Disclaimer: los personajes de Kuroko no basket y las imágenes no me pertenecen y sólo los uso con fines de entretenimiento.
Akashi y Furihata cumplieron dos meses de vivir juntos y el pelirrojo creyó buena idea invitarlo a una fiesta en la empresa, la cual se celebraría en un importante hotel.
Cuando llegaron al salón, montones de invitadas atacaron a Seijurou con sus saludos, el castaño decidió darle su espacio mientras comía algo. Estaba sirviéndose algo de sushi en la mesa de bocadillos cuando escuchó una plática a su espalda.
—Seijurou es tan apuesto! —dijo una chica— pero quien es esa que lo come con los ojos?
—Es Ayame Matsumoto, la que iba a ser su prometida —Kouki se atragantó, tomó una copa de vino y la vació— Y aún así.. rompió el compromiso por alguien más.
—Yo escuché que es un hombre —dijo una tercera— y no sólo eso, es un simple estudiante universitario!
—Digo, miralo, es elegante, atractivo, el mejor en todo. Podría tener a cualquier a sus pies..
El castaño sintió que su sangre se enfriaba hasta convertirse en témpanos y miró a su novio. Su personalidad era gentil y agradable, su físico te quitaba el aliento, su inteligencia había creado grandes avances en la empresa aún trabajando medio tiempo. Seijurou miró un momento a Kouki y él le sonrió para que no se preocupara, si iba a heredar la compañía debía ser amable y tener esas largas charlas con cada invitado.. Pero parecía que se divertía.
A veces lo olvidaba porque él estaba casi a todas horas a su lado, pero Akashi era verdaderamente elegante. La palabra no le hacía justicia cuando la tela se ceñía contra sus músculos, rodeaba su níveo cuello con aquellas corbatas y caminaba como si el mundo pudiera esperar.
Él adoraba cada aspecto de su novio, pero a veces sentía.. Que no estaba a la altura.
Dejó a un lado el platillo y fue al baño. Se detuvo frente al espejo mientras calientes lágrimas caían por sus mejillas. Odiaba sentirse así de inferior, odiaba ponerse celoso..
Tal vez Akashi lo quería, tal vez le tenía respeto, pero no deseo.
Desde que empezaron a salir hacia algunos años, no habían tenido relaciones ni una vez. Dormían en habitaciones separadas, respetaban la privacidad del otro y lo peor eran los besos: Cada vez que Kouki intentaba ir más allá, el pelirrojo se disculpaba y lo evadía.
Intentó calmarse cuando un suspiro llamó su atención. Vio que la puerta de un cubículo se sacudía con un golpe, ligeros gemidos lo hicieron enrojecer mientras la puerta continuaba sacudiéndose.
—A.. Aominecchi..
Se cubrió la boca y salió corriendo, tropezando con alguien.
—Kouki ¿que sucede? —dijo el pelirrojo sujetando sus mejillas— estuviste llorando?
—C-claro que no! Sólo me mojé el rostro..
Akashi arrastró al castaño hacia el auto, a pesar de sus quejas.
—Sabes que puedes confiar en mi, verdad? —tomó su mano sin quitar los ojos del camino— No quiero estar en un lugar en el que no estés cómodo. Eres todo para mi.
Kouki se mordió el labio aguantando las lágrimas.
...
Holi! Sé que quedó triste, pero mañana voy a subir la última parte de esta mini historia para seguir con drabbles individuales.
Gracias por leer y por sus lindos comentarios! Siempre me sacan una sonrisa 💙
Saludos!
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Desafío de diciembre: drabbles AkaFuri
FanfictionDesafío de treinta y un días durante el mes de diciembre para la pagina Porque amamos el AkaFuri en facebook. Cada día una temática diferente para la pareja de Akashi y Furihata. 💙 Mención de algunas otras parejas dependiendo del drabble.