿Le doy rienda suelta?
¿Saco de la jaula a la bestia
para darnos una vuelta?

VERSO DE DESPEDIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora