|Mi sexy abusador| [Yaoi/Chico x Chico]

Capítulo 28:

POV ALEJANDRO:

De sólo pensar en el jodido problema en el que me acabo de meter, sólo queria regresar el tiempo para evitar una catástrofe de esta magnitud.
Jim me tomó de la cintura y bajamos las escaleras rápidamente mientras me cargaba en sus hombros, la manera en que bajo las escaleras me asustó demasiado ya que el color de sus ojos cambio radicalmente de un segundo a otro.

Me colocó en su motocicleta poniéndome un casco mientras giraba la llave suavemente avanzando en la calle retirandonos de su casa al instante.

- Jim: No preguntes nada en el camino, se donde podrían estar, pero pase lo que pase, estaremos juntos ¿De acuerdo?. -

Yo asenti mientras el bajaba su cabeza y el viento frío empapaba mi cabello, con el cielo nublado, junto con mi desesperación por delante, estaba equivocado de la manera que tenía de pensar hace unos momentos.

Giramos en una avenida en forma de C a más de setenta kilómetros por hora, lo cual llamó la atención de varias personas que estaban caminando por las banquetas.

- Jim: ¡¡Allí están!!. - Señaló a dos tipos de diferentes alturas tomados de las manos.

Aceleró su motocicleta y en un segundo tenía rodeados enfrente a ese par de tipos.

- Kiim: ¿¿Qué diablos estás haciendo aquí??. -

- Escucha imbécil, Adrián no es un juguete que puedes ir y traer, así que déjalo en paz. - Le dije mientras caminaban lentamente hacia atrás. -

- Adrian: Vámonos Kiim, no los escuches. -

- Jim: Tu vienes conmigo cachorrito. - Lo tomó del brazo fuertemente. -

- Kiim: Creo que no será así. - Lo tomó de la misma manera pero de su otro brazo. -

Ambos tiraron de sus brazos cómo si de un juguete de peluche fuera el regalo de Navidad para dos niños pequeños.

- Adrian: ¡¡Ya detenganse!!, ¡Me lastiman!.

Al escuchar esas palabras de su boca... tanto Jim como Kiim, hicieron lo que había dicho.

- Adrian: Yo... ya tome mi decision, y en verdad lo siento mucho, pero es a Kiim a quien elijo a partir de ahora... y espero puedas entender eso, ¿De acuerdo?. -

- Jim: ¡¡Pero cachorrito!!. - Dijo desesperado. - Yo... -

- Kiim: Ya escuchaste enfermito mental, el tomó su decisión, tiene casi veinte años ya puede saber lo que en verdad quiere para el, y eso soy yo. - Tomo de las manos a Adrian y le dio un beso en la boca enfrente de nosotros. -

- Jim: ¡¡ALEJA TUS ASQUEROSAS MANOS DE EL MALDIIITOO!!. - Dio dos pasos rápidos furiosamente hacia él. -

- Kiim: Más te vale. - Sacó su teléfono. - que no hagas nada tanto a el como a mi, yo conozco tu historia imbécil, creeme, una llamada a la policía y te pudriras en la carcel para siempre. -

- ¡¡Cobarde!!. - Le grite. - ¡¡Lo haces porque no puedes defenderte!!. -

- Kiim: Vámonos amor, tenemos que recuperar el tiempo perdido, y tú. - Miró a Jim seriamente. - No vuelvas a molestarnos o intentaré hacer tu vida más miserable de lo que ya es. -

- Jim: Es todo. - Se sentó en el suelo rendido. - Se acabo, lo perdí Ale, perdí a mi cachorrito. -

- No claro que no. - Me hinque abrazando su espalda tratando de consolarlo. - esto no se quedará así, pero... te prometo que haremos un milagro para que recapacite, te lo juro. -

Jim me abrazó francamente mientras derramaba lágrimas de dolor y de impotencia al no poder hacer algo al respecto por quien considera a la persona que movió su mundo en un giro de ciento ochenta grados... única.

Después de unos segundos estando consolando a Jim, decidimos tomar un café para que acepte lo que había pasado con Adrian, tal vez no solucione sus problemas de un segundo a otro, pero al menos aliviara por un momento sus penas.

- Jim: ¿Crees que Kiim pueda convencerlo de que ya no este a mi lado?. -

- Puede que si le diga. - Tome mi taza a la altura de mi cuello. - pero Adrian llegará al punto donde vea que estaba equivocado, sólo es cuestión de tiempo. -

- Jim: Me permites un momento. - Me preguntó al escuchar su teléfono con la llamada entrante al otro lado.

Se levantó de su silla mientras le decía que se tomará su tiempo, miro hacia la ventana caminando un par de pasos rapidos contestando a la persona que parecía ser importante para el.
Sinceramente pienso que... esta es otra de esas pruebas que pone Dios a tus pies, es decisión de Jim poder ponerle punto final a este tema sacando de la vida de Adrián a esa estúpida persona que sólo le hacía la vida miserable y menospreciandolo de maneras que todavía no entiendo como soporto.

Por la cara que esta poniendo Jim en este momento, siento que hay mucha ansiedad dentro de el, pase lo que pase, apoyare a estos dos para que acepten sus sentimientos y que finalmente Adrian despierte de una vez por todas.

- Jim: Crees que... ¿Puedas venir conmigo al Distrito de Grandmort?. -

Ansioso por mi respuesta se bebió su café de un trago colocándose su chamarra rápidamente.

- Vamos... pero ¿Qué te dijeron?. -

- Jim: Todavía no lo sé, me quieren ver en diez minutos pero... Adrián esta con Kiim y lo necesito demasiado.

- Yo haré que me obedezca para lo que necesites. - Le toque el hombro. - pero, mientras estaremos sólo nosotros dos, ¿De acuerdo?. -

Jim asintió sonriendo y rápidamente se colocó su casco mientras el sonido de su motor ambiento el escenario. A más de noventa kilómetros por hora estábamos, mi cabello se iba para atrás, pero mis ojos no podían ver nada debido al aire tan fuerte que pegaba en mi cara.

- Jim: ¡¡Llegaremos en unos instantes!!, ¡¡Sujetate bien!!!. - Gritó desesperado mirándome seriamente. -

Al mometo de llegar a la famosísima Grandmort Street, note que estaba empezando a temblar, no de miedo, ni de nada, solo... su cuerpo empezó a temblar de manera inexplicable al llegar a la que Adrián me contó que era el Distrito de Grandmort.

Apagando su motocicleta, comenzó a caminar, mientra se hacía señas de que lo siguiera. -

- Jim: Juez Falcón. - Le dijo a un señor de canas blancas al entrar a la puerta del gran edificio. -

- Juez: Justamente al hombre que quería ver. -

- Jim: ¿Con todo respeto porque la urgencia de verme ahora Juez?. -

- Juez: Te llame porque me acaban de avisar que me van a transferir al Juzgado de Trabkerlin, en un estado de Canadá en una semana.

- Jim: ¡Eso es imposible!, ¡¡Que hay de mi juicio y que pasará conmigo entonces si usted se va!!. -

- Juez: Tengo todo arreglado, pero necesito de toda su ayuda posible. -

- Y... ¿Qué es lo que pasara con el si usted ya tiene planeado irse a Canadá?. -

- Juez: Decidí que... dado a las circunstancias que han estado ocurriendo, haremos que las cosas sean mas rapidas lo más pronto posible...

- Jim: ¿Más pronto posible como?. - Preguntó confundido. -

- Juez: Escucha, no puedo quedarme mucho tiempo aquí, y para que yo regrese de Tranbkelin City serían cerca de tres o cuatro años, así que haremos tu juicio mañana por la mañana, seguirás tu camino sólo Jimmy, así que los espero a las 08;30 am aquí para comenzar esto de una vez por todas.

- El comienzo del fin, estaba a punto de iniciar. - Pensé. -