V: No respondas todavía

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Calar, mojar, empapar gota a gota el mar
¿Es eso posible?
Detener las horas al verte bailar
¿Es eso posible?
Enamorarse de tu amada cada mañana
¿Es eso posible?
Sí, anoche volvió a ocurrir, lo volví a sentir.

Después de un año contigo,
después de abrazarnos como dos copos de nieve ansiando calor,
después de besarnos como se besan el miedo y el valor,
después de reír y reír contigo
me volví a enamorar de ti,
aún estando enamorado ya.

Parece magia, parece imposible.
Apagar el sol con un soplido frío.
Imposible.
Ahuyentar la luna con un aullido.
Imposible.
Resistir besar tus labios cuando ríes como loca.
Imposible.

Por mis venas prende la mecha
del explosivo,
la pólvora, tú vidriosa mirada,
castaña y cariñosa.
Y en mi corazón clavada arde y se consume la flecha de Cupido.
Pasión irresistible.

Mi hoja aletea ligera y fina,
movida por tus palabras, castaña y amarilla.
El huracán ruge y el viento algo trama,
pero mi hoja se aferra valiente y firme
a cada una de tus ramas
temiendo tener que irse,
porque me amas.

¿Me amas?

Quiero que seamos nuestro futuro.
Quiero despejar con besos y versos los nubarrones oscuros.
Quiero adivinar el mañana en las arrugas de tu cara.

¿Me amas?

Y si me dejas...
Seré la teja del tejado de tu casa.
La teja que aleja las quejas de la lluvia.
Seré tu sábana blanca
la que mantiene apasionada y cálida nuestra inolvidable cama.
Por favor,
déjame cogerte de la cintura
y arroparte bajo la manta.
Cuando saltes de alegría y cuando estés enferma.
Cuando me mires en el salón bajo las vigas de madera.
Las miradas ardientes y sinceras
son las brasas de la chimenea,
y afuera, frío, mucho frío.

¿Me amaste?
¿Me amas?
¿Me amarías?

Por favor, no respondas todavía,
déjame ser feliz aunque sea otro día.
Junto al fuego, el juego de las caricias.
Besos y miradas llameantes y yo callo.
No respondas todavía...
Yo te amo.

VERSO DE DESPEDIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora