Solo eres mi hermanastro

Capítulo 4

Cuando la clase terminó tome mis libros y me dispuse a salir junto con Mariana, pero las cuatro chicas de hace rato no nos dejaron, todas tenían una sonrisa y me miraban de manera que no se como interpretar.

-Hola -habló la morena, quien parecía ser la líder del grupo de amigas- soy Sharon, un gusto -estiró su mano derecha hacia mí, estreche mi mano con la de ella no muy confiada, pero lo hice por educación-

-Hola soy Rebeca, pero tú me puedes decir Becca -dijo la chicha rubia e hizo el mismo saludo y estrechamos nuestras manos. Luego miro a Mariana y fingió emoción- ¡Mariana! -gritó y le dio un abrazo, mi amiga no muy convencida se lo devolvió-

-Bueno yo soy Laura y ella es mi hermana Daniela -apuntó a la su gemela, así que salude a ambas-

-Bueno chicas fue un gusto conocerlas, pero Mariana y yo debemos irnos -tome a Mariana del brazo y la jale hasta la puerta, debía alejarme de esas chicas lo antes posible-

-Dime que no te creíste su amabilidad -Mariana me miraba esperando mi respuesta y rogando con la mirada de que esta fuera no-

-Claro que no, esas chicas son más falsas que nada. Tu tenías razón, solo quieren estar conmigo porque Christian es parte de mi familia. Pero dime, ¿por qué Rebeca fue tan "cariñosa" contigo?

-Somos primas, su mamá es hermana de mi papá, ella siempre me ha odiado y ahora solo para impresionarte me trato bien, pero no importa yo también la odio.

Nuestra pequeña platica se vio interrumpida por unos gritos detrás de nosotras hicieron que Mariana y yo volteáramos a ver. Una chica de cabello corto, castaño oscuro, corto y ondulado que corría hacia nosotras gritando el nombre de Mariana.

-Ay por fin te encuentro, me quedé dormida y me perdí la primera clase. Todas las chicas están hablando que el estúpido de Christian llego con una chica y se dice que es su novia ¿cómo es posible que una chica quiera estar con un mujeriego como él?

La chica seguía hablando de lo estúpido que era Christian sin darse cuenta que yo estaba ahí, era un poco gracioso porque Mariana le hacía todas las señas posibles para que se diera cuenta de que yo estaba ahí y dejara de hablar, pero al parecer ella tenía mucho odio hacia Christian. No lo soporte más y comencé a reír, aquella chica por fin se dio cuenta de que estaba ahí.

-Ohh lo siento, debes pensar que soy una maleducada, hola soy Maribel -a diferencia de las otras chicas Maribel me abrazo-

-Hola soy Zuemy, pero puedes decirme Zue y de la supuesta novia de Christian soy yo, pero no soy su novia solo soy su hermana, bueno su hermanastra, pero no quiero entrar en detalles -vi como Maribel palidecía por lo que le había dicho- pero no te preocupes, pienso lo mismo de Christian.

-Bueno será mejor que vayamos al salón porque ya va a comenzar la clase de literatura.

Mariana comenzó a caminar seguida por Maribel y yo. Cuando entramos de nueva cuenta al salón ya no me miraban con odio. Mariana se sentó alado de una chica con lentes y leía un libro, Maribel y yo atrás.

-Así que no te agrada tu hermano -comento Maribel-

-A ti tampoco ¿puedo saber la razón?

-Bueno hace unos meses como toda chica yo estaba loca por Christian, creo que escribía su nombre en donde fuese, como todos aquellos que están enamorados, pero luego comencé a observar que aparte de guiñarme un ojo se lo guiñaba como a unas quince más, aparte de sonreírme lo hacía con las otras. Me di cuenta que le gustaba jugar con las mujeres y luego botarlas, desde ese momento comencé a odiar a hombres como él, que creen que las mujeres somos un juguete con el que pueden divertirse.

Maribel tenía razón, recordé como me vio ayer y me puse a pensar ¿a cuantas chicas ya había visto de esa manera? ¿con cuantas había jugado? ¿Con cuantas se había acostado? Posiblemente con toda la escuela. Me pase toda la clase charlando con Maribel quien era simpática y divertida. Cuando la clase termino las tres fuimos a la cafetería. Mariana y Maribel se dirigieron a una mesa donde se encontraba un chico con una gorra, esperaba sentado mientras comía.

-Hola Sebastián -Maribel corrió y se sentó a su lado, el tal Sebastián levanto la cabeza y sonrió hasta que me vio-

-Sebastián, ella es Zue, Zue él es Sebastián 

-Hola Zue

-Hola

Comenzamos a hablar de inmediato y olvide ir por mi comida. Sebastián era muy simpático, gracioso y amable, sin duda seriamos buenos amigos.

-Zue... -me volteé para ver a Christian y a mi hermano quien tenía una bandeja con comida en sus manos, al principio pensé que se querían sentar con nosotros, pero cuando Gabriel me extendió la bandeja de comida supe que no- ten, deberías dejar de conversar con ese chico y preocúpate más por tu alimentación

Christian observo a Sebastián arqueando una ceja, se acercó a la mesa y con tono burlón dijo

-Hola Sebastián -Sebastián no se quedó atrás y se paró también, quedando cara a cara con Christian-

Al parecer ellos no se llevaban bien, Maribel miraba con odio a Christian y Mariana estaba un poco nerviosa.