Cuenta atras

|| Día 1 y...Consejos de amor con Hinata||

Narra Konohamaru

Me encontraba desayunando mientras recordaba mi sueño de anoche, y si, soñé con ella de solo recordarlo me sonrojo y sonrió como el bobo enamorado que soy 

Flashback

Me encontraba caminado cerca del rió del la aldea de la hoja cuando siento unos brazos que me abrazan por la espalda

-¡konohamaru!

Reconoci la vos de Moegi, la recococeria en cualquier lado del mundo

-Moegi...-me gire para verla.

Traía puesto un vestido de tirantes azul marino corto que le llegaba hasta las rodillas, era sencillo pero en ella se veía hermoso, ella era hermosa. Ella me miro a los ojos mientras me sonreía y me acariciaba mi mejilla derecha.

Yo solo la tome de la cintura pegándola más a mi y me limitaba disfrutar de sus carias hasta que me fui acercando a ella.

Estaba por besarla hasta que... desperté

-¿Ahora como te saco de mi cabeza?-pensar en ella me vuelve loco-...y más importante ¿como te digo lo que siento?

Salí de mi departamento pero antes de irme tome el libro de Moegi. Tenia una semana libre así que tenia tiempo para pensar en como declararmele a ella.

No tenia ni idea como hacerlo así  lo mejor pedir consejos, y pensé en alguien para que me aconsejara

- Veamos...Udon ni de chiste...Naruto...no,¡NO! definitivamente no ... pero...Hinata, es buena idea

Me dirigí a casa a Casa de los Uzumaki, no estaba muy lejos, sali en el río de mi sueño, algún día la traeré aquí y tal vez, solo tal vez le cuente de mi sueño de anoche.

Tome aire un segundo antes de tocar la puerta, toque, espere unos segundos y la pequeña Himawari me abrió la puerta, cuando se dio cuenta de que era yo se lanzo a abrazarme.

-¡Tio Konohamaru!

-¿Como estas princesa?- la levante en brazos.

-¿Vienes a jugar conmigo?

-Hoy no princesa, tengo que hablar con...

-Konohamaru- era Hinata-  si vienes a buscar a Naruto-kun el esta trabajando

-No Hinata-san, vengo a hablar contigo- baje a Hima y entro  la casa- Necesito un consejo...- Esto es vergonzoso- Un consejo de amor...-me sonroje

-¿Un... consejo de amor?- En seguida me sonrió comprensiva como es- ¿Gustas un café?

-...Si...-no pude evitar sonreír, sabia que ella me entendería

Entramos a la casa y Hinata hizo dos tazas de café y nos sentamos en la mesa de la sala.

-Cuéntame... ¿Por que necesitas un consejo de amor?¿ Es por... Moegi?

-Como lo supiste...

-Una mujer siempre sabe, muy bien, cuéntame que paso

Le conté todo de principio a fin, ella solo se limitaba a escucharme.

-Y eso fue lo que paso

-¿Y ahora no sabes como decirle lo que sientes?

-Ese es mi problema... 

- Esta bien, has lo que te digo- Me sonrió como si ya tuera una solución- Cierra los ojos.

Obedecí.

-Piensa en los recuerdas que tengas con ella y dime lo que ames de ella y que sientes cuando estas con ella

Empece respire y me relaje y en ese momento los recuerdos llenaron mi mente.

-Ella es hermosa... En todos los sentidos... Es muy inteligente...Sus ojos son los más hermosos que he visto en mi vida...Me encanta su personalidad...Cuando se sonroja se vuelve la persona más tierna...Cuando se ríe, me contagia la risa...Me encanta su dedicación... Su cabello suelto le queda precioso...Se me acelera el corazón cuando esta cerca, o pienso en ella... La idea de perderla me genera un vació en el pecho tan grande que no lo soporto... Y cuando Udon dijo que estaba enamorado de ella, la idea de ellos juntos me dolió y me enfureció la idea de que se alejara de mi, y se que no soy su dueño pero... no seria lo mismo sin ella, mi vida sin ella no seria lo mismo...Verla triste me lastima, yo lo único que deseo es su felicidad... Yo...La amo...Estoy enamorado de ella

Cuando termine la sala quedo en silencio total

-Abre los ojos- me pidió Hinata y los abri- lo ves-me sonrio- ya sabes que decirle

-...Hinata-san... Gracias, Muchas gracias por ayudarme

-De nada, voy a hacer el almuerzo ¿Quieres quedarte a almorzar?

-No gracias... tengo que irme

-Esta bien, sabes que puedes venir cuando quieras

-Muchas gracias Hinata, que tengas un buen día

Salí de la casa más feliz, ya sabia como declararme a Moegi, ahora solo necesitaba saber cuando y donde le diría lo que siento. Estaba tan concentrado en mis pensamientos que, otra vez choque con alguien

-Perdóneme...¿Lemon?- Esto no podía estar pasando, no ahora.

-No, esta bien...¿Konohamaru?¡Konohamaru!

-¿Que haces aquí?- 

-Quería verte... Necesito un consejo tuyo

-Konohamaru...- Escuche a mi espalda, la voz de Moegi

Cuando voltio ahí estaba ella, con una mirada triste y sorprendida que me  rompió el corazón ¿Ahora que?