El Contrato

6. Me lo adverti. ( Marie & Valentín)

Marie 

Extraño,  era un tipo realmente extraño, no entendía como podia dejar que una mujer se exhibiera así frente a él, pero eso no es lo malo sino más bien que mis libros de poesía quedaran con un olor tan nauseabundo y desagradable, que esa mujer los tirara al suelo sin tener por qué.

Arregle el cuarto de Valentín era un chiquero, él duerme tan profundo que me dio tiempo hasta de pasar la aspiradora en ambas habitaciones rápidamente. Me dormí a eso de las cuatro de la mañana no podia hacerlo me sentía intranquila, mis libros, eso era lo que me molestaba, esos libros los compre de a poco con mi primer salario fueron mis primeros quince libros que compre.

Luego de irme de la casa al trabajo mi jefe me esperaba con un muchacho estatura media, delgado sus ojos eran azules y su cabello de color rubio, sus ojos me miraron atentamente.

-Marie – dijo mi jefe – el es un nuevo compañero de trabajo

-Un gusto – dije saludándolo

Él se ruborizo un poco y sonrió.

-El gusto es completamente mío – dijo mirándome

-Por favor enséñale el trabajo – dijo sonriendo mi jefe

-Claro – dije mirándolo

El era un muchacho con mucha energía su nombre era Alexander, pero me dijo que le digiera Al o Alex, no me parecía algo conveniente pero era muy bueno aprendiendo. Me quería acompañar hasta mi casa pero me negué quería pasar a la librería a comprar un libro de psicología. El me acompaño.

-Sabes yo… ya la había visto – dijo sonriendo

-¿De verdad? – dije mirándolo

-Si – dijo el sonriendo aun mas – comprando un libro de poesía era el tomo número trece si bien lo recuerdo

-Ya veo… -

-¿Te gusta la poesía? –

-Bastante –

-¿Tienes toda la colección? –

-La tenia… - dije suspirando

-¿Qué le paso? – dije mirándome

- Hubo un pequeño incidente y los perdí todos – dije bajando la cabeza

En ese momento paro la conversación compre el libro que necesitaba y el me acompaño en silencio hasta el departamento.

-Marie – dijo el mirándome

-¿Qué pasa? –

-Te ves más linda cuando sonríes – dijo besando mi mejilla – hasta mañana

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Valentín

¿Qué clase de trabajo tenia? Dije mientras hacía rechinar mis dientes ¿Por qué me molestaba?, más aun cuando debía comenzar a trabajar por vivir con ella. Cuando ella abrió la puerta traía un libro entre sus brazos.

-¿Quién era? – dije molesto

-¿Quién? –

-El chico –

-Es… - dijo ella y luego – no te interesa… menos si aún no has arreglado lo de mis libros

-Pero la casa – dije sonriendo

No diría que había contratado a alguien.

-Dile a la persona que limpio que muchas gracias y deja de desperdiciar el dinero – dijo mirándome