Como lo había predicho Lagan, el arribo de uno de los temibles discípulos de Kylo Ren había sucedido sin su presencia. Cuando la figura del Caballero de Ren hizo acto de presencia en las instalaciones de la base de La Primera Orden, la tensión en el planeta podría cortarse fácilmente con una tijera. No se podía respirar, los corazones estaban agitados y la incertidumbre de los nuevos como en el caso de Hanna, era algo que los había mantenido despiertos toda la noche y aterrados con él allí.
— Las provisiones están siendo cargadas, suponemos que para el mediodía la carga llegará a la base como se pactó.
— Excelente, finalmente hacen bien su trabajo —ironizó Temiri Blagg. Sus ojos era lo único que se podía apreciar con claridad, quizá apenas un cuarto de sus mejillas pálidas. El resto de su rostro estaba tapado por una tela negra que no dejaba ver ni imaginar lo que tapaba con ahínco. El sable de luz lo mantenía en su cintura que de vez en cuando era escondido por su larga capa que rozaba sus talones —. Me quedaré a supervisar las cargas de un mes o dos. Luego regresaré para dar las noticias al Líder Supremo de su competencia o como en todos los casos, de su inevitable incompetencia.
— Sí, señor —dijo uno de los generales mientras bajaba su cabeza.
Que Temiri Blagg estuviese pavonéandose con sus aires de grandeza aumentaba aún más la presión a la que realmente se habían habituado como esclavos. La piloto de La Resistencia, por su parte, intentó seguir el ritmo de sus compañeros cargando las piezas y adelantándose en lo posible a los errores futuros. Lo cierto es que, al final de la jornada, habían terminado con una horrible contractura y una jaqueca del infierno.
— Llevamos un buen tiempo sin recibir visitas tan importantes como estas. Primero la niña y ahora Temiri Blagg —reflexionó Erze con cierto tono cauteloso mientras de vez en cuando miraba por encima de su hombro —. Algo debe estar aquejando al Líder Supremo, tal vez La Resistencia logró descubrir algo.
— ¿Crees en serio que el niño alguna vez esclavo anuncie el fin de una guerra tan eterna como nuestro sueños de ser libres? —se mofó Alyssa negando con su cabeza —. No me des esperanzas, anciano.
— ¿Quién es Líder Supremo? — preguntó Hanna apenas en un murmullo cuando notó que un par de Stormtroopers pasaran justo enfrente de todos ellos.
— Había olvidado que no recuerdas nada —dijo el anciano chasqueando la lengua —. Su nombre es Snoke, es un nombre que muchos se dan el lujo de pronunciar sin medir cuán peligroso podría ser; hay rumores de que fue él quien sedujo a Kylo Ren para tomar su lugar como Líder Supremo en un futuro no muy lejano. Hay muchos que piensan que Kylo Ren podría ser quien conquiste la galaxia con su humor negro y sus rabietas. Tiene un pie en el éxito, no cabe duda.
— ¿Y el otro?
— La Resistencia lo tiene amarrado con uñas y dientes —sonrió negando con su cabeza —. Derrocar a la Primera Orden sigue siendo para mí un sueño muy lejano, la General Organa debería dejar de insistir en seguir peleando y perdiendo gente valiosa.
—Sucede que el anciano ha perdido sus ganas de luchar —dijo Kaul golpeando sus rodillas con sus manos para luego colocarse de pie —. Él cree que tener tres comidas al día, subirse a un carguero y tener un catre donde dormir es suficiente. Pero, ¿sabes una cosa, mocosa? La vida es mucho más que eso, la vida está más allá de esta porquería, en una granja —murmuró mirando a Alyssa —, en dunas arena, en los lagos, en donde sea menos aquí. Y mientras pensemos así lo que nos hace esclavos pierde su efecto real —Kaul suspiró —. No comparto las ideas de La Resistencia, pero es lo más cercano a un pensamiento de libertad.
La muchacha no escuchó aquello último. Una voz lejana, un susurro poderoso había nublado sus sentidos; estaba allí, podía escuchar en apenas un murmullo a los demás, pero una parte de sí misma se había marchado de ahí. ¿Dónde estaba? ¿Qué eran esas veces? ¿A quiénes les pertenecía? Formaban parte de una larga lista de interrogantes que se sumaban a las del primer día que había llegado a ese lugar.
Tu nombre es Hanna, Hanna Solo.
Piloto de La Resistencia.
Eres una Skywalker.
Eres una Solo.
Eres parte de muchas partes.
Sensible a la fuerza eres...
Eran voces, voces distintas. Venían de todas partes regresándole a su vida, a su alma, la vitalidad que parecía haber perdido en alguna parte. Se colocó de pie repentinamente llamando la atención de todos los presentes tan fresca como nunca. El valor parecía dominar sus sentidos completamente y el reinicio de su memoria significaba ahora mucho más de lo que hubiera imaginado.
— ¿Estás bien, niña?
— Tengo que regresar a casa —la determinación había teñido su voz.
*
Aquel hormigueo en su pecho había regresado como un puñal. No tuvo más opción que dejar que una de las paredes del ascensor sostuvieran su cuerpo que parecía haber perdido fuerza como si no hubiera comido ni bebido en días. Kylo Ren se vio perturbado por una sensación a la que aún no podía darle nombre o al menos no quería darle uno. Se quitó el casco, asfixiado y sudoroso sin poder evitar caer sentado en el suelo. Intentó decir algo, levantarse pero ninguna de sus extremidades del cuerpo respondían correctamente, el esfuerzo que estaba haciendo, sin embargo, provocó que perdiera el conocimiento.
Fue encontrado por el General Hux que ordenó inmediatamente a que lo trasladaran al ala médica. No le preocupaba si el idiota se moría allí, pero abandonarlo como el perro moribundo que era levantaría sospechas que no tenía tiempo de tapar. Además, el favoritismo de Snoke por Kylo Ren superaba sus ansias de verlo morir. Lo último que necesitaba era perder su valiosa vida por alguien como él.
— Parece que ya ni si quieras eres consciente de los lugares que eliges para tomar una siesta.
— Y usted, General parece emocionado de verme despierto — este sonrió con desagrado mientras rodeaba la cápsula médica con una odiosa serenidad —. ¿Cuál es el diagnóstico?
— Está en perfectas condiciones — murmuró llevando sus manos detrás de su espalda —. Así que me gustaría preguntar qué es lo que crees usted que ha sucedido en realidad.
Kylo Ren tardó un par de minutos en responder. Luz, oscuridad había sentido un poco de ambos pero con una intensidad que casi lo había matado. Una perturbación en la fuerza tan violenta como aquella tan sólo significaba una cosa.
— Un nuevo despertar de la fuerza ha nacido —murmuró con su mirada fija en el techo.
— Vaya, eso es inesperado, ¿no?
Kylo Ren no se daba una idea de ello y mucho menos lo haría Armitage Hux. Las cosas podrían tomar un peligroso giro y todo lo que tenían planeado no sería más que basura.
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Hanna Solo [Completa]
Fanfiction·Episodio I· "La búsqueda de Hanna la llevará a encontrarse con nuevas y exóticas experiencias que, lejos de la protección de su familia, la empujarán hacia las casualidades más impensables que la ayudarán a tomar decisiones importantes para constru...