In my blood [Quil Ateara]

➤09; LUNA AZUL.

El ambiente en el lugar era tenso, no podía estar tranquilo y mucho menos si ellos están a mi alrededor.
Después de que Ateara me dijera que se imprimió de Dalia mi enfado aumento muchísimo, Embry y su manda son personas que le han causado tanto dolor a Dalia, y saber que uno de ellos está enlazado como su alma gemela me enferma. Ella es mi familia, parte de mi y solo quiero protegerla.

-¿Quieres algo de tomar, Fred?

-No, gracias Emily. -Le regalo una sonrisa agradecido por su amabilidad.

Emily es la única persona de la reserva quileute que me trata como una persona normal, es muy amable y fue quien salió a detener la gran golpiza merecida que le iba a dar ha Quil. Me invito a pasar y hablar como personas civilizadas sobre el tema, iba a negarme pero se perfectamente que la imprimación es un tema delicado y por más que quisiera negarme no podría.

Ahora mismo estamos todos sentados en la mesa, estamos tensos y se ve que ninguno está dispuesto a cortar la tensión. Así que lo haré yo.

-No pueden ir y acercarse ha ella como si nada. -Mi tono de voz salió con enojo y Sam lo noto.

-Ella es la hermana de Embry y ahora es impronta de Quil, ambos son parte de mi manada y eso hace que Dalia también lo sea. -Habla el alfa. -Y sabes que tengo razón, eso te hace enfadar porque no puedes hacer nada al respecto. No puedes interponerte en eso, ni tu y mucho menos tu asquerosa manada.

Un gruñido sale de mi garganta involuntariamente.

-Te equivocas. -Mis ojos chocan con los suyos retandolo. -Dalia es parte de la manada azul, hizo el pacto.

Los ojos de Sam y del resto se abrieron con asombro, no se esperaban eso.

La puerta fue abierta de golpe cuando que todos pongamos los ojos en la persona que acaba de llegar.

-¿¡Ella hizo qué!? - Embry entra a la casa, su rostro se muestra rojo por el enojo o tal vez por la sorpresa. -Eso no es verdad.

Me levanto de mi lugar para hablar con el.

-Lo es, ella lo hizo y es parte de la manada luna azul.

Un gruñido de enojo sale de la garganta de Call, se acerca a mi y Sam en seguida se levanta de la silla temiendo que hagamos algo.

-Tu la obligaste. -Afirma con furia.

Una risa agridulce sale de mi garganta.

-Ella lo hizo voluntariamente, jamás la obligaría hacer algo y deberías saber eso.

Embry me toma por el cuello de mi chaqueta estampando me en la pared, el ruido que provocó mi cuerpo al chocar con la pared hace que Emily que se encontraba en la otra esquina pegue un brinco.

-¿Cómo pudiste hacerle eso? -Escupe las palabras en mi cara.

-¿Cómo pudiste abandonarla cuando más te necesitaba?

Mis palabras lo golpean demasiado fuerte, su rostro se transforma en uno de dolor y arrepentimiento. Y eso me llena de satisfacción, muestro una sonrisa cínica por haber logrado dar en su punto más débil y después de mirar que disfrutaba de esto Embry solo elevo su puño y me dio un buen puñetazo en el pómulo. Siento como la sangre resbala por mi mejilla y después como la herida se regenera.

-¡Embry! -Grita su alfa.

Llevo mi mano a la herida limpiando el rastro de sangre y una risa amarga surge de mi garganta.

—¿Te duele escuchar la verdad, Call?—
Lo miro directo a los ojos y sin miedo me atrevo a decirle todo lo que tiene merecido. —Tu mismo orillaste a Dalia hacerlo, tenía miedo y estaba desesperada. Intento decírtelo tantas veces, vino ha intentar recuperar a su hermano y el solo le dio la espalda. Así que no te sorprendas que haya tomado esa decisión, yo y mi gente la recibimos con los brazos abiertos. Ella es mi familia ahora y no permitiré que la vuelvas ha dañar.