—¿Eliza y Summer? —Preguntó mi padre
—La dejé en casa de una amiga, porque tenía que hacer un trabajo para la escuela y la mamá la traería cuando terminarán —Sonreí inocentemente
Me analizó por unos segundos que me parecieron eternos —Esta bien, no llegues tan tarde —Me dió un beso en la frente y se marchó a su habitación.
Después de tanto tiempo hoy por fin saldría con mis mejores amigos a un nuevo antro que habían abierto al centro de la ciudad.
Ezriel **Estoy afuera**
—Chicas está será nuestra noche —Dijo cuando subí al auto, en la parte trasera venían Adam y Jimena, y aunque habíamos quedado de salir solo los 3, Adam no nos molestaba en absoluto, siempre dejaba a Jimena hacer lo que quisiera.
—¿Ya vieron la fila? —Jimena hizo un puchero, como si no supiera que obviamente entraríamos sin tener que formarnos
a veces se nos olvidaba que salíamos con una estrella, cuando llegamos a la fila muchas chicas se alborotaron al ver a Ezriel algo normal que sucedía cada vez que salíamos de fiesta, le pedían que se tomará fotos algunos autógrafos, otras se lo besuqueaban o le agarraban las nalgas, cosa que a él no le disgustaba nada, siempre decía "Que era su sacrificio hacía sus fans".
(...)
—¿Tomaremos hasta olvidar nuestro nombre? —dijo Jimena al ver a Ezriel entrar con un sin fin de bebidas
—Tomaremos hasta olvidar el nombre sin duda —Agarre el primer trago que quemó un poco mi garganta, era delicioso cuando eso pasaba, pues sentía como el alcohol recorría mi cuerpo y me sentía más despierta.
—Por la mejor noche —Dijo Ezriel y todos chocamos ligeramente nuestro trago.
Tenía tanto tiempo sin salir de antro que sin duda lo quería disfrutar al máximo, bailar y que el alcohol hiciera sus estragos en mí, quería disfrutar la noche que apenas estaba empezando.
—Vamos a bailar —Tome de la mano a Ezriel que se había quedado con una chica de un acento raro, no sabía distinguir si era inglesa o de algún otro lado.
—Me acabas de arruinar la mejor conquista de la noche
Puedes conseguir más de esas Ezriel —Nego con la cabeza y aún así nos fuimos a la pista que empezaba a llenarse sonaba señorita de Shawn Mendez, empezamos a bailar según al ritmo de la música, Ezriel era un excelente bailarín pero siempre que estábamos juntos jugábamos bailando. Tomaba mi cabello dándole un toque más sensual al baile mientras él acercaba su cuerpo y movía mis caderas al compás de él. Amaba esa canción y de momentos la cantaba a todo el volumen que me fuera posible. Así estuvimos por unas 6 canciones más, algunas las cantaramos algunas no, porque estaban en otro idioma pero sin importar eso, nos divertíamos.
—Quieres bailar —Un tipo de algunos 30 años se acercó a nosotros y me tocó el hombro, lo había visto en la zona de arriba y sus ojos estaban más rojos de lo normal quizá había tomado algo más que solo alcohol.
—Vengo con mis amigos —Me analizó por unos segundos y volvió a insistir
—Anda guapa que solo será un baile no te estoy pidiendo nada más —Mire a Ezriel que también lo estaba analizando, aunque lo más seguro es que el me mandará a bailar con quién fuera.
—Esta bien —extendió la mano para que la tomara y me llevo a bailar al centro de la pista, me preocupaba dejar sólo a mí amigo pero cuando voltee él ya estaba con una pelirroja hermosa, no perdía tiempo.
En su rostro había un par de cicatrices que llamaban mi atención una en la ceja derecha y otra cruzaba por la mejilla, se veían un tanto recientes no como las que te haces cuando eres niño. Sus ojos azules tan intensos le daban un toque más de misterio, todo él parecía un misterio. Era guapo pero no en exceso, así que pues bailar con él un rato no me molestaba en lo absoluto, tenía buen cuerpo, de estatura promedio que en Inglaterra se define como 1.80 m aproximadamente. Traía un colgante de oro alrededor de su cuello, bonito pero llamativo y otro en las manos.
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Siempre Has Sido Tú
Novela JuvenilSegundo libro de "Quiéreme" Eliza Taylor en este libro ya ha crecido ya no es la chica tonta y débil que vimos en el primer libro, su relación con Adrien es más estable así como con todas las personas que la rodean. Pero no todo será color de rosa...