Capítulo X.

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Transcurrieron un par horas después cuando comience hasta poder recobrar la conciencia tras el golpe.

-Dios como duele. -Miro con borrosidad el suelo mientras realizo un leve gesto de dolor. - ¿Dónde estoy? -Me cuestiono a mí misma, mientras tanto, intento observar detenidamente mi alrededor.

Cierro fuertemente mis ojos, por unos instantes. Entre tanto, sacudo fuertemente la cabeza para que toda la borrosidad de mis ojos y aquel mareo se me fuera esporádicamente.

Miro, de nuevo, mi alrededor y me doy cuenta de que estoy atada en una silla, y que, estaba encerrada en una habitación junto a una carga explosiva que no podía distinguir con exactitud por la poca visibilidad que podía notar en el ambiente.

-Pero ahora... ¿Dónde mierdas estoy? Si se puede saber. – Intento preguntarme de nuevo mientras intento moverme con la silla.

En ese momento, empiezo a rastrear por toda la habitación, persuasivamente, en busca de un objeto punzante o afilado por todo mi entorno mientras me voy moviendo con cuidado.

-Mierda. -Con tono de cabreo.

De repente, mi cabeza comenzó a notar que algo faltaba en mi alrededor, así que, de sopetón me deje caer las patas de la silla sobre el suelo.

-Em... Me da a mí que me falta algo...-Intento pensar mientras miro un punto fijo de la habitación. - ¡Mierda!¡Arthur! -Grito. -Joder, joder... Debería de haberlo dicho susurrando. -Susurro mientras me percato del ruido que he hecho. - Bueno, da igual, tengo que actuar rápido y buscar a Arthur cuanto antes para escapar de esta panda de gilipollas antes de que nos hagan picadillo o algo similar...-Pienso mientras busco una solución ante la situación.

Vuelvo a observar muy detenidamente mi alrededor, hasta que, mi mirada se clavó, directamente, en un punto fijo del pilar de madera que se situaba justamente en el centro.

- ¡Bingo! -Grito en mi cabeza. -Creo que este cristal cortado me podría ser de ayudar. -Susurro.

Con cautela y precaución me pongo de pie como podría, mientras elevaba un poco la silla para evitar hacer el mayor ruido posible y acercarme hacia aquel objeto punzante.

- ¡Qué asco! ¿Enserio me tengo que cortar las malditas cuerdas de mierda con esta porquería de cristal, y encima todo, arriesgándome de que me pueda cortar y que me dé algo con la sangre seca que impregna el objeto? -Percatándome que en dicho cristal hay restos de mugre y sangre.

Con un gesto de asco, me resistí a cortar las cuerdas, cuando en ese preciso momento, en el cual, comienzo a cortar dichas cuerdas, escucho a lo lejos mascullar a varias personas, en concreto a dos varones.

-Joder, joder, joder...-Intentado cortar las cuerdas más rápidamente mientras vigilo, algo nerviosa, hacia la dirección de aquellas voces.

Tras unos minutos intensos cortando la cuerda, intenté correr como pude hacia una de los armarios vacíos que oscilaba en las esquinas de la habitación.

-Soy buena encima todo...-Lamentándome en voz baja mientras me dirijo a mi escondite. -Es más, creo que, si me pillan, en partes me lo merezco por lo gilipollas que soy...- Susurro mientras me asomo por las rejillas del armario.

En ese momento, los líderes de la banda que nos había raptado a Arthur y a mí, misma habitación donde me ubicaba mientras sujetaba cada uno un machete en la mano.

-Mierda...-Pienso estoy acojonada del susto por aquellos hombres.

-Otro percebe que se nos ha escapado John...-Mientras musitaba alguna que otra maldición entre regañadientes.

-De verdad, Georgie... De verdad... - Con una actitud algo seria. - Si encima todo, Georgie... Nosotros somos los que tenemos la mala suerte.

-Parece que la niñita tonta esta tomando las mismas costumbres que su estúpido marido.

- ¡Ja! Marido dice...-Pienso mientras sonrió levemente ante las tonterías que decían aquellos capullos de mierda. -Más quisiera ese llegar, por lo menos, a ser mi novio... -Con aires de irónica y sarcástica.

-Bueno John.... A este paso, si queremos recuperar a los dos para sacarle todo lo que nosotros queremos sacarles, tendremos que buscar a los demás del grupo para facilitar su paradero, ¿no crees? -Pausa mientras se dirige su mirada hacia una pequeña ventanilla. - Aunque, a mí me da en la nariz, que, la puta niñita de mierda se ha escapado por esa ventana de allí.

Señala Georgie con su machete hacia la dirección de la ventana.

-Si es que he sido encima todo gilipollas...-Retiro un poco la cara de las rejillas mientras muestro un gesto arrugado mientras maldigo todo lo que pueda maldecir. - De todas las soluciones posibles que se me ha ocurrido en la cabeza y que son tan absurdas... Y se me ha pasado la más obvia y la más fácil...

-Cierto. - Se da la vuelta con aires de soberbia. - Asi que... Salgamos a por los demás.

Ambos líderes salieron del cuartillo donde me situaba en dirección hacia el exterior para rastrear nuestro paso.

-Menos mal que se han ido los anormales estos... Señor mío de mi alma...-Salgo del armario con un gran suspiro de mi pecho.

Dicho esto, intento levantar y me dispongo a plantear un plan en silencio.

-Vamos a ver...-Analizando todo lo que ha pasado hasta el momento. -Segúnha dicho estos capullos.... Arthur debería de.... O bien.... Haberse ido sin mí, que serálo más probable que ya haya pasado, aunque tampoco me preocupo por él, ya que, eneste caso, me vendría de perlas de perlas, puesto que, si sale bien mi primerplanteamiento, suponiendo esto claro está... Me podría ir a tomar por culo,directamente, tanto de, por parte, estos sin cerebro, como de la maldita bandadel otro capullo. Por lo tanto, -pauso mientras medito más opciones- me vendríabien, porque así, me saldría todo redondo el plan redondo. Pero luego, por otraparte, si el gilipollas este aun esta por toda la casa, por decir algo,buscándome como un loco, y por lo que sea, me ve que huyo de este lugar sin él,puede pasar dos cosas...-Pauso mientras me toco la barbilla meditando mis dos hipótesis.- 

O bien, puede crear ruido o algo similar, que provoque que los demás anormales me sigan, y de ahí, que tengamos que salir cagando hostias del lugar, y por ende, no poder volver con mi gente por culpa de la presión del gilipollas de Arthur.... O bien, que me vaya sin él y que la panda de anormales de sus amigos me sigan el rastro como una loca, y que, gracias a ellos, provoquen entre mi banda y la suya una guerra, bla, bla...-Teniendo una mirada sarcástica.-Entonces, en conclusión, estaría igualmente en un gran aprieto si lo pienso, ya que, en un caso de que este gilipollas no esté en esta casa y tenga que buscarlo me podría salir o bien el primer plan o mal también...Así que, igualmente si lo pienso, estaría en un gran problema por esto, ¿no?-Meditando.- Me cago en la puta, con la gran inteligencia y picardía que suelo tener suelo tener en esta situaciones, y ahora mira, por un gilipollas de mierda, que lo más seguro es que me haya dejado a solas, mira lo que monto.-Cabreada mientras paseo por toda la habitación como una loca buscando una solución.-Bueno, a tomar por culo todo. Lo mejor será que me guie por mi instinto y listo, porque si no, peor lo voy a hacer. -Mientras salgo.

Mr. Morgan.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora