reconciliación

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Narra Leo

—Ya llevamos más de la mitad del proyecto —Dijo con los ojos casi cerrados, se estaba quedando dormida

—Solo falta poquito Els, termina esto último y ya puedes ir a descansar —Tome su mano y deje un  beso en sus nudillos, le sorprendió un poco pero de lo cansada que estaba solo sonrió

—Ya no puedo más Leo, Te prometo que regresando del viaje haré todo lo que hace falta —se recostó en la mesa y bostezó.

—Esta bien —Resople un poco aunque creo que mi acompañante ya estaba hasta soñando

Sin duda está semana había sido muy pesada para ambos, pero nos habíamos atrasado con el proyecto y solo así podíamos alcanzar a sus compañeros que ya estaban culminando y en otras intenciones podía verla todos los días después de clases.

¿Que ilógico no? Romperle el corazón a alguien y después darte cuenta que nadie te hará sentir lo que esa persona, pero bueno creo que fue así como me dí cuenta el porque la quería.

La cargué hasta su habitación era la primera vez que entraba después de terminada nuestra relación, seguía siendo la misma niña dulce que conocí hace casi 5 años, aunque su comportamiento cambio por un tiempo regresó a su esencia principal.

(...)

—¿Eliza estás despierta? —La voz de Will me alertó un poco, no creo que le gustaría encontrarme aquí en la misma cama y abrazando a su "pequeña".

—Que haces aquí Brooks —Sus ojos asustados me daban risa y ternura a la vez —Acuestate en el sillón, me aventó un par de almohadas y una cobija con un unicornio arriba.

Se levantó con el cabello un poco enmarañado y esponjado ¿Podía ser posible que aún así me pareciera perfecta o sonaría muy tonto de mi parte?

—¿Que pasó papi? —contesto con su dulce voz

—¿Que hace Leo aquí?

—Estuvimos hasta muy noche estudiando, me estaba quedando dormida y me trajo a mi habitación. Le dije que se quedará ahí —Supongo que me señaló

Me estiré para que se dieran cuenta que ya estaba despierto

—Ya me dí cuenta que estás haciendo trabajar mucho a mi pequeña Leo,  déjala disfrutar aunque sea este día al lado de su familia

—Estábamos muy atrasados Will —Sonreí inocentemente

—¿Te quedarás a desayunar Leo?

—Tengo muchas cosas que hacer en la oficina, será en otro momento William —bajamos juntos y recogí mis cosas que seguían en el estudio.

Toda la mañana estuve arreglando asuntos del trabajo, no me preocupaba demasiado porque al final de cuentas Adam se quedaría a cargo y manejaría perfectamente todo como yo quería. Lo que más me preocupaba de irme del país por más de un mes era mi niña, no quería dejarla porque era como dejar una parte de mi vida pero tampoco podía llevarla. Mi familia la cuidaría y aunque sabía que la cuidarían como una hija más, mi corazón se comprimía por pensar en su ausencia ¿Y si ella me necesitaba y yo no estaba?. Mi Sky era todo para mí.

—¿Como te fue mi amor? —Mi niña me miraba con alegría

—voy a participar en un recital dentro de 2 semanas —Me miró con tristeza —¿No podrás venir verdad?

—No cariño, aún estaré en Estados Unidos pero te prometo que regresando ya no volveré a faltar a ninguno —Sus ojitos volvieron a iluminarse —Aparte estará Jimena y Adam, también tus abuelos.

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