capitulo nueve: beatriz

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One for the money, two for the show
I never was ready, so I watch you go
Sometimes you just don't know the answer
'Til someone's on their knees and asks you



—Vas a volver—le habló ella—. Debes volver, debes acabar con él. Me importa poco la marca en su cuello, imbécil. ¿Cómo crees que le diré esto a nuestros jefes, eh? No sirves para nada.

—Déjame en paz. Yo quiero a ese omega, lo quise desde que lo vi—gruñó Stevenson—. Pero el hijo de puta de Styles me lo robó, lo sedujo y ahora el pobre omega anda detrás de él.

—¿Y a caso es ese nuestro puto problema?—escupió ella—. Nos has puesto una soga al cuello por tu nula capacidad de pensar. Tendría que matarte, eres un bueno para nada.

—¡Basta!—ordenó el alfa. Su ceño se frunció al sentir el dolor en sus heridas—. Deja de decirme eso, no es lo que una madre debería decirle a su hijo.

—¡Lo diré porque es verdad! No sirves para nada, joder. No puedo creerlo, por un puto omega has puesto todo esto en riesgo. ¡Podrías tener a cualquiera!

—¡Pero lo quiero a él!—gruñó, la mujer frunció el ceño.

—¡No me gruñas, pedazo de mierda!—exclamó—. ¡Te ordeno que vengas mañana por la noche y acabes con ese omega! ¿Me has oído? Yo me encargaré de Styles.

—¡Que te jodan!

La mujer abrió la boca, ofendida.

—¡No vuelvas a repetirlo!

—Que te jodan, Beatriz. Estoy harto de ti.

—Tu te has metido en esto solo y lo arruinaste. Ahora, o lo arreglas o te mato.

Ninguno de los dos se percató de cierto omega que escuchaba todo detrás de la puerta.


Louis tuvo la obligación de quedarse despierto ese día.

Pero eso no era lo que quería hacer, solo quería salir de allí lo antes posible, necesitaba hablar con Jordania y Jonathan. Mierda. Solo quería llorar hasta dormirse y volver a ver a Harry. Su cuerpo se sentía débil, no tenía fuerzas para hacer absolutamente nada.

Tenía miedo, porque podría cruzarse con Stevenson en cualquier momento (aún que en realidad era poco probable) No quería estar solo, pero aún así rechazo la compañía de sus amigos. Así que allí estaba, sentado en su cama de la celda, envuelto en una fresada mirando a la nada, con lágrimas silenciosas cayendo por sus ojos y rascando la marca de su cuello.

Aún no se lo creía por completo. Él no podía creer que estaba emparejado con Stevenson, mierda, es que ni siquiera se sabía su nombre, y eso, obviamente no era lo peor, lo peor de todo era que simplemente ese hombre no era su alfa. No quería ser infeliz el resto de su vida, y si no podía estar con Harry no quería estar, tan simple como eso. No quería su libertad si no la iba a compartir con Harry, no quería seguir con todo esto si Harry no estaba a su lado, prefería colgarse en ese lugar antes de salir de allí para hacerle de mucama a el enfermo mental de Stevenson.

Todo era mejor que la opción de aceptar a ese hombre como su alfa.

Así que se decidió. No iba seguir con toda esta mierda, todo estaba perdido por culpa de ese asqueroso hombre. En su próxima cita con los fiscales le diría, no me importaba si arruinaba la investigación saliéndose de todo eso.

Suspiró. Era mentira. Obviamente le importaba, obviamente quería salvar a los omegas. Mierda. Pero no quería la libertad, no quería absolutamente nada. Quería recostarse con Harry por toda la eternidad. Bueno, sabía que mencionaba a Harry cada dos segundos pero es que era él, era su alfa, era su hombre. Era su destinado. Estaba seguro que si no estaba con él ahora que lo encontró iba a pudrirse y era literal.

jail ; omegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora