Cayendo En Tus Redes

Capítulo 5: Un simple roce.

Después de hablar un rato y negarle a Helen repetidas veces que no me gusta Dereck, me deja tranquila porque recuerda que tiene que hacer una tarea de lengua y pues la está copiando de mi, solo por eso me salvé de que me moleste con Dereck.

Estoy perdida en mis pensamientos acerca de una película que me había visto el día anterior llamada: The Kissing Booth.

—Kate gracias —Helen me entrega el cuaderno.

—Siempre, estúpida —giro los ojos.

—¿En qué piensas? —me mira con atención.

—En la película que te comenté que ví ayer, estaba bien buena, creo que hoy me veré otra —digo contenta.

—¿Te imaginas a Dereck siendo tu Noah Flynn? —me mira con cara de perversión.

—Oye no es v... —me interrumpen.

Gracias a Dios.

—Buenos días alumnos ¿Tienen listos los trabajos que les dejé? —es la profesora de lengua, Helen y yo nos encontramos rezando para que no note el parecido de nuestros trabajos.

—Si —decimos todos los estudiantes al unísono.

—Que raro que todos la hicieron, les agregaré 10 puntos extras al trabajo solo por eso.

—Yeiii —escucho a Helen festejar a mi lado —Los 10 puntos que había perdido —dice con cara de niña soñadora.

[...]

Después de entregar los trabajos y exitosamente pasar desapercibidas, nos dieron una estresante clase de matemáticas hasta que al fin tocaron el timbre de receso, nunca estuve más feliz de escuchar ese timbre, hasta hoy, tengo hambre y estoy estresada, la clase de mate fue súper intensa.

—¡Vamos! —digo apurando a Helen  —De verdad tengo hambre —le digo en tono de queja.

—Te pareces a mí, aw que orgullo —me mira soñadora—, vamos que no eres la única aquí —sonríe inocente.

Emprendemos nuestro camino hacia la cafetería y lo primero que hago es meterme como niña loca a la fila, de verdad muero de hambre, tomo un puré de papas con queso y un jugo de manzana y voy hacia mi asiento para encontrarme a Helen comiendo lo mismo.

—¿Cómo es que fui primero a buscar mis cosas y te dieron las cosas primero? —digo confundida.

—Tengo mis contactos —me guiña un ojo y coloca su dedo índice sobre sus labios exigiendo discreción.

—Eres un caso Helen —río por lo bajo.

Me dedico a comer mi puré y me pierdo en el sabor, empiezo a mirar vagamente a todas las personas comer con tranquilidad hasta que me encuentro con un Dereck muy sonriente hablando con un grupo de chicos que me imagino que son sus amigos.

Me quedo mirando cada detalle de él, su sonrisa y sus hermosos hoyuelos marcados en sus mejillas, también noto la forma en que disfruta hablar con ellos, su mirada de felicidad, la comodidad que transmite y lo relajado que está.

—Tierra llamando a Kate para que aterrice de Derecklandia —Helen agita su mano frente a mis ojos repetidas veces.

—No molestes Helen —ruedo los ojos.

Sigo observándolo pero ahora está serio, pero no es una seriedad mala, sino de que está interesado en lo que está escuchando y la verdad se ve tan sexy.