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Amanecí con un deslumbrante en mi cara, mi hermana había abierto la puerta de mi habitación para causar malestar y levantarme, odio que me levanten, me pongo de pie, le clavo una mirada penetrante para que se de cuenta que me molestó eso, pero fue inútil, comenzó a reír a carcajadas, me dirijo al baño rápidamente, luego voy a la cocina, tomó mi pan con queso y un café caliente, mientras estoy comiendo conversó con ella, todavía no había pedido permiso pero era era ovbio la respuesta.

-Mady llevas una cara fea hoy- anuncia haciéndome molestar más.

-Claro como la tuya Ivy- respondo inmediatamente haciendo que rodee sus ojos en blanco.

-Andas de muy mal humor- dice llevando su mirada a su comida.

-Tengo que decirte algo- sonrió falsamente mientras miro sus ojos.

-¿Y ahora qué quieres?- habla con una cara juguetona.

-Ésta noche iré donde Aliss, puedo?- hablo esperando su respuesta.

-Sólo no debes venir tarde- añade dándome una mirada rápida mientras sonríe.

-Buenos, gracias, no demorará mucho, solo iré a comer- mencionó para disminuir un poco la preocupación que se generó.

Me levanto de la mesa, lavo mi taza junto con el plato y dejo secar en la percha, me dirijo a mi habitación a buscar con que me iría hoy, encontré un jean negro, una blusa negra con blanca, un chaleco negro y unos convers, dejó mi outfit en mi cama y me dirijo a bañarme.

Salí de la ducha, me puse un short junto a una remera rosada mientras llega la noche, comienzo a secar mi cabello, lo odio, aveces es suave y otros días amanece como si tuviera chicles pegados en el, sigo compitiendo con mi cabello hasta que logró secarlo por completo, comienzo a poner un líquido rosado, mi hermana me lo regalo para que lo ponga en mi cabello antes de plancharlo, termino de volverlo lacio, normalmente mi cabellera en la puntas tienes unos rizos mal definidos, acabo y por terminar añado silicona para darle un olor especial y para evitar que se construya el frizz.

Me alcanzó la tarde, realmente sentía que iba a llegar muy tarde, ella nunca mencionó la hora en la que debemos llegar y dejo mi preocupación de lado, comienzo a cambiarme, termino y empiezo a ubicar crema en mi rostro, continuo con otra crema de colágeno, limpio mis labios y pongo sobre ellos un color vino para rescatar mi rostro, giro un poco mis pestañas y dejo que mi color de ojos cafés claros juntos con ellas resalten, no pongo nada más, no me gusta el maquillaje en mi cara, no me gusta sentirme otra, salgo de mi habitación y hablo con mi hermana mencionando que ya me iba, ella asiente con su cabeza y lo único que me dice es:

-Ve con cuidado, cuídate mucho y regresa pronto- mientras mira fijamente mis ojos.

Ya oscureció, eran las 7pm sin más tardar llegó donde Aliss, por fuera se ve su sala con muchos colores, música ligera y pocas personas riendo, entro y la veo, saludo a todos muy cordialmente, a los pocos que se encontraban ahí ya los conocía, realmente estaba cómoda con ese ambiente.

-Aliss ya tengo hambre, no que era solo una comida, esto ya es una party- digo mientras miro alrededor.

-Eso pensé yo, quizás sólo nosotros- dice mientras mira a Edgar, él que cumplía años.

-Van a venir más?- mencionó dudando de mi voz.

-Eso dice Edgar- habla con timidez.

Se levanta y va a atender a los que se encontraban afuera esperando que les hagan pasar, yo me quedo junto a Alex, es un buen amigo, sinceramente a Edgar no lo conocía, se veía agradable pero su semblante coqueto no me gustaba.

Sus Falsas Palabras. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora