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Narra Jade

Después de muchas horas de vuelo por fin aterrizamos en Dubai, nos montamos a las camionetas para ir al hotel.

Llegamos a uno de los muchos hoteles de mis suegros, nos asignaron nuestras habitaciones en el mismo piso para no estar muy distanciados.

Raymond: ¿Estás cansada?
Jade: mucho (lo miro)
Raymond: que te parece si subimos nos damos una ducha y nos recostamos.
Jade: muy bien.
Raymond: vamos (me toma de la cintura)
Jade: falta poco para la boda.
Raymond: muy poquito.

Subimos al ascensor presionando el botón de nuestro piso esperando a que el ascensor se comience a mover. Llegamos a nuestra habitación, caminamos por toda la suite encontrando una preciosa habitación (imagen en galería) la preciosa vista que tiene es hermosa.

Raymond: ¿Te gusta?
Jade: es hermosa.
Raymond: esta es mi habitación de siempre.
Jade: o sea, ¿Otras putas ya se han registrado en esa cama? (Gruño molesta)
Raymond: bueno...yo.
Jade: imbécil (lo miro) me iré a dormir en otra habitación.
(Salgo de ahí)
Raymond: Jade, ven acá.
Jade: no pienso hacerlo Ayala.
Raymond: tenemos un trato.
Jade: ya lo sé, no quiero dormir en esa cama.

Lo miro sonreír descaradamente acercándose a mí, me toma de la cintura acariciando mi mejilla con su mano.

Raymond: no quieres que nadie se entere del trato, será muy interesante que pidas un cambio de habitación.
Jade: tus padres no saben que su hotel lo han usado como prostíbulo (le sonrió), estamos a mano cariño.
Raymond: eres el diablo.
Jade: lo sé (me suelto) será mejor que avises a tus putas árabes que estás próximo a casarte, no quiero estar regresando "servicios especiales del hotel".
Raymond: de eso yo me ocupo.
Jade: dijiste que ya no habrán más mujeres (lo miro)
Raymond: aventuras que nunca sabrás (me sonríe) debo irme.
Jade: ven acá Ayala.
Raymond: chao, me esperan en una junta.
Jade: maldito.

Lo veo irse de la habitación sonriendo como un jodido mujeriego a punto de tener una orgía. Mis lágrimas se quieren apoderar de mí pero es interrumpida por el sonido de mi celular inmediatamente respondo al ver el nombre de mi abogado.

En la llamada

Lauro: buen día señorita.
Jade: hola Lauro.
Lauro: perdón por molestar, hemos recibido otra demanda.
Jade: solo faltan tres días para la boda.
Lauro: lo sé jade, tenemos un gran beneficio el juez que llevará su caso es un viejo amigo de tu padre.
Jade: ¿Esta enterado?
Lauro: por supuesto señorita, solo hay un problema.
Jade: te escucho.
Lauro: nuestro viejo colega el abogado Luis Morales nos ha traicionado y está apoyando a esa gente.
Jade: ¿Qué tanto conocimiento tiene de la empresa?
Lauro: es muy poco.
Jade: quiero que lo antes posible vayas con las chicas y modifiquen en absoluto todo lo que él conozca.
Lauro: así será señorita.
Jade: ¿Eso es todo?
Lauro: si señorita, nos vemos pronto en la boda.
Jade: estaré feliz de recibirlo.

Fin de la llamada

Me siento en el borde de la cama jugando con el celular entre mis manos, sin evitar dejo escapar esas lagrimas que he guardado por tanto tiempo.

Ha pasado mucho tiempo desde que mi padre falleció, sin embargo el dolor permanece intacto luego volver a revivir todo esto es aún más doloroso, escucho un celular sonar miro el mío y no es, busco por la habitación hasta encontrar el celular de Raymond.

Jade: dulce venganza mi amor. (Sonrió con malicia)

Respondo la llamada de una tal "Deysi", inmediatamente escucho una voz chillona.

En la llamada

Deysi: hola Ray, llamaba para decirte que te necesito.
Jade: ¿Hola?
Deysi: ¿Quién eres tú? ¿Qué haces con el celular de mi Raymond?
Jade: ¿Tú Raymond?, Perdón querida hablas al celular de mi esposo (muerdo mi labio para no reír)
Deysi: ¿Esposo?
Jade: cómo lo escuchas querida, estamos en Dubai de luna de miel.
Deysi: no puede ser cierto, el no me dijo nada.
Jade: ahora ya lo sabemos, chao perra.

Fin de la llamada

Comienzo a reír por la llamada, desbloqueo el celular revisando todo.

Jade: que asco (miro las fotos) eres un idiota Ayala.

Comienzo a borrar todas esas fotos de sus zorras en lencería, dejo un momento el celular en su lugar como si no hubiese pasado nada y me doy una ducha corta, busco entre mis cosas una pijama cómoda sin encontrar nada tomo una polera de Ray y me arreglo, cepillo mi cabello me recuesto en la cama siguiendo con mi labor.

Cuando el celular está completamente sano tomo mi celular pasando muchas fotos mías las cuales son muy lindas y para nada pornograficas agendo números míos incluso le hice el favor de poner el número de mi psicologo.

Dejo todo en su lugar cuando un bostezo me hace tomar en cuenta que es muy tarde y el viaje me tiene agotada, pongo a cargar ambos celulares dejando el de Ray en su mesita de noche. Apagó las luces y me recuesto a dormir.

Maldito Magnate ||Borrador||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora