El Contrato

13. sorpresa.

Marie

Pasamos una bella luna de miel, dormíamos abrazados durante la noche, besaba mis hombros y mi cuello antes de dormir, salimos muy poco del hotel, pero estaba bien, vimos películas y comimos bastante bien. Solo fuimos a la playa un par de horas y el fue extremadamente feliz al ponerme bloqueador solar. Nos miraban atentamente las muchachas ya que la lucia siempre muy bien.

Cuando volvimos al departamento nos dimos cuenta que había otro regalo… teníamos solo una cama de dos plazas en uno de los cuartos que era el mio, el otro quedo solo con la ropa y cosas de Valentin.

-¿Qué te parece eso? – dijo sonriendo

-Está bien –

-¿Aun estarás tan tímida? – dijo riendo

-¿A qué te refieres? –

-No me dejas ver tu cuerpo –

-Ya lo viste –

-Si… pero por lo general me mantienes mirando tu rostro y apagas la luz –

-No tiene nada de malo –

-Disfruto al ver tu cuerpo –

-Dormirás en el sillón – dije sonriendo

-Me callo – dijo besando mi frente.

Comenzamos a ordenar el cuarto a nuestro antojo, cambiar algunos muebles y arreglar para que fuera más cómodo para ambos.

En ese momento sonó el timbre.

-Debe ser tu papa – dijo Valentín

-O el tuyo –

Abrí la puerta y vi a mis padres y a los de Valentín. Entraron sonriendo y muy felices, venían a algo que realmente ya no nos interesaba “la herencia” nos dejaron todos los papeles y el traspaso del dinero no así de las propiedades, yo solo las recibiré si padre fallece.

Valentín me miraba con atención, atendimos a nuestra familia y luego de un par de horas se marcharon muy contentos de saber que estaríamos bien juntos.

-Marie – dijo besándome

-¿Qué pasa? –

-No puedo dejar de amarte, no importa si rompemos el contrato –

-A mí no me parece – dije mirándolo

En ese momento su rostro cambio de blanco a pálido.

-Es broma – dije sonriendo

El abrió sus ojos y comenzó a hacerme cosquillas.

-¡Basta!... – dije riendo

-No me vuelvas a hacer algo así – dijo tomando mi rostro

-¿Por qué? –

-Porque te amo – dijo besándome

Me tomo entre sus brazos y me llevo hasta el cuarto.

-¿Qué piensas? – dije mirándolo mientras él me soltaba en la cama

-Quiero hacerte mía una noche más –

Lo mire atentamente y sonreí.

-Solo si es con amor – dije mirándolo

-Solo tengo amor por ti – dijo besando mis labios con pasión.

Desde aquel día ha pasado un mes, nos llevábamos bastante bien pero yo realmente no me he sentido muy bien estos últimos dos días. Pero ha sido muy lindo poder conocerlo mejor nos reímos mucho y me va a buscar cada tarde al trabajo.