Capítulo VIII: Las tres mil quinientas reglas (parte II)

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"Saludos Segundo Maestro Lan, el hijo del líder de la secta Yunmeng Jiang, Jiang Wanyin " se apresuró a saludar Jiang Cheng antes de permitir que su hermano arruine las cosas como él solo sabe hacer, hizo una reverencia, miró con reproche a su hermano que imitó su acción "Estoy aquí junto a mi hermana mayor, Jiang YanLi y mi hermano mayor Wei Wuxian, es un honor poder recibir las lecciones del Clan Lan"

"Es mi honor" fue la simple respuesta de Lan WangJi.

Todos quedaron en silencio, Jiang Cheng no sabía que decir por lo que solo miro a su hermano y Wei Wuxian miraba a Lan Zhan que este le devolvía la mirada con frialdad. 

"Algo me dice que eres de pocas palabras" río Xiao Zhan "Así no conseguirás una esposa".

Los ojos del joven Jiang se abrieron exageradamente por la estúpida broma que acaba de decir el idiota de su amigo.

Lan WangJi solo le dió una mirada helada, sin mostrar ninguna expresión y con el mismo aire de "soy superior no me toques" se fue dejando a un Wei Wuxian divertido y a un Shidi que casi le da un paro cardíaco.

"¡Wei Wuxian! ¡¿Que haces provocando al segundo Lan?!" estalló después de unos segundos en shock "¿No recuerdas lo que nos dijo padre y madre?"

"No te pongas así ¿Es que nadie puede decir su opinión aquí o qué?" comentó Wei Ying con una expresión de aburrimiento "Apuesto a que no es la primera vez que se lo dicen y se perfectamente lo que dijo tío Jiang y Madam Yu, no voy a provocar problemas" la mirada del menor decía claramente 'no te creo nada' "Ya verás, voy a portarme bien".

Xioa Zhan no queriendo hablar del mismo tema, decidió buscar uno que sea entretenido e interesante para que los dos hablarán mientras caminaba hacia el comedor para la cena, hoy no habría lecciones hasta el día de mañana por motivos de llegada de otros estudiantes. 

En Gusu Lan se cena temprano y el toque de queda era a las nueve de la noche, y nadie puede incumplir el toque de queda. Xiao Zhan sabiendo lo que se viene en los próximos días comenzó a maquinar y rebuscar en su memoria el diálogo y acontecimientos importantes que ocurrirán. 

Cuando Xiao Zhan estaba por pasar por un pasillo, unos miembros del Clan Lan cargaban a un cuerpo en una camilla, Xiao Zhan quedó en blanco y Jiang Cheng miro horrorizado el cuerpo.

"¿Que le pasó? ¿A sido herido?" Preguntó Jiang Cheng a su hermano a su lado.

"¿Herido? Yo diría que muerto".

"¿Muerto? ¿Cómo puede estar muerto si aún sigue respirando?"

"Hechicera malvada".

"¿Hechicera malvada?"

Tanto Jiang Cheng como Lan Zhan, que estaba más adelante de los dos hermanos, entrecerró los ojos con curiosidad por las palabras del joven Wei. 

¿Hechicera malvada?

"Segundo Joven Maestro ¿A donde lo llevamos?"

"Llévenlo a dentro con tío y el hermano mayor" el tono de voz de Lan WangJi era indiferente, seguía pensando en lo que dijo Wei Wuxian.

[...]

Xiao Zhan salió del comedor, había comido de hospital, no había otra forma para llamar a eso. La sopa era medicina china y la comida sin condimentos ni carne, era lo que uno come en un hospital. En verdad Xiao Zhan no se quejó, hace unos años se había sometido a una dieta estricta para bajar de peso rápido y comparado con la comida de los Lan, esta última era un manjar en comparación de lo que comió en ese momento. 

Pero más tarde cuando se hizo famoso y decidió aprender a cocinar, dejo de torturarse en perder peso y decidió en seguir una dieta sana y equilibrada. Ahora que había transmigrado en este cuerpo, no conocía la capacidad de comer de Wei Wuxian y no se podía guiar por solo el solo de hecho que era físicamente igual al su "yo" del otro mundo. Una de la tantas diferencias es la capacidad de resistencia al beber alcohol, Wei Wuxian era un Dios en ese hecho pero en cambio Xiao Zhan era un total fracaso, con solo dos vasos ya caía borracho. 

Y cuando hablamos de dos vasos de alcohol, se refiere al vino tinto. 

Xiao Zhan suspiró mientras miraba hacía el atardecer, apenas eran las siete y media o eso calculó a simple vista. 

¿Que podría hacer?

Jiang Cheng estaba hablando con algunos jóvenes maestros de otras sectas que conoce, y como Xiao Zhan no tenía ni idea de quiénes eran decidió irse, Jiang YanLi se había retirado a su habitación a descansar. En resumen, no tenía nada que hacer.

¿Podría salir?

No estaría rompiendo ninguna norma si vuelve antes de las nueve y de cualquier manera, tenía razones suficientes para viajar a la ciudad. Quería mejorar sus habilidades de volar sobre la espada, antes salir reviso si llevaba la pieza de Jade que permitía la entrada y salida del Receso de las Nubes, al ver que todo estaba en orden salió.

La figura de blanco que vio todo desde la parte superior de las escaleras, quedó ahí de pie incluso después de Wei Wuxian se hubiera ido.

[¡La historia ya llegó a las 100 lecturas! Gracias por el apoyo y sobretodo ¡A todas las personas que están compartiendo la historia! No se como agradecerles de verdad, muchas gracias de todo corazón ♥]

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