Solo eres mi hermanastro

Capítulo 2

Me sorprendí al ver cómo me miraba Christian, estaba haciendo un escáner hacia mi persona. Su mirada pasó desde mis converse negras a mis piernas, en lo que para mí concierne demoro más tiempo del necesario, luego por mi estómago, mis pechos y por último mi rostro. Cuando termino me di cuenta que tenía una sonrisa en el rostro.

Paso de verme a ver a mi hermano y esta vez su sonrisa se hizo mucho más grande.

-Gabriel, hermano -Christian se acercó e hicieron esos saludos que solo los chicos saben hacer. Se separaron y Christian se puso enfrente de mí.

-Zue -sonrió y el tono de su voz era algo... ¿meloso?- mira como has crecido

Me tomó por la cintura y me atrajo hacia él en un abrazo, al principio estaba un poco confundida, pero al sentir que su mano bajaba de mi espalda a mi trasero, me alejé para terminar escuchando su risa.

-Christian ¿por qué no les muestras las habitaciones a tus hermanos?, ya es tarde y mañana tienen que ir a la escuela, así que mejor duerman de inmediato.

Gabriel y yo seguimos a Christian por la escalera, encontrándonos con varias puertas. La primer habitación que incluía baño y era mucho más grande, obviamente era de mi mamá y de mi "papá", no tengo ningún problema con referirme hacía él como mi papá, pero tampoco estaba acostumbrada a llamarle así, él siempre ha tenido una buena actitud con Gabriel y conmigo, nos ha tratado como si en realidad fuéramos sus hijos, recibimos el mismo trato que recibe Christian por parte de Enrique, su papá. 

Continuamos el recorrido por el pasillo y la segunda habitación era de Gabriel, el interior de esta era de color azul y tenía unos estantes blancos, que hacían juego, a decir verdad no era nada del otro mundo. Seguimos a Christian por el pasillo, nos enseñó el baño el cual sería "compartido" entre Gabriel y Christian, Gabriel al saber cual era su habitación se quedo en esta para ir a acostarse y descansar.

Christian y yo llegamos a otra puerta blanca, como todas las demás y esta era la habitación de Christian, era similar a la de Gabriel, la diferencia es que esta habitación era de un color más obscuro. Era claro que la siguiente puerta iba a ser mi habitación, evidentemente no quería estar cerca de Christian, después de haber notado como me había mirado segundos atrás y mucho menos cuando me abrazó y me tocó el trasero.  Christian abrió la puerta y vi que esta habitación era diferente, entonces me di cuenta que efectivamente esta habitación iba a ser mía... Estaba algo emocionada y desilusionada, me encantaba la habitación, esta era mucho mejor que la de Christian y la de Gabriel. Las paredes estaban pintadas de un color crema, había una cama enorme y se veía muy cómoda, con varias almohadas, un closet que de igual forma era grande, un escritorio y una televisión, esta habitación tenía su propio baño, al parecer iba a estar muy cómoda en mi nueva habitación. 

- ¿te gusta? -me di vuelta sonriendo y asentí con la cabeza, mientras que Christian estaba cruzado de brazos y apoyado en la puerta-

-Bueno, te aviso que la habitación de alado es mía y siempre que quieras eres bienvenida... Sobre todo en las noches. -lo mire arqueando una ceja y el mostró su sonrisa pervertida-

********
El despertador sonó y eso basto para que mi mal humor llegara, esto era injusto, acabamos de llegar no nos pueden hacer esto. Me dijeron que aquí no debo de llevar uniforme, era mala idea ya que no tenía buen gusto para vestir, así que me puse unos jeans negros, una blusa de tirantes ajustada color café y una chamarra de piel café y obvio no podían faltar mis converse negras.

Baje hasta la cocina donde estaban todos.

- ¿Cariño quieres comer algo? - asentí con la cabeza y mi madre se paró me sirvió cereal y pan tostado con mermelada de fresa, terminé mi desayuno y fui a lavarme los dientes-

-Vamos, iremos en mi auto -dijo Christian, quien vestía con una camiseta igual a la de ayer, pero esta vez era negra y unos jeans-

El camino hacia la escuela fue lleno de conversaciones de quien era la mejor chica de la escuela o quien era más fácil de llevar a la cama. Siempre supe que mi hermano era un mujeriego y pervertido, pero escucharlos hablar sobre ese tipo de temas para mí fue bastante incómodo.

-Oigan pueden dejar de hablar con quién van a tener relaciones, por favor, ya bastante sufro al estar en este auto con ustedes dos -estar cerca de uno era tolerable, pero estar con dos, era imposible-

-Tranquila Zue, también hay chicos para ti, aun que pienso que estarás mejor sola

-Tranquilo hermano, no voy a dejar que nadie se acerque a ella -Christian me miro por el retrovisor y me mostró su sonrisa, suspiré agotada de esa actitud y me recosté en el asiento algo fastidiada por el comentario-

La escuela era muy grande, con aspecto antiguo, pero a la vez moderno. Había muchos alumnos en la parte delantera y me entraron unos nervios de los mil demonios cuando empecé a pensar en como es que iba a sobrevivir en un lugar donde no conocía a nadie.

-Zue no estés nerviosa, ya verás que harás amigos -Gabriel al verme nerviosa, se acerco e intento animarme-

-No soy buena haciendo amigos

En verdad, nunca fui una chica sociable ni extrovertida solo soy.... normal. Cuando comenzamos a caminar, muchas personas no observaban, al parecer Christian era muy popular. Las chicas se volteaban y cuchicheaban entre ellas, comiéndose con la mirada a los chicos guapos que caminaban a mi lado.

Christian nos acompañó a la dirección a buscar nuestros horarios. Él y Gabriel tenían los mismos horarios, así que se despidieron de mí.

-Suerte enana -Gabriel desordeno mi cabello, pero en cambio Christian me abrazo y me susurro-

-Suerte en tu primer día, nos vemos a la salida nena...