|Mi sexy abusador| [Yaoi/Chico x Chico]

Capítulo 6:

POV ADRIAN:

Bueno, el avance es el siguiente: Jim me invito "amablemente" a estar la tarde en su departamento, a pesar de que todo el mundo lo considera una persona desagradable y mala.

Tuve tiempo de conocerlo mejor, no es lo que parecía desde un principio.

Al dejarme conocer su corazón, se que dentro de esa persona que oculta tantos secretos y sentimientos, hay una persona amante de lo sincero.

Pasamos horas repasando algunos temas que veía cuando cursaba mi primer año de la preparatoria.

Y al retomarlo, creo que me ayuda a estudiar y tratar de entender temas de los cuales no tenía tiempo de estudiar.

Pero la hora de irse estaba por llegar, y esa espina de la curiosidad me volvió a picar.

Quería saber más de el, y de el pasado que ocultaba entre sus cicatrices así que decidí actuar rápidamente antes de que el tiempo se fuera entre mis dedos.

- ¿Puedo preguntarte algo?... Claro si quieres. - Solté una sonrisa tonta.

- Jim: Claro, mientras no sea de esto. - Señaló el libro que estaba en la mesa.

- ¿Podría saber más de ti...? Y no de el presente sino... - Aclare la garganta. - Un poco de tu pasado, ¿Porque estuviste en Corea?.

Abrió los ojos temblorosos de mi pregunta, creí que habia tocado hilos delicados, pero su mano paso por su cara y después de un suspiro, comenzó a relatar.

- Jim: Cuando yo tenia 14, mi bisabuelo me inscribió al Ejército de Corea, era una locura total ya que debía tener mínimo 17 años, pero a ellos no les importaba eso.

Yo no pude negarme, así que me gradué de la secundaria y dos semanas después volé hacia ese país.
Como el era un oficial ya retirado que ayudó a la Costa Noroeste de aquel país, fue fácil mi entrada.

Pensé por un momento que se detendría, pero creo que esta platica me interesaba de alguna manera.

- Jim: Fue duro para mi, ya que no tenía a nadie de mi familia, mis papás murieron cuando tenía 11, nunca supe que les ocurrió, sólo que ya estaban muy viejos y nunca vi sus cuerpos hasta su entierro, mi bisabuelo que tenia 88 años en ese tiempo, se hizo cargo de mi.

Un dia, me dijeron que cayo en coma tres años después de que entrara a ese lugar, dos meses más tarde: El murió.

Me quedé sólo, completamente sólo, y cuando cumplí 18 años, queria pedir mi retirada del cuartel, pero el general y la direcion me la denegaron, ya que en Corea mínimo debía pasar diez años en el Ejército para poder salir.

De los cuales sólo llevaba cuatro.

Así que me escapé y tome un vuelo volviendo a California con un dinero que tenía ganado en la escuela.

Fueron los peores años, estresantes y duros de mi vida, pero lo que me hubiera gustado aunque sea, era despedirme de mi bisabuelo, o al menos verlo una última vez, pero ya era tarde.

Pero, el hubiera no existe.

- Jamas pensé que eso fuera tan posible de hacer. - Me tape la boca despues de verlo derramar una lágrima. - Siento mucho si te forze a que me contarás eso. -

- Jim: Oh no, (Snif) No te preocupes por eso. - Limpio sus lágrimas caídas con el puño de su suéter. -

- Jim: Son cosas que guardaba dentro de mi, pero creo que...

Mire su cara llena de lágrimas, pero su gran sonrisa la opacaba al mismo tiempo.

- Jim: ¿Sabes?... Eres la primera persona que me ha visto llorar desde que tengo memoria, jamás pensé que en algún momento me dejaría llevar asi por mis recuerdos del pasado.

- Bueno, es... sólo es cosa de dejarlo ir para poder disfrutar de tu presente, ¿no?. - Trate de que fuera lo más sincero posible.

Mire el reloj sorprendido y me levanté rápidamente de la mesa.

- Bueno, creo que es hora de que me vaya. - Me coloque la mochila de un brazo, mientras limpiaba las cosas que había dejado.

- Gracias por dejarme venir, espero no te haya molestado. - Dije para verme amable y que presentará una actitud especial.

Me fuí hacia la puerta mientras crei que el tipo se quedaria aqui.

- Jim: ¡Espera!... - Me tomó firmemente de mi brazo. - Tu... tu puedes volver cuando quieras, sólo... - Trago saliva. - Avisame, ¿De acuerdo?... - Me quitó su mano de la mia.

Sólo asenti amablemente por la cortes invitación, y me dirigi hacia el elevador en el cual había entrado.

- Bueno, nos vemos luego. - Mientras me despedía de la mano cerré la puerta y camine hacia el elevador.

Note una persona que miraba detrás de una columna, dirigiendo sus ojos hacia mi, el elevador estaba a su lado, así que decidí averiguar que tanto le interesaba.

- Hola... ¿Pasa algo?. - Me coloque a su lado, un chico más alto que yo me miraba raro.

- ¿Eres familiar de Jim?... - Señaló la puerta asombrado.

- Ehhh, no, no lo soy, ¿Porque?. - Ambos entramos al elevador hasta el primer piso.

- Sólo que, nunca hay nadie en ese departamento, rara vez ese tipo trae a alguien a pesar de su mal carácter, Nadie parece querer hablarle.

- Pues Jim es una buena persona, pero no tiene mal caracter que yo sepa.

El elevador abrió sus puertas y ambos salimos al pequeño pasillo.

- Bueno, sólo te diré algo, ese tipo tiene un problema mental, no es grave, pero acuérdate de mi cuando llegue el momento. - ¿De acuerdo?. - Me tocó el hombro. - Por cierto, soy Yuri, mucho gusto chico.

- Ah, mucho gusto yo soy Adrian... y..

Yuri se dirigió hacia una salida diferente hacia la mía, por lo que ya no pude presentarme correctamente con el, por otro lado su advertencia parecía ser importante.
Me quede pensando en porque todos lo tratan así, al conocer a una persona es mucho diferente del como tratan a distancia.

Mi camión hacia mi casa pasa enfrente de los departamentos de Jim, así que no será difícil venir aquí de vez en cuando.