capitulo tres: un guardia y un recluso

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Dream a dream, here's a scene
Touch me anywhere 'cause I'm your baby
Grab my waist, don't waste any part
I believe that you see me for who I am
So spill my clothes on the floor of your new car
Is it safe, is it safe to just be who we are?

Efectivamente era su tercera semana aquí. Louis se encontró a él mismo orgulloso por sobrevivir, era, efectivamente un gran logro para el. Al principio pensó que algún omega loco lo asesinaría (casi pasa) o que algún guardia descargara su irá y lo golpeara hasta la muerte, gracias a todo, eso no había pasado, es más, los guardias eran realmente agradables, todos por iguales. De alguna u otra firma le hacia el trabajo difícil. Literalmente.

Suspiro. Caminaba con Alice hacía el patio. Hablaban como normalmente lo hacían. Se voltearon al escuchar el llamado de Zayn.

—¡Tontos!

Zayn y Liam llegaron a su lado. Louis le regalo una sonrisa a los dos.

—Gracias por esperarnos—espetó con sarcasmo—. ¿Dónde están los otros dos?

—Los otros dos tienen nombre—mascullo Alice.

—Cierra la boca, nadie te estaba hablando a ti—escupió Zayn.

—Tu no-

—Bien, bien. Ya estamos. Dejen de pelear, estoy harto.

Todos dirigieron su mirada hacia Liam.

—¿Qué? Es verdad, por el amor a dios.

Caminó lejos de ellos, Zayn lo siguió como perro pidiendo disculpas. Louis sonrió, negando con la cabeza.

—Vamos al patio.

Alice tomó su mano, entrelazando con la de ella, Louis no dijo nada, no quería ser grosero. Ambos caminaron con las manos entrelazadas. Llegaron allí y se sentaron en uno de los bancos. Louis, como hacía siempre, se recostó en el, reposando la cabeza en el regazo de la pelinegra.

No habían dicho nada por un tiempo. Estaban disfrutando del sol, porque había un día verdaderamente bueno. Alice rompió el ambiente extrañamente sereno.

—¿Louis? 

El mencionado abrió un ojo.

—¿Si?

—¿Tu lo sientes?

Louis apretó los labios. No entendió.

—No se a que te refieres—murmuro primero, viendo como cierto rizado ingresaba al patio y clavaba la mirada en él. No pudo seguir hablando.

—Sientes lo mismo que yo... Si te gusto. Si te soy atractiva.

Louis suspiro. Acarició la mejilla de la omega. Era adorable.

—Alice, no puedo negar que eres realmente hermosa—empezó Louis, siendo lo mas cuidadoso que podía—. Pero no eres mi tipo, lo siento.

Ella suspiro, el brillo de sus ojos desapareció y su linda sonrisa también.

—Bien. Siento habértelo preguntado, malinterprete todo.

Louis negó.

—Esta bien. Espero que esto no cambie ni afecte nuestra amistad.

Inevitablemente volvió a mirar a el alfa. Este le seguía mirando, pudo ver que le hizo una seña con la cabeza. Louis frunció el ceño.

—Esta bien, Lou, no lo hará, y gracias por ser sincero.

—Siempre lo seré. Ahora debo irme.

Ella asintió. Louis comenzó a caminar fuera del patio.

Recorrió todo el pasillo, Louis mantenía el ceño fruncido. ¿Había imaginado que lo estaba llamando? No era posible, él estaba seguro.

jail ; omegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora