Desacato

Encuentro

**Ariadna hermana de Neo en la foto**

Pov Neo

Me levanté pesadamente con el sonido de la alarma y observé detenidamente mi habitación desordenada, suspire y me puse en marcha, mi hermana tenía un revuelo en la cocina yendo de un lugar a otro con sus planos regados por todo el lugar.

-Neo por favor ayúdame a mover esto a la sala necesito que hagas el desayuno, es realmente tarde no acabaré a tiempo- le obedecí y moví todo lo que pude, preparé algo sencillo para que ella comiera rápidamente y continuará con sus tareas, ya eran las 6:20 cuando terminó el último plano y corrió hacía el baño para ducharse.

-Me voy yendo, que tengas un buen día - le grité saliendo del apartamento y ella asomo una mano desde el baño.

El día había transcurrido de lo más normal en el instituto, los maestros hablaban sin parar y todos tomaban apuntes para los exámenes finales del periodo; la tan esperada campana del descanso sonó, era eterno estar en ese infierno, si eras yo, pero mis dos ángeles llegaron para salvarme.

-Demonio rebelde- gritó Mara desde la distancia.

-Demonio enana- le contesté, y Annie sonrió alegremente.

-Llegaron justo a tiempo muero de hambre, vamos por algo de alimento divino- caminamos hasta la cafetería que estaba por demás abarrotada de estudiantes hambrientos.

Annie nos tomó de las manos y nos escabullimos entre el aglomerado, de un momento a otro ya teníamos comida, Mara se apoderó de una hamburguesa y unas frituras, Annie llevaba un pedazo de pastel y un yogurt de frutas, yo le robe a no se quien un jugo de naranja, una baguette y ¿gomitas?, ambas me vieron al notar que no sabía de donde había sacado las gomitas y se rieron. Pagamos todo y salimos del campo de batalla.

-Ayer asistí a la fiesta de cumpleaños de la niña que me llamó Príncipe- comente lo más natural posible, Mara y Annie abrieron los ojos como platos, segundos después estallaron sus risas.

-No imagino de donde vio que eras un príncipe- Mara se burlo.

-Creo que eres más un delincuente- añadió Annie.

-Yo creo lo mismo, pero ella no dejó de decírmelo, incluso me vistió de uno, aparte tiene un hermano idiota que me molesta cada que me ve.

Mara y Annie intercambiaron miradas.

-¿Se puede saber porqué te molesta?

-Por que defendí a su hermana cuando él la estaba regañando, ¿recuerdan el día que comimos hamburguesas en mi descanso?, ese día fue cuando los conocí.

Asintieron y seguimos comiendo para regresar a clases. 

La escuela termino para mi alivio, y salí disparado poniendo mi gorro y los auriculares, camine hacia el parque abandonado, unas cuadras más adelante del apartamento donde vivíamos, llegando, una ráfaga de aire helado me recibió, me recosté debajo del mismo árbol de siempre, escuchando detenidamente la música... 

No sé en qué momento pero abrí los ojos desorientado, mire al rededor y caí en la cuenta que me había quedado dormido, observe la hora en el teléfono, sorprendido de haberme quedado una hora en la intemperie, me maravilla de no haber sido asaltado en ese tiempo, corrí de regreso a casa esperando el regaño de mi hermana por la hora, subí las escaleras apresuradamente, maldito quinto piso, no se porque no elegimos el segundo piso cuando no estaba ocupado, la puerta ya estaba frente a mi.

-Neo, ¿quieres comer algo?- Mi hermana me llamo desde la barra donde se encontraba con un chico comiendo, lo vi de reojo, lo reconocí al instante, es el idiota, me puse un poco nervioso al verlo tranquilo comiendo lo que sea que ordenaron, me escondí aun más en mi suéter.