Dioses [SasuSaku]

Capitulo 2

Sasuke se retiró de la gran sala y regresó al área de entrenamiento. Reuniría a sus mejores hombres y descendería a la tierra lo antes posible para llevar a cabo su gran misión.

Los encontró descansando debajo de un cerezo, uno de los pocos de allí. Los cerezos no nacieron en la tierra de los dioses, pero como eran un regalo especial de la diosa de las flores, los árboles habían logrado mantenerse al día. A pesar de escuchar mucho sobre ella y su hermana mayor, Sasuke nunca tuvo la oportunidad de conocerlas, y recordar eso lo hizo recordar la misión nuevamente. ¿Podía verlas? Viviría en Japón, por lo que en algún momento tendría que conocerlas.

Se acercó a sus hombres, quienes se levantaron tan pronto como lo vieron y explicaron cuidadosamente y en detalle lo que iban a hacer. Al final, incluso los invitó a vivir con él en la tierra después de terminar la misión. Su invitación fue pronto aceptada, especialmente por Naruto, que no había visto a Kushina, su madre, una ninfa que vivió en el Monte Fuji durante mucho tiempo.

El rubio era primo de Sasuke, el resultado de la traición de Minato con una ninfa de la tierra. Minato hacía mucho tiempo se había visto obligado a casarse con Imeko, la primogénita de Amaterasu. Con ella había tenido dos hijos, Obito y Shisui, y fuera del matrimonio con la mujer que realmente amaba, tenía a Naruto.

A Imeko nunca le molestó la traición. Esto era muy común en la tierra de los dioses, y el número de hijos ilegítimos solo aumentó. Nunca había amado a Minato, su verdadero amor había muerto con su hijo en una guerra provocada en el mundo humano. Ambos eran guerreros y les encantaba pelear, simplemente no pensaron que esa sería su última batalla. Un viejo enemigo de Amaterasu aprovechó que habían descendido al suelo terrenal para matarlos cuando los vio más vulnerables.

Imeko solo se volvió a casar porque quería hijos. No le molestaban las traiciones de su esposo, en realidad lo apoyaba. Ella quería que él estuviera con su amante, para luego no tener que arrepentirse. ¿Qué sentido tendría ella en contra de su esposo y ese hijo si no lo amaba? Se vio obligado a casarse con ella y le dio lo que más deseaba, un hijo, dos por decir la verdad, ¿qué más podía pedir?

Aunque Naruto no era el nieto de Amaterasu, debido a que no nació de Imeko, no impidió que la Diosa lo amara como si lo fuera. Obito y Shisui amaban a su hermano menor y nunca lo habían degradado por ser inferior a ellos. El rubio había nacido en el mismo año que Sasuke, lo que les permitió convertirse en mejores amigos, aunque ambos eran muy diferentes.

Sasuke y sus hombres acordaron los últimos detalles de la misión y determinaron encontrarse al día siguiente, al amanecer, en el mismo lugar para viajar a la tierra. Durante el resto de la tarde, permanecieron en el área de entrenamiento practicando la pelea de espadas y poniendo en entrenamiento todos sus poderes, preparándose para la lucha de los días futuros.