Maldito Magnate ||Borrador||

21

Narra Raymond

Llegó a la habitación después de estar un rato en el bar del hotel, las luces estan completamente apagadas las enciendo para ir a la cocina y beber un poco de agua.

Sirvo el vaso de agua bebiendo todo, dejo el vaso en el lavaplatos apagando las luces de la cocina camino a la habitación esperando un reclamo por parte de la rubia me preparo mentalmente buscando argumentos en mi defensa, todo eso se esfuma cuando la veo dormida con un pañuelo a su lado enciendo la lámpara para no despertarla y su nariz está roja.

Ella estuvo llorando

Eres un hijo de perra.

A Martin no le gustaría ver a su pequeña así.

Cuando dejo mi reloj en la mesita de noche me percato que allí está mi celular conectado al cargador.

Raymond: ¿Qué has hecho pequeña rubia? (Susurro bajo)

Enciendo el celular y me percato que hay una foto de ella en el fondo de desbloqueo sin pensarlo una sonrisa tonta se dibuja en mi rostro, al desbloquear en el fondo hay otra foto de ella, reviso los números telefónicos y ya no están el de las chicas con quiénes me he acostado solamente están nuestros contactos en común incluyendo el de un psicólogo, mi galería está llena solamente de fotos de ella y nuestras, el celular ha sido modificado desde lo más profundo.

Una pequeña risa se escapa de mis labios al ver como ella se agendó, desconecto el celular y lo dejo en el lugar donde lo encontré camino al baño para darme una ducha y dormir. Cuando estoy duchado y vestido me recuesto a dormir apagando la lámpara al momento de acercarme a ella involuntariamente se recuesta en mi pecho dejando que pueda dormir sintiendo la suavidad de su piel.

Al día siguiente

Narra Jade

Despierto al sentir una mirada quemarme, cuando mis ojos conectan con la mirada de Ray viéndome como un trozo de carne fresca lo ignoro levantandome no sin antes aventar mi cabello en su cara caminando al baño para ducharme.

Raymond: ¡Buen día amorcito! (Grita desde la cama)
Jade: come mierda huele bicho (grito desde el baño)

Salgo del baño fresca después de una ducha larga, salgo con una toalla alrededor de mi cuerpo caminando al clóset donde están mis maletas, busco ropa cómoda por qué hoy saldremos a un paseo con la familia.

Termino de vestirme (imágen en galería) busco la maleta con maquillaje para terminar de arreglar. Tomo mis cosas para irme, paso a lado de Ray ignorando su presencia.

Raymond: ¿Estarás así todo el día? (Suspira)
Jade: ¿Me veré bien? (Me miró al espejo)
Raymond: te vez hermosa.
Jade: se lo preguntaré a Pina (ignoro su comentario) mi jirafa bebé siempre me dice la verdad. (Tomo mi bolso)
Raymond: ¿Jirafa bebé?
Jade: mi bebé precioso (miro el celular)

Cuando estoy por salir de la habitación Ray me toma de la cintura haciendo que quede atrapada.

Jade: sueltame idiota (habló molesta)
Raymond: ¿Ahora me hablas?
Jade: no quiero hablarte.
Raymond: estás hablando conmigo.
Jade: por qué me tienes atrapada.
Raymond: ya me di cuenta lo que hiciste en mi celular.
Jade: solamente hice pequeños cambios.
Raymond: en realidad borraste lo mejor.
Jade: imbécil (lo miro)
Raymond: ¿Por qué estás molesta?
Jade: ¿Por qué decirte la verdad si al final te viene valiendo madres?
Raymond: me importas.
Jade: te importo tanto que te largas te anoche por unas putas.
Raymond: no estuve con putas, estuve bebiendo con los chicos.
Jade: no soy nada de ti para que me des explicaciones.
Raymond: eres mi novia y en unas cuantas horas mi esposa, eres todo en mi vida.
Jade: solamente soy una socia con la que firmaste un contrato (bajo la mirada)
Raymond: hace mucho que esto paso de ser un simple negocio a ser algo más real.
Jade: ¿Y por ello seguirás siendo el puto mujeriego de siempre?
Raymond: no he estado con otra mujer desde que inició esto.
Jade: a veces es difícil creerte (suspiro bajo)
Raymond: debes hacerlo, es la verdad.
Jade: a veces la verdad es solamente una mentira más.
Raymond: te lo dejaré en claro, por qué eres mi niña.
Jade: tus niñas son tus putas, y quieres que yo sea una más de la lista al traerme en esta habitación para dormir en la misma cama donde has compartido fluidos.
Raymond: eres la primera chica que viene aquí (acaricia mi cara) las habitaciones donde siempre me acostaba con esas mujeres era en otra, está habitación fue especialmente reservada para nosotros.
Jade: debemos irnos.
Raymond: no iremos a ninguna parte hasta que te vea feliz.
Jade: nos esperan.
Raymond: pueden seguir esperando.
Jade: Ray, por favor.
Raymond: no me diste mi beso de buenos días.
Jade: no te lo mereces.
Raymond: ¿Segura? (Enmarca una ceja)
Jade: muy segura (sonrió)
Raymond: entonces yo lo buscaré.

Sin esperar estampa sus labios en los míos involuntariamente mi cuerpo responde al beso sus manos bajan a mi trasero apretando mis nalgas dejando que un gemido se escape de mis labios.

Sé fuerte, se fuerte Diamonds.

Nos separamos por falta de aire, Ray muerde fuerte mi labio haciendo que me queje de dolor, siento el sonrojo en mis mejillas y eso me lo confirma cuando una sonrisa burlona se forma en los labios de Ray, me volteo para salir de la habitación y antes de salir siento un azote fuerte en mi trasero.

Raymond: me encantas (camina detrás de mí)
Jade: deja de azotar mi trasero.
Raymond: es imposible mamita, estás hermosa.
Jade: eso lo sé.