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LA ARMADURA CAE

Había una vez en un reino próspero, una doncella, la más hermosa de las doncellas, ella estaba enamorada del apuesto príncipe, él la miraba como una princesa, la trataba como tal, era tan genuinos sus tratos que ella realmente llego a creer eso. Tomo una Corona, se armó de valentía y camino hasta el príncipe con su principal objetivo, demostrar que era digna de portar la Corona y estar junto al príncipe. Al llegar hasta él se encontró con varios caballeros rodeando al príncipe, estos llegaban desde lejos, pero fue uno en particular, aquel caballero que portaba firme su armadura, estaba frente al príncipe, con una sonrisa encantadora, podía ver que el príncipe correspondía a tal gesto, sus ojos brillaban...
Sintió su corazón doler, sus ojos nublarse, ella había estado para el príncipe por mucho tiempo, apoyándolo, trataba de hacerle ver que ella lo amaba pero al parecer él nunca lo notó, se había armado de valentía después de mucho, tan difícil que era declarar un amor, para que ahora, ella mirase a aquel caballero llegar y robar lo que ella había forjado en tanto tiempo. Era injusto. Sentía que debía ser ella quien se quedara con el príncipe, ella era la princesa y ese era un simple caballero ¡No lo permitiría! No le quitaría a su príncipe tan fácil, no sin haber dado batalla antes. Acomodo su Corona y retomo postura, no se iba a permitir llorar, ella era fuerte. Desde ese día se dijo a sí misma, que haría hasta lo imposible por quitar al caballero de su camino, nada importaría, lo único que quería era ver esa armadura caer.

Jisoo sonrió para su misma, el día anterior JinYoung había llamado diciendo que todo había salido perfecto, él iba a buscar a Minhyun, eso no era bueno, le dijo que no lo haga pero conocía al chico, seguro y fue tras él, debía ser rápida, solo esperaba que JinYoung no haya conseguido nada con su príncipe

A lo lejos pudo apreciar a Hwang, sonrió y caminó en subdirección, estaba lista para ser la mejor amiga y demostrar que ella estaría siempre para él. Solo unos metros y...

—Jisoo — la llamaron, ella miró encontrando a la secretaria estudiantil, Jisoo se detuvo a esperar — ¿Te puedo dar un consejo?

Jisoo dudo unos segundos antes de asentir

— Si en realidad lo amaras no harías que sufra

Jisoo frunció el ceño, ¿Que le pasaba a la chica?, rodo los ojos riendo

— ¿Que te da el derecho de meterte?

—Tú me permitiste darte un consejo

—Ahora seré yo quien decida si lo toma

— Tienes razón. Solo toma en cuenta que lo que haces está mal

— ¿Tu vienes a darme clases de moral a mí? Tu quien te acuestas con tu profesor

— ¡No, yo no hago eso! —se quejó, a lo que Jisoo soltó una fuerte risa

—Los vi, podría ir a decirlo en este instante a dirección, por tu imprudencia, tu querido profesor Kim perdería su empleo

Jennie guardó silencio, miraba a Jisoo con el ceño fruncido, se sentía decepcionada

—Sera mejor que dejes de dar consejos

— ¿Qué es lo que pretendes? — Jennie dejó de mirarla, Jisoo era diferente a la chica que aparentaba, era peor de lo que creía —Ya ni siquiera tienes a tu mejor amiga por tu capricho

— A Nayeon la recuperare y sobre lo que pretendo —Pareció pensarlo un poco antes de sonreír — Ya nada, lo he logrado

Afirmo y se marchó en busca de Minhyun. A Jennie le parecía sorprendente la actitud de la chica, pero vio algo de sí misma en ella, ahí supo lo mal que estaba, Jisoo estaba mal



Mi Príncipe Azul [MinRon]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora