07. Problema de tres.

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Quizás Wooseok no sea consciente de cuánto le gusta Seungyoun, pero es bastante obvio.

Cualquier persona podría decirlo por la manera en que no deja de sonreír con esa sonrisa tonta cuando hablan animadamente durante el almuerzo. Kim Yohan casi siente lástima, y definitivamente lanza miradas rápidas y piadosas a su otro mejor amigo que está sentado junto a él, comiendo con la mirada baja y con el semblante oscuro y lúgubre.

Una clase de extraña tensión se extiende por el aire, Yohan mastica su sándwich e intercala su mirada entre las dos personas frente a él, su comida dentro del bento de plástico, y el triste Han Seungwoo, quien es demasiado bueno, tranquilo y amable como para soportar eso.

- Hey, hyung, ¿qué dices si vamos a ver como entrena el equipo de fútbol a las gradas? Las porristas están usando por primera vez su nuevo uniforme hoy y dicen que la falda es más corta que la anterior, ¿vamos?

Seungwoo niega como si estuviera en otro planeta, él prefiere quedarse junto a Kim Wooseok aunque esto signifique quemarse el corazón lentamente, y eso impacienta a Yohan al grado de perder el apetito. Si Seungwoo no quiere irse, él lo hará.

Cierra su bento y se levanta con él entre las manos dispuesto a huir de tal situación. Y cuando está por darse la vuelta, un brazo largo y grande cruza sus hombros y lo obliga a sentarse.

- ¡Hey, Kim! ¿Cuánto tiempo? -Hangyul saluda con una sonrisa grande de dientes mientras se acomoda junto a él. Yohan sonríe a gusto y sorprendido, por el rabillo del ojo, observa como Park Jimin, una de las chicas más bonitas del Instituto, se sienta junto a un Wooseok distraído y justo frente a Lee Hangyul.

- ¡Yo, Bro! ¿Cómo has estado? -pregunta y golpea quizás demasiado fuerte el muslo de su amigo-compañero de Taekwondo.

Hangyul alza el pulgar de su mano derecha y asiente efusivamente.

- Diría que mejor que bien, pero, últimamente tengo cierto amigo que me abandona por irse con su conquista. Así que decidimos venir a él e impedir que nos siga dejando de lado, ¿no es así, Jimin?

Ella asiente mientras apuñala su filete de pollo con un tenedor rosa. Yohan está encantado.

- Ese bastardo de allí se ha olvidado de nosotros. -dice Jimin con un tono quizás demasiado rudo.

- Estoy aquí, por si lo ignoras. Puedo escuchar como soy insultado, Jiminnie.

Acusa Seungyoun, de pronto, Kim Yohan tiene su mirada sobre la suya y él le sonríe amistosamente.

No quería decirlo, pero siente como si el tal Cho le desagradara. Y es que hay tantos factores malos en él que Yohan ni siquiera quiere molestarse en numerarlos. Desde los malos rumores que se dicen de él hasta el hecho de que sea el cotilla sinvergüenza que intercede entre el amor de sus dos mejores amigos. Pasando quizás por el hecho de que parece ser más cercano a Seungwoo que él. Puede decirlo y darlo por hecho por cómo ambos son perfectamente capaces de leerse la mente y comprender al otro sin necesidad de decir ni una sola palabra, y eso es un golpe duro a él y a su amistad de más de un año con Seungwoo.
Está enfurecido y no lo soporta, por ello, ni siquiera responde la amable sonrisa que Cho le regala. En su lugar, desvía la mirada hacia Hangyul, quien se entretiene hablando de alguna cosa que Yohan no puede entender.

- ...y es por eso que los ganchillos horizontales no son buenos para la pesca.

- ¿Eh? Ah... ¡ah, sí, ya veo! -ríe nerviosamente mientras Hangyul asiente alegre por tener a alguien que realmente le presta atención. Yohan entonces tiene una idea brillante.

Toma a Hangyul por la muñeca y lo obliga a levantarse de nuevo.

- Ah, ¿porque no vamos a platicar a las gradas, uh? Escuche que las porristas tienen un nuevo uniforme y... Ah, chicos, Hangyul y yo estamos llendo para las gradas, nos vemos luego...

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