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Saqué primero toda mi ropa y la colgué de nuevo en el armario, eso me llevo un poco menos de una hora. Sentía sueño, pero no debía dormirme si quería adaptarme a este horario, así que opte por llamar a Jesse. Era mi amigo desde que empece a trabajar en fotografía, lo había conocido desde entonces, cuando alguna oportunidad se nos presentaba alguno de los dos allí estaba el otro apoyando. 

Teclee su numero en mi móvil y espere que sonara.

-¿___?- pregunto, meramente sorprendido.

-Hola Jesse- dije 

-¿no sale costosa la llamada?

-Emm-- no, no si llamas desde la misma ciudad-dije 

-¿desde la misma ciudad?- inquirió, confundido sin duda. 

-Estoy aquí, Jess- musite. 

-¿Estas aquí? ¿tan pronto?¿ enserio?- me reí por como sonaron sus preguntas juntas.

-Ven y te cuento- dije. 

-¿Estas en tu casa?- pregunto y yo suspire. 

-Si.

-Esta bien, ya voy, espérame 

- No tengo a donde ir- me reí 

-Cierto, ya voy- trunco la llamada y yo me deje caer en la cama. 

Jesse era el único con quien podía contar para algo, teniendo en cuenta ahora que, ya no me quedaba nadie mas.

A los pocos minutos, Jesse llamo a mi puerta y cuando lo vi, no pude evitar abrazarle. Seguía igual de delgado y tan alto que me dejaba a la altura de su hombro. Tenia ese tono piel morena que se asemejaba al oscuro de la Siena pero era mucho mas claro. 

-¡__! que gusto me da verte!.- me dijo, correspondiendo el abrazo- Pensé que te ibas a quedar a pasar Navidad y Año Nuevo con Lauren- musito confundido. 

-Si, yo también lo pensé- baje la mirada

-¿Paso algo? ¿tuvieron problemas?

-Pasa te cuento- lo tome de la mano y lo introduje hasta mi casa. 

Estando a la mesa, mientras tomábamos un poco de chocolate caliente comencé por algo simple.

-¿tu sabias que Lauren tenia novia?-pregunte. 

-¿Que Lauren tenia novia? ¿como? ¿después de Jairo?- pregunto abriendo los ojos tan grandes como pudo. 

Jesse era amigo de las dos, mucho antes de que Lauren se fuera a Vencia y desgraciadamente, Jairo, el ex novio de Lauren, era su amigo también. 

-Si, se llama Laura.

-Vaya, pues no lo sabia. 

-Ni yo- admití- Hasta que llegue a Venecia y me tope con ella

-¿es un ella?-dijo aun mas sorprendido 

-Si- dije suspirando 

-¿y cual fue el problema?- dijo tomando de su taza caliente. 

Entonces le conté toda la historia a Jesse, no tenia ni la mas mínima preocupación porque el tiempo se fuera, por que el tenia tiempo para mi, yo no significaba nada. Ademas, Jesse era la única persona que me quedaba cerca, ya no tenia un mejor amigo, ni mejor amiga, tampoco había que me diera flore, ni una chica que me entendiera y me aconsejara.... toda se había acabado en Venecia, tan lejos de mi. 

-Vaya... jamas lo imagine- musito Jesse, habiendo acabado de escuchar mi relato- Parece historia de novela

-Si, ¿y adivina que? La mala soy yo- musite 

El Manual de lo Prohibido. (Laura Pergolizzi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora